Las palabras de S¨¢nchez sobre Catalu?a: ¡°No hay otra forma de resolver este contencioso que el di¨¢logo¡±
Lea el texto ¨ªntegro de la intervenci¨®n del aspirante a la presidencia del Gobierno en el Congreso
Pedro S¨¢nchez ha defendido en su discurso de investidura la necesidad de dar nuevos pasos para resolver el conflicto de Catalu?a. En un simb¨®lico arranque, en el que ha destacado que no se va a romper Espa?a ni la Constituci¨®n por el hecho de que ERC vaya a facilitar su elecci¨®n como presidente del Gobierno por la abstenci¨®n de los independentistas, S¨¢nchez ha querido subrayar que el di¨¢logo debe ser el veh¨ªculo que debe permitir el desbloqueo de una situaci¨®n enquistada.
Esta es la parte ¨ªntegra de la intervenci¨®n del candidato socialista sobre su estrategia en Catalu?a:
Pedro S¨¢nchez:
¡°Sabemos que los sentimientos no se imponen ni se proh¨ªben. Y que la soluci¨®n no vendr¨¢ de la imposici¨®n de una percepci¨®n sobre otra, sino de un cambio de ambas percepciones. Necesitamos recomenzar. Retomar nuestro di¨¢logo pol¨ªtico en el momento en que los caminos se separaron y las razones y los argumentos dejaron de escucharse. Retomar el di¨¢logo en el punto en que los agravios comenzaron a acumularse. Retomar la senda de la pol¨ªtica, dejando atr¨¢s la judicializaci¨®n del conflicto.
Retomar la senda del di¨¢logo, la negociaci¨®n y el pacto. Es nuestra obligaci¨®n. Se lo debemos a nuestros hijos, que merecen vivir en un pa¨ªs unido en su diversidad. No fracturado y confrontado. Todos sabemos que es necesario el di¨¢logo. Que el di¨¢logo debe partir del reconocimiento del otro. De la atenci¨®n a sus razones. Que no hay otra forma de resolver este contencioso. No hay otra v¨ªa que a trav¨¦s de un di¨¢logo que se desarrolle dentro de la Ley. La ley por s¨ª sola tampoco basta. La Ley es la condici¨®n, el di¨¢logo es el camino.
Si queremos comenzar a trabajar honestamente, partamos ya de esas dos premisas: abramos un di¨¢logo honesto, amparado por la seguridad que otorga el marco legal. Tenemos la responsabilidad, todos los partidos presentes en esta C¨¢mara, de arrimar el hombro para reconstruir la cohesi¨®n da?ada. Y hacerlo en torno a una propuesta de Espa?a diversa que se enriquece en la pluralidad de sus identidades, lenguas, culturas y personas.
No resolveremos s¨²bitamente un problema largamente larvado durante la ¨²ltima d¨¦cada. Pero podemos comenzar a resolverlo con paciencia y constancia, templanza y responsabilidad, generosidad y empat¨ªa¡±.
En otra parte del discurso ha a?adido:
¡°Espa?a, tal y como es, ser¨¢ nuestro proyecto, no como algunos quisieran que fuera. Y como ha se?alado la Autoridad Fiscal Independiente, contrariamente a ciertas creencias, el modelo auton¨®mico ha supuesto una mejora de la distribuci¨®n territorial de la renta superior a la de los pa¨ªses de nuestro entorno.
El camino, por tanto, no puede ser el de la involuci¨®n sino el de la mejora, la reforma y la actualizaci¨®n de nuestro sistema. Siempre garantizando la igualdad entre todos los espa?oles.
El nuestro es un modelo complejo, es evidente. Pero la complejidad no es m¨¢s que una manifestaci¨®n de la diversidad y no puede convertirse en un pretexto para no avanzar. Ha de ser un est¨ªmulo para el consenso y el di¨¢logo desde una premisa: exige voluntad de compartir el poder, de limitar el poder.
Vamos a mejorar los mecanismos de colaboraci¨®n institucional con todas las comunidades aut¨®nomas. En ese contexto, el Gobierno abordar¨¢ el conflicto pol¨ªtico en Catalu?a impulsando mesas de di¨¢logo en el ¨¢mbito de Catalu?a y tambi¨¦n entre el Gobierno de Espa?a y la Generalitat de Catalu?a. Insisto, siempre dentro del marco constitucional.
Colaboraremos con el Gobierno vasco en el cumplimiento de las transferencias pendientes del actual Estatuto, y en la renovaci¨®n que del mismo quiera hacer el Parlamento vasco.
Es imprescindible clarificar el reparto competencial entre Estado y poder auton¨®mico. Al hacerlo, estaremos combatiendo uno de los efectos m¨¢s perversos del actual sistema: el de la incertidumbre normativa que producen los conflictos competenciales. M¨¢s eficiencia, m¨¢s claridad, m¨¢s concreci¨®n en el reparto competencial tiene retornos para la sociedad y para los actores econ¨®micos. Significa menos conflicto y m¨¢s claridad.
Del mismo modo, vamos a promover la participaci¨®n de las comunidades aut¨®nomas en las decisiones del Estado y del Estado en las actuaciones auton¨®micas cuando est¨¦ afectado el inter¨¦s general. Y propiciar un intercambio de informaci¨®n real para favorecer una aut¨¦ntica integraci¨®n entre ambos poderes. Esta que se inicia debe ser la legislatura del di¨¢logo, en general, y del di¨¢logo territorial en particular. Y promoveremos para ello la constituci¨®n formal de las Conferencias de Presidentes con car¨¢cter anual¡±.
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