S¨¢nchez consuma el giro de la pol¨ªtica exterior espa?ola hacia Venezuela

Espa?a ha evidenciado con un gesto elocuente el giro dado a la pol¨ªtica de Venezuela. La ausencia del presidente, Pedro S¨¢nchez, el pasado s¨¢bado durante la visita a Madrid de Juan Guaid¨® ¡ªen principio su hom¨®logo venezolano¡ª pes¨® m¨¢s que cualquier argumentaci¨®n pol¨ªtica. El Ministerio de Exteriores reh¨²sa explicar oficialmente a qu¨¦ obedece el cambio y argumenta que la ministra era la persona adecuada para recibirlo porque dirige la pol¨ªtica exterior espa?ola.

En realidad, el gesto de S¨¢nchez no es m¨¢s que la culminaci¨®n de un cambio de estrategia paulatino, labrado durante el a?o que ha transcurrido desde el reconocimiento solemne de Guaid¨® como presidente encargado de Venezuela, seg¨²n la formulaci¨®n at¨ªpica que escogi¨® el presidente del Gobierno espa?ol, y el desplante del pasado s¨¢bado. Una de las claves de esa evoluci¨®n reside precisamente en el nombre peculiar dado al mandatario venezolano, presidente tambi¨¦n de la Asamblea Nacional (el poder legislativo que Nicol¨¢s Maduro ha tratado de reemplazar por uno nuevo, la Asamblea Constituyente). Porque de lo que quedaba encargado Guaid¨® ¡ªpara S¨¢nchez y para los dirigentes de la UE que lo reconocieron¡ª era de convocar elecciones presidenciales en Venezuela en el plazo m¨¢s breve posible. La diplomacia pronto comprob¨® que, sin contactar con representantes del r¨¦gimen, la tarea de convocar elecciones y de propiciar cualquier di¨¢logo resultaba imposible. De ah¨ª surgi¨® la idea del grupo de contacto promovido por la UE, a iniciativa de Espa?a.

Esta constituy¨® siempre la postura de Exteriores. Se trata de lo que una fuente conocedora de las pol¨ªticas hacia Latinoam¨¦rica denomina diplomacia tradicional: tratar con todo el que ejerce el poder para poder influir. La novedad es que S¨¢nchez, que en su d¨ªa telefone¨® a los l¨ªderes de los grandes Estados de la UE para convencerlos de que reconocieran a Juan Guaid¨® como presidente interino de Venezuela, seg¨²n explican fuentes diplom¨¢ticas de un Estado comunitario, haya cambiado tanto su gestualidad. De comparecer en La Moncloa para reconocer a Guaid¨®, a finales de enero de 2019, ha pasado a eludir citarse con el dirigente interino en Madrid.

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M¨¢s all¨¢ de la evoluci¨®n de la situaci¨®n en Venezuela, el ¨²nico cambio de calado que se ha producido en el panorama pol¨ªtico espa?ol ha sido la entrada en el Gobierno de Podemos, un partido reacio al reconocimiento de Guaid¨® como dirigente venezolano. Sin entrar en esta clave, fuentes del entorno de S¨¢nchez esgrimieron el pasado fin de semana que el presidente trata de ¡°salvaguardar lo m¨¢s posible el papel de Espa?a como pa¨ªs que ayuda a todo el mundo¡±.

Las fuentes consultadas en Exteriores, que exigen anonimato, niegan tambi¨¦n el giro pero admiten que la pol¨ªtica ha ido adapt¨¢ndose a las cambiantes circunstancias a lo largo de este a?o. ¡°El giro es m¨¢s bien un matiz hacia el realismo. Hay conciencia de que se impone una negociaci¨®n con el r¨¦gimen de Maduro, y que Guaid¨® debe intentarlo mientras mantiene unida a la oposici¨®n y, por otra parte, los actores externos contin¨²an presionando, tambi¨¦n v¨ªa sanciones¡±, explica una persona conocedora de estas pol¨ªticas. Otras fuentes aluden m¨¢s espec¨ªficamente a la funci¨®n que quiere desempe?ar Espa?a para facilitar el di¨¢logo. Recibir a Guaid¨® en este momento habr¨ªa dado a entender, seg¨²n esa interpretaci¨®n, que Espa?a tomaba partido.

La ministra de Exteriores, Arancha Gonz¨¢lez Laya, neg¨® tambi¨¦n el pasado viernes que estos gestos constituyan un cambio de estrategia. ¡°La posici¨®n no ha cambiado un ¨¢pice¡±, sostuvo la jefa de la diplomacia en una breve entrevista concedida a la cadena SER. A la vez, apel¨® a la necesidad de ¡°ser un poquito m¨¢s discretos en los contactos¡± para propiciar el acercamiento de posturas y abog¨® por ¡°encontrar una soluci¨®n para que en Venezuela se celebren elecciones limpias y democr¨¢ticas¡±.