¡°?Nos vamos por lo digital? S¨ª, pero, ?qui¨¦n nos va a acompa?ar?¡±
?ngel Gurr¨ªa (1950, Tampico, M¨¦xico), secretario general de la OCDE, cree en la transformaci¨®n digital. En Iberoam¨¦rica y en todas partes. Pero tiene claro que la tecnolog¨ªa no es el fin en s¨ª mismo sino el medio y le preocupa que el mercado laboral est¨¦ haciendo los deberes para que el cambio de paradigma econ¨®mico, tildado ya de nueva revoluci¨®n industrial, sea posible. RETINA lo entrevist¨® en exclusiva para analizar c¨®mo esta disrupci¨®n est¨¢ cambiando la econom¨ªa presente.
Pregunta. ?La transformaci¨®n digital es el ¨²nico camino posible para la econom¨ªa futura?
Respuesta. Lo digital, lo cibern¨¦tico, lo tecnol¨®gico son instrumentos para poder llevar a cabo mejores pol¨ªticas para una vida mejor. Pero no son objetivos per se. Hay que entenderlos, adoptarlos y adaptarlos a las circunstancias del sector, del pa¨ªs, de la empresa, de la escuela, del centro de investigaci¨®n, del ni?o, del joven o del universitario. Lo digital, el big data, la impresi¨®n 3D, el cloud computing¡ Te dan m¨¢s opciones para reducir los tiempos, aumentar la precisi¨®n y la seguridad de los datos que se usan y procesar un volumen de informaci¨®n inconcebible hace muy poco. Todos estos paradigmas tecnol¨®gicos se pueden resumir en una palabra: posibilidades. Potencial. Ahora bien, ?c¨®mo lo aprovechamos? Ese es el principal reto.
P. ?C¨®mo se encuentra Latinoam¨¦rica en esta transformaci¨®n?
R. Todo el mundo est¨¢ atrasado de la frontera tecnol¨®gica. Y esto incluye pa¨ªses como Alemania, que solo tiene un porcentaje baj¨ªsimo de conexiones de fibra. Y tienes pa¨ªses como Estonia que es tal vez el pa¨ªs m¨¢s conectado del mundo. El estado tecnol¨®gico no tiene nada que ver con las regiones. Cada pa¨ªs tiene una historia. De hecho, uno de los grandes problemas es que Europa no est¨¢ integrada. Se trate de energ¨ªa, electricidad o Internet, no est¨¢ integrado. Los espa?oles lo saben bien porque por ejemplo Telef¨®nica est¨¢ abriendo empresas en muchos pa¨ªses pero en cada uno se tiene que manejar con una empresa local en un mercado local. Igual que Iberdrola o Abengoa. La misma Espa?a apenas est¨¢ conectada con Portugal. Esto provoca que, para empezar, haya que tomar una serie de decisiones b¨¢sicas para conectar los pa¨ªses antes de pensar en las grandes aventuras.
En el caso de Am¨¦rica Latina. M¨¦xico tiene una estrategia digital nacional que dice: ¡°queremos que M¨¦xico sea un pa¨ªs l¨ªder en la transformaci¨®n digital de Am¨¦rica Latina¡±. Eso est¨¢ muy bien. Los brasile?os tienen un programa de software y TIC para intentar competir por el liderazgo. Colombia tiene el plan Vive Digital, con cinco o seis a?os, que incluye la iniciativa del Talento digital. Pero adem¨¢s est¨¢n formando gente: tienen unos 60.000 expertos en TIC.
Pero para todas estas iniciativas, yo te pregunto, ?tenemos a la fuerza de trabajo que pueda apoyar esto?
P. Parece ser que no [a nivel espa?ol, RETINA analiz¨® en exclusiva los datos de Jobandtalent para demostrar que las TIC ofrecen mayor n¨²mero de empleos con el mejor trabajo para el menor n¨²mero de candidatos posibles].
R. ?Skills, skills, skills! O competencias, competencias, competencias. Nosotros hemos hecho el diagn¨®stico y en todas partes hay un problema de carencia. Para aprovechar lo digital, m¨¢s que un genio, un Mark Zuckerberg, tienes que tener fuerza de trabajo. El 40% de la fuerza de trabajo mundial tiene sus habilidades por debajo de lo necesario para que no los sustituyan por m¨¢quinas. Hay un problema de adecuaci¨®n de las competencias a lo que demanda el mercado. ?Nos vamos por lo digital? Por supuesto que s¨ª. Pero a ver qui¨¦n nos va a acompa?ar.
"El 40% de la fuerza de trabajo mundial tiene sus habilidades por debajo de lo necesario para que no los sustituyan por m¨¢quinas"
Si este problema lo tienes en Espa?a o en Alemania, imag¨ªnate en Am¨¦rica Latina, donde tienes niveles de educaci¨®n y digitalizaci¨®n mucho m¨¢s bajos y situaciones de monopolio que no permiten una competencia para que se generalice el beneficio de la tecnolog¨ªa. Esto provoca que la brecha entre los que se aprovechan de la tecnolog¨ªa y los que no vaya creciendo cada vez m¨¢s en la regi¨®n. En Canc¨²n, del 21 al 23 de junio durante una reuni¨®n ministerial mundial, presentaremos un trabajo que hemos hecho sobre Am¨¦rica Latina y la cuesti¨®n digital. Ser¨¢ una de las contribuciones clave para la discusi¨®n y el debate en esta cita. La idea es ofrecer una especie de caja de herramientas para poder ayudar a cualquier pa¨ªs en esta transformaci¨®n.
P. En el informe de diciembre de la OECD se se?ala la necesidad de una nueva relaci¨®n entre China y Latinoam¨¦rica. ?Qu¨¦ papel juega lo digital en ella?
R. China tiene sus propios problemas y retos. Se est¨¢ desacelerando, porque est¨¢ cambiando de modelo econ¨®mico: de las exportaciones al consumo interno y los servicios y, al requerir menos materias primas, esto es parte del problema econ¨®mico que vivimos (el hierro y el petr¨®leo cayeron a un tercio de su m¨¢ximo). Ahora bien, ?qui¨¦n los abastece? El que est¨¦ mejor. Para qu¨¦ te sirve lo digital para tratar con un socio como China. Pues para estar a su nivel. Lo que no puede hacer China con toda su tecnolog¨ªa es producir mineral de hierro, cobre, petr¨®leo, etc. Pero para negociar con ellos hay que estar a su m¨¢ximo nivel tecnol¨®gico.
"El tema de la integraci¨®n es un tema pendiente en Am¨¦rica Latina"
Aunque a China le pasa como a los dem¨¢s. ?Cu¨¢l es su nivel tecnol¨®gico? ?El de las zonas rurales, que viven en el siglo anterior? ?O el de Sanghai que est¨¢n en el siglo XXII? Hay contrapartes en Am¨¦rica Latina, ?frica y Asia. Lo que? hay que integrar es las cadenas productivas. Am¨¦rica no tiene esta integraci¨®n. Olv¨ªdate del comercio con China. No tenemos comercio ni entre nosotros. Hemos desperdiciado el beneficio de la integraci¨®n. Y llevamos 60 a?os discutiendo sobre ello. Lo cierto es que la Alianza del Pac¨ªfico ¡ªM¨¦xico, Chile, Per¨² y Colombia¡ª ha avanzado m¨¢s en cinco a?os en la integraci¨®n de sus mercados que todos los dem¨¢s pa¨ªses en 50 o 60 a?os de Mercosur y el resto de instituciones¡±.
P. ?Y c¨®mo se soluciona el problema? ?Desde cada pa¨ªs o desde el conjunto de la regi¨®n?
R. Juntos podemos m¨¢s. Uno m¨¢s uno m¨¢s uno m¨¢s uno m¨¢s uno no son cuatro, son 17. Y uno m¨¢s uno m¨¢s uno no son tres, son 10. Y uno m¨¢s uno ser¨¢n cinco. Y uno es uno. Mientras m¨¢s sumas, m¨¢s potencias. Y hay un intercambio permanente de mejores pr¨¢cticas. El tema de la integraci¨®n es un tema pendiente. Los pa¨ªses que est¨¢n m¨¢s avanzados, los de la Alianza del Pac¨ªfico, no se est¨¢n ubicando solo en la regi¨®n, sino con el resto del mundo. Y esto quiere decir que te sumas a las cadenas globales de valor para ayudar, por ejemplo, a que los alemanes hagan carros. Porque lo que ellos exportan son ya computadores con ruedas.
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