Hay un robot en el despacho de mi abogado

Las instituciones relacionadas con la justicia se adaptan muy lentamente a las necesidades de una sociedad marcada por el auge de las nuevas tecnolog¨ªas. La mayor¨ªa de las legaltech -empresas que usan la tecnolog¨ªa para prestar servicios legales- han puesto el foco en el usuario y pocas se han centrado en simplificar el d¨ªa a d¨ªa de los profesionales del sector. [Aqu¨ª puedes leer algo sobre fintechs que pueden solucionar la vida de los clientes].

Y es que, seg¨²n un estudio de la consultora McKinsey, el 23% de su trabajo se podr¨ªa automatizar. La anal¨ªtica aplicada al big data y la inteligencia artificial llega en forma de iniciativas pioneras en EE UU que buscan ayudar a abogados y jueces a desempe?ar su trabajo de una manera m¨¢s eficiente y a poder ganar casos con argumentos m¨¢s s¨®lidos y fundamentados.

El sistema legal genera una enorme y creciente cantidad de datos. Para hacerse una idea, solo en Espa?a hubo casi seis millones de asuntos de nuevo ingreso durante al a?o pasado, seg¨²n el Consejo General del Poder Judicial. La tasa de litigiosidad del pa¨ªs es de las m¨¢s elevadas de Europa -se producen m¨¢s de 120 asuntos por cada 1.000 habitantes- y los magistrados sufren el estr¨¦s producido por las m¨¢s de 250 sentencias que trabajan de media cada a?o. Incluso el presidente del Tribunal Supremo, Carlos Lesmes, reconoc¨ªa en 2015 que ¡°muchos ¨®rganos judiciales soportan cargas excesivas de trabajo¡± y la sobrecarga de documentaci¨®n y falta de espacio para alojar el creciente archivo de los juzgados ha llevado a la Inspecci¨®n de Trabajo a intervenir en los casos m¨¢s graves.

Por este motivo, antes de empezar a hablar de tecnolog¨ªas rompedoras y casos de uso apasionantes, el sector debe hacer frente a un gran reto. ¡°Europa est¨¢ comenzando la digitalizaci¨®n de la Administraci¨®n de Justicia¡±, explica Javier de Cendra, decano de IE Law School. ¡°Todav¨ªa estamos pasando de la fase anal¨®gica a la digital, nos quedan unos diez a?os para entrar en la computacional¡±.

El Ministerio de Justicia espa?ol est¨¢ llevando a cabo diferentes iniciativas en materia de digitalizaci¨®n e intercambio de informaci¨®n judicial entre diferentes organismos y han desarrollado un sistema de justicia digital que posibilita la tramitaci¨®n electr¨®nica de los procedimientos en los juzgados durante todo el ciclo de vida de un asunto.

Europa est¨¢ comenzando la digitalizaci¨®n de la Administraci¨®n de Justicia Javier de Cendra, decano de IE Law School

Esta soluci¨®n, implantada en todas las Audiencias Provinciales y Tribunales Superiores y casi en 3 de cada 4 juzgados del territorio bajo competencia del Ministerio de Justicia, reduce en parte el problema de la sobreabundancia de archivo en papel, disminuye errores derivados de la gesti¨®n manual y simplifica el trabajo de la mayor¨ªa de actores implicados en cualquier proceso, seg¨²n el propio ministerio.A¨²n as¨ª, solo uno de cada diez espa?oles se beneficia de este sistema en su territorio.

Algunas de las iniciativas que abarca el paraguas de la justicia digital son Minerva Digital, un sistema de gesti¨®n procesal para tramitar informaci¨®n de procesos judiciales; LexNET, un sistema electr¨®nico de intercambio de informaci¨®n entre ¨®rganos judiciales; y Visor Horus, que permite a los usuarios de la Administraci¨®n de Justicia consultar procedimientos y documentaci¨®n online.

El panorama de las bases de datos de casos jur¨ªdicos en EE UU es considerablemente diferente. LexisNexis y Westlaw ostentan el duopolio que sirve a muchos investigadores legales como punto de partida para ejercer su trabajo. Sin embargo, no pasan de ser enormes motores de b¨²squeda con ingentes vol¨²menes de informaci¨®n, muy alejados de las herramientas anal¨ªticas avanzadas que precisa un profesional. ¡°Los mejores servicios legales est¨¢n a¨²n por construir¡±, afirma Dan Martin Katz, director de estrategia en Lex Predict, una empresa de innovaci¨®n en el sector jur¨ªdico. ¡°Estamos muy lejos de alcanzar los l¨ªmites¡±.

Ravel Law es un buen ejemplo de la importancia de la digitalizaci¨®n como paso previo a la computaci¨®n. Esta startup estadounidense ha emprendido un ambicioso proyecto de big data en colaboraci¨®n con la Escuela de Leyes de Harvard: pretenden escanear cada documento de esta instituci¨®n con tecnolog¨ªa de reconocimiento ¨®ptico de caracteres para digitalizar al completo su biblioteca de jurisprudencia, la m¨¢s grande de EE UU despu¨¦s de la Biblioteca del Congreso, y ponerla a disposici¨®n de cualquiera online de manera gratuita.

Pero el verdadero negocio de Ravel Law es otro: desarrollan herramientas de investigaci¨®n que, mediante algoritmos de an¨¢lisis avanzados, procesado de lenguaje natural y tecnolog¨ªas de aprendizaje autom¨¢tico, buscan patrones en los archivos y resaltan los puntos que consideran clave de una gran masa de documentos digitales. ¡°La ciencia de los datos est¨¢ jugando cada vez un rol m¨¢s importante en sectores como el periodismo, la pol¨ªtica y el deporte y ayuda a los actores implicados a manejar la informaci¨®n de una forma diferente y tomar mejores decisiones. Ahora, es nuestro turno¡±, expone su CEO, Daniel Lewis, durante el evento IELawX, en Madrid.

La evoluci¨®n de estas tecnolog¨ªas puede reducir considerablemente el trabajo de los abogados, pero la tecnofobia no est¨¢ justificada. ¡°Hay quien teme que la implementaci¨®n de este tipo de herramientas en su despacho le vaya a costar el puesto de trabajo. Para empezar, la inteligencia artificial no va a revolucionar el sector en los pr¨®ximos cinco a?os, aunque lo har¨¢ a largo plazo¡±, pronostica Lewis. ¡°Y no creo que los sistemas legales se puedan llegar a automatizar por completo y sean manejados por robots¡±.

Y es que esta tecnolog¨ªa puede reducir las labores de investigaci¨®n y administraci¨®n, pero no puede ayudar a los despachos a conseguir nuevos clientes o asesorarles. Aunque hay un perfil que los abogados pueden empezar a tener en cuenta en sus despachos: los analistas de datos.

De lo que no cabe duda es de la necesidad de una formaci¨®n jur¨ªdica adaptada a la nueva realidad que se va conformando en torno a los juzgados. ¡°En Europa acabaremos entrando en esta espiral, porque tenemos acceso a grandes bases de datos y el poder de analizarlos¡±, comienza de Cendra. ¡°Tenemos que garantizar, desde las universidades y escuelas de derecho, que los alumnos van a estar preparados para una pr¨¢ctica jur¨ªdica muy distinta de la que conocemos¡±.