?Para cu¨¢ndo la era ¡®just-in-time¡¯?

C¨®mo que para cu¨¢ndo? ?Eso no lo invent¨® Toyota en los a?os 70? Pues s¨ª, la filosof¨ªa just-in-time (justo a tiempo, JIT) se comenz¨® a aplicar al ¨¢mbito manufacturero hace ya m¨¢s de 40 a?os. La idea principal consist¨ªa en coordinar la entrada de materiales en la f¨¢brica en tiempo y cantidad con las necesidades de los mismos, el momento preciso, de forma que se redujeron dr¨¢sticamente los inventarios a la par que se liberaron recursos financieros. Tambi¨¦n se minimizaron los costes relacionados con el movimiento de materiales en la planta productiva.

?Qu¨¦ ocurre ahora con la industria 4.0 y la transformaci¨®n digital? Que, de alguna forma, el JIT se puede aplicar a toda la cadena de valor existente entre cliente, distribuidor y fabricante, posibilitando que cualquier individuo con iniciativa y mentalidad emprendedora pueda ofrecer al mercado sus productos contando con unos recursos financieros m¨ªnimos. Y pr¨¢cticamente sin costes de estructura. Esta es mi visi¨®n, y la voy a tratar de explicar con un ejemplo en el que vamos a comercializar un nuevo producto.

Lo primero que necesitamos es un producto. Tendremos que asumir el rol de product manager y definir el plan estrat¨¦gico del mismo. Estamos hablando del entorno, el cliente al que ir¨¢ dirigido el producto, los valores diferenciales que le permitir¨¢n ser ¨²nico en el mercado, el volumen de negocio potencial, precios, los objetivos que perseguimos y las iniciativas que nos permitir¨¢n conseguirlos. Ya lo tenemos definido, llam¨¦moslo PX por ejemplo.

• Siguiendo el camino

Lo siguiente es un canal de distribuci¨®n. Como no queremos tener costes de estructura, implantaremos un sistema de ecommerce. Pero tambi¨¦n tenemos que estar preparados para cuando entre el primer pedido, con lo que necesitaremos una planificaci¨®n de recursos (ERP) que lo pueda recoger, y que nos ayude en los procesos de gesti¨®n posteriores. ?Nos vale cualquier ERP? S¨ª, siempre que est¨¦ preparado para una r¨¢pida integraci¨®n con cualquier sistema de ecommerce, que contenga los procesos de compra/venta/env¨ªo del producto, que se comunique con los terceros necesarios para que el producto llegue al cliente en el momento que ¨¦ste espera, y que lo haga todo pr¨¢cticamente solo, porque seguimos sin la intenci¨®n de aumentar nuestra estructura. Vamos, que necesitamos que el sistema sea plug&play, self-driving y cloud, como m¨ªnimo.

Ya tenemos el primer pedido, as¨ª como la autorizaci¨®n correspondiente para su cobro. Necesitamos por tanto a alguien que nos fabrique PX, de forma inmediata. Aqu¨ª es donde entran en juego las smart factories, o f¨¢bricas inteligentes, y la teor¨ªa es muy sencilla. Nuestro ERP se comunica con los servicios de estas factor¨ªas de ¨²ltima generaci¨®n, les comunica nuestra necesidad, y escoge la que mejor relaci¨®n ofrece entre plazo de entrega y precio. A partir de aqu¨ª, y de forma completamente automatizada, nuestro producto PX es fabricado y est¨¢ listo para su env¨ªo, momento en el que tendremos que pagarlo.

En nuestro mundo JIT, la clave en este momento es sincronizar:

• El cobro de PX a nuestro cliente con el pago de PX a la smart factory
• El env¨ªo a nuestro cliente, indicando al Medio de env¨ªo que la recogida de la mercanc¨ªa se realiza en la factor¨ªa, y registrando en nuestro ERP el identificador de seguimiento del paquete a enviar
• La comunicaci¨®n autom¨¢tica a nuestro cliente de que PX est¨¢ en camino
• El pago a la agencia de transportes

Si todo ha ido bien, lo que habremos conseguido es:

• Vender algo que no existe en el momento que el cliente realiza el pedido
• No tener que recurrir a ning¨²n tipo de financiaci¨®n
• Un margen econ¨®mico, tras el pago a la f¨¢brica y el transportista

Y todo esto sin realizar inversiones. Es cierto que mensualmente tendremos que pagar una cuota por el uso del sistema inform¨¢tico, que es el que nos ha permitido realizar toda la gesti¨®n de forma automatizada. Pero si la estrategia de producto definida para PX es la correcta y nuestro producto tiene el grado de aceptaci¨®n esperado, ?a qui¨¦n le importa?

Y una vez dicho esto, me pregunto, ?para cu¨¢ndo ocurrir¨¢ esto? ?Qu¨¦ impacto tendr¨¢ con los grandes fabricantes y canales de distribuci¨®n?

Y, lo m¨¢s importante, ?podemos esperar hasta entonces? Yo, personalmente, no.

Isidro Velis es director de producto de Ekon.