El euro causa furor entre los falsificadores gracias a la tecnolog¨ªa

Los euros falsos no tienen bandera. Tan pronto nacen en una imprenta zaragozana como en la remota China. Se han desmantelado imprentas en Colombia, Per¨² y Tailandia. Hasta por partes aparecen: el portal de venta online Alibaba ha llegado a ofertar hologramas falsos para billetes de euro. Tal es el furor causado por la 'moneda ¨²nica', que desde su nacimiento, en 2002 ha motivado la retirada de circulaci¨®n de unos 12 millones de imitaciones, entre monedas y billetes.

• Evoluci¨®n del n¨²mero de falsificaciones
  

Fuente: Banco Central Europeo/Comisi¨®n Europea

?Por qu¨¦ tanto inter¨¦s? Desde la Comisi¨®n Europea aluden una mezcla de sex-appeal y disponibilidad recursos tecnol¨®gicos. "Es una divisa altamente atractiva para la falsificaci¨®n", explican. No en vano, es la moneda oficial en diecinueve pa¨ªses, con 18 millones de billetes y 115 mil millones de monedas en circulaci¨®n dentro y fuera de la Uni¨®n Europea. M¨¢s de un bill¨®n (12 ceros) de euros en manos de 340 millones de ciudadanos.

"Adem¨¢s la globalizaci¨®n y el desarrollo de nuevas tecnolog¨ªas proporcionan nuevas oportunidades a los falsificadores", a?aden. En este contexto, el papel de los billetes -de composici¨®n ya inimitable- se ha llenado transparencias, marcas de agua, hologramas, tintas especiales... Seg¨²n Juan Ba?uelos, jefe de la secci¨®n t¨¦cnica de la Brigada de Investigaci¨®n del Banco de Espa?a (BIBE) -encargada de perseguir los asuntos relacionados con falsificaci¨®n de billetes y monedas en nuestro pa¨ªs- lo importante es la dificultad para integrar en la falsificaci¨®n todos los elementos de seguridad que componen los originales. "Si s¨®lo miras una, puede estar perfectamente simulada, pero el resto no. Puede ser un holograma perfecto, pero fallar en la marca de agua o en la ventana de la ¨²ltima serie de los billetes de 20 y 50, la tinta...", explica. En estos casos, mirar, girar y tocar el billete es la receta del BCE para despejar las sospechas.

Adem¨¢s, los controles superan la simple renovaci¨®n de la flota. "Cada Estado Miembro design¨® autoridades con competencia para centralizar la informaci¨®n policial y t¨¦cnica, en coordinaci¨®n a nivel europeo con Europol, la comisi¨®n y el Banco Central Europeo (BCE)", explican desde Bruselas. Pero este esfuerzo creciente ha llevado a los criminales a buscar nuevas formas de llevar sus euros fraudulentos a la circulaci¨®n. Desde Alibaba hasta la web oscura o profunda, proliferan los anuncios de componentes de alta calidad e incluso falsificaciones completas.?

La web oscura (deep web en su original ingl¨¦s) es el interne que se le escapa a Google,?en el que un ingente volumen de datos cifrados guardan una particularidad com¨²n: no est¨¢ regulado por gobiernos o entes. En ella, la comunicaci¨®n e intercambio de informaci¨®n es libre entre usuarios gracias a conexiones parten P2P (peer to peer).?En muchos casos se trata simplemente de p¨¢ginas con contenidos no indexados: intranets o bases de datos.Pero tambi¨¦n hay?contenidos cifrados por motivos pol¨ªticos, militares, de activismo de la privacidad o puramente delictivo.

• Distribuci¨®n de las falsificaciones, por billetes (en %)
  

Fuente: Banco Central Europeo

S¨®lo en 2016 se retiraron de circulaci¨®n 684.000 billetes ap¨®crifos, la mayor¨ªa de ellos, de 50 euros. Esta serie y la de 20 euros, han sido las favoritas de las imprentas ilegales desde que la divisa entro en circulaci¨®n. Seg¨²n los ¨²ltimos datos, relativos a la primera mitad de 2017, la pareja estrella concentra el 87,5% de las falsificaciones. En un muy discreto segundo plano quedan los billetes de cinco y diez euros, que no han supuesto ni el 4%, y otra consideraci¨®n merecen, por su valor, los billetes de 100, 200 y 300 euros, que adem¨¢s alcanzan el 11,6% del total.

Mirar, girar y tocar el billete es la receta del BCE para despejar las sospechas sobre una posible falsificaci¨®n

"Las cifras de falsificaci¨®n del euro no son elevadas, en relaci¨®n con los billetes que circulan", puntualizan fuentes del Banco de Espa?a. En el primer semestre de 2017 se retiraron de la circulaci¨®n 331.000 billetes falsos, actualmente el n¨²mero de billetes en euros en circulaci¨®n supera los 20.000 millones de billetes en circulaci¨®n, lo que representa 17 billetes falsos por cada mill¨®n de billetes en circulaci¨®n. Impedir el incremento de estas cifras es crucial para un medio de pago que sigue siendo el m¨¢s utilizado por los ciudadanos europeos. "Nuestro principal reto es mantener la confianza del p¨²blico en los billetes y monedas de euros, que permite realizar las transacciones con plena garant¨ªa de su valor", explican.

• Euros de ultramar

La llegada de terceros pa¨ªses donde el euro no es moneda oficial a la fiesta de la falsificaci¨®n tampoco ayuda. La detecci¨®n se complica cuando las autoridades locales desconocen las t¨¦cnicas para reconocer euros sospechosos y carecen de los equipos necesarios para determinar su autenticidad. "Todos los a?os hacemos un curso de formaci¨®n en Iberoam¨¦rica con unidades policiales, bancos centrales y autoridades judiciales y fiscales de estos pa¨ªses", explica Ba?uelos. Estos cursos se celebran dentro del programa Pericles 2020, de la Comisi¨®n Europea, en el que la BIBE y el Banco de Espa?a han tenido presencia constante: "Nos ha brindado la oportunidad de?conocer y compartir experiencias con los cuerpos t¨¦cnicos y policiales de otros pa¨ªses y mostrar el modelo de colaboraci¨®n existente entre entre el Banco de Espa?a y la BIBE, que es altamente valorado en todo el mundo".

Pero los euros latinoamericanos ya no son el ¨²nico problema. En 2014 se retiraron 22.000 billetes con hologramas falsos de alta calidad made in China. Un a?o m¨¢s tarde fueron 47.000. Y en 2015 se alcanzaron 71.000. Adem¨¢s, los criminales chinos est¨¢n empezando a combinar el suministro de componentes -hologramas, tintas especiales- con la fabricaci¨®n del producto completo. "Estamos intentando ver c¨®mo podemos colaborar con las autoridades chinas para luchar contra esto. Lo que pasa es que la legislaci¨®n existente es diferente en cada pa¨ªs. Si ya en Europa no tenemos armonizaci¨®n legislativa, imag¨ªnate con China", a?ade Ba?uelos.

Todas las entidades coinciden en que, en los dem¨¢s niveles, la colaboraci¨®n es plena: "Existe coordinaci¨®n policial y t¨¦cnica. Para el an¨¢lisis la clasificaci¨®n de las monedas falsas a escala europea, est¨¢ el centro t¨¦cnico y cient¨ªfico europeo. A nivel nacional est¨¢n sus reflejos en los centros nacionales de an¨¢lisis y centros nacionales de an¨¢lisis de moneda", precisan desde el Banco de Espa?a.

• Euros napolitanos

La mayor¨ªa de los billetes falsos siguen naciendo, no obstante, en tierras europeas. Seg¨²n los c¨¢lculos de Europol, hasta un 70% de ellos ven la luz en Italia, en gran parte gracias al impulso de los grupos napolitanos dedicados al crimen organizado. "Hacemos todo lo posible con las autoridades italianas, pero el resultado es el que hay. Se han hecho gestiones a trav¨¦s de Interpol y el BCE, se ha ido modificando la legislaci¨®n para permitir la colaboraci¨®n, porque antes no permit¨ªan equipos conjuntos, ni entregas controladas, ni agentes encubiertos... Todo esto dificultaba las cosas", comenta Ba?uelos.

• Distribuci¨®n de las falsificaciones, por monedas (en %)
  

Fuente: Comisi¨®n Europea

Los italianos tampoco encuetran rival en el apartado de las monedas. Desde 2002 se han desmantelado 27 f¨¢bricas que acu?aban euros al margen de la ley. Aunque las cinco espa?olas nos sit¨²an en el segundo puesto, estamos muy lejos de las catorce italianas. Dentro las monedas falsas, las favoritas son las de dos euros, que se han mantenido a la cabeza durante los ¨²ltimos 20 a?os. La creciente calidad de estas falsificaciones nos dej¨® en 2015 13 nuevas variedades de euros fraudulentos con propiedades electromagn¨¦ticas de lo m¨¢s veros¨ªmiles. Un a?o m¨¢s tarde se retiraron de la circulaci¨®n m¨¢s de 150.000 monedas falsas.

Uno de cada diez billetes falsos retirados de la circulaci¨®n en 2015 se detectaron en Espa?a. Dentro de nuestras fronteras, la investigaci¨®n de estos delitos y los asociados a otras divisas ha correspondido a la BIBE desde 1934. "Nuestra experiencia empez¨® con la peseta, s¨®lo tuvimos que adaptarnos al euro", explica Ba?uelos. Su aportaci¨®n, que la Comisi¨®n Europea califica como "una de las m¨¢s efectivas" pasa por un conocimiento profundo del circuito financiero, el flujo existente de euros falsos y el perfil de quienes los introducen. Ahora el reto es estar al d¨ªa. "Qu¨¦ duda cabe de que la red y la comunicaci¨®n que se da a trav¨¦s de ella es nuestro mayor obst¨¢culo. Los contactos son instant¨¢neos. Hacer un pedido y recibirlo es cuesti¨®n de horas", razona Ba?uelos.

Adem¨¢s, en un mercado global e hiperconectado de divisas fraudulentas donde el euro y el d¨®lar van, en muchos casos, de la mano, la colaboraci¨®n internacional cobra relevancia. "No podemos poner paredes al viento, necesitamos las herramientas adecuadas para parar esta delincuencia. Si no podemos hacer un seguimiento, de IPs dif¨ªcil lo vamos a tener". Desde el Banco de Espa?a destacan tambi¨¦n la necesaria colaboraci¨®n del p¨²blico para que al recibir un billete o moneda de euro, verifique sus caracter¨ªsticas: "Hay que ser conscientes de que una divisa global, como es el euro, desde el punto de vista de la falsificaci¨®n, es una moneda muy interesante".