Arsenio Otero: Acceso al talento

La captaci¨®n y retenci¨®n del talento se ha convertido en una obsesi¨®n para la mayor¨ªa de empresas inmersas en un proceso de digitalizaci¨®n. Bien por desconocimiento, por falta de m¨²sculo o, simplemente, por un cambio de paradigma, las organizaciones luchan por contratar a los mejores en campos que antes ni exist¨ªan. Arsenio Otero, vicepresidente de operaciones de Salesforce, multinacional de servicios en la nube, simplifica este cambio de tendencia en una sola palabra: personas.

¡°No hay talento sin personas detr¨¢s. La transformaci¨®n digital es poner a las personas en el centro. No podemos entender un proceso estrat¨¦gico sin ellas¡±, afirma.Tiene muy claro que el mayor reto que afrontan las compa?¨ªas es el de mantener la motivaci¨®n de los trabajadores.

Todo se ha convertido en un entorno tan l¨ªquido que las jerarqu¨ªas, el puesto fijo y el inmovilismo carecen de sentido. Tal y como explica Otero, el talento tiene que adaptarse a un modelo de negocio digital, social y m¨®vil. ¡°Mi generaci¨®n hablaba de un equilibro en la vida laboral que consist¨ªa en trabajar de lunes a viernes durante ocho horas. Ahora, en cambio, se busca integrar el trabajo en la vida de cada uno. El talento se ha deslocalizado y es m¨¢s accesible cuando se dispone de las capacidades para buscarlo¡±. Una de las preguntas que se hace Otero en voz alta es si Espa?a valora la brillantez de sus propios empleados. La respuesta es contundente: ¡°El talento que hay en nuestro pa¨ªs es muy bueno y de gente muy capacitada, pero no lo valoramos¡±.

¡°No hay nada peor en este entorno que la decisi¨®n no tomada¡±, explica. ¡°En otras partes del mundo, se fomenta la equivocaci¨®n, el intentar las cosas o apreciar lo que se tiene alrededor¡±. Su dilatada trayectoria, que le ha llevado por grandes empresas internacionales como Oracle y McKinsey, le permite asegurarlo.

Uno de los principales cambios que la pol¨ªtica ha de emprender para mejorar el desarrollo del talento es el de la educaci¨®n. En determinadas formaciones se han creado unas brechas en comparaci¨®n con el resto del mundo que convendr¨ªa corregir. ¡°Los conocimientos previos en ventas, por ejemplo, son inexistentes. Los estudios universitarios no entienden que se trata de una ciencia desarrollada durante d¨¦cadas¡±, explica. Es consciente de que ahondar en nuevas ¨¢reas como la inteligencia artificial o el an¨¢lisis de datos resulta fundamental para operar en esta sociedad digital.

Para retener el talento, las empresas tienen que esforzarse en fomentar proyectos atractivos y llenos de valores, como la igualdad de g¨¦nero. Los empleados trabajan mejor si se sienten identificados con la cultura corporativa. Programas de coaching, formaci¨®n continua y desarrollo personal dentro de la organizaci¨®n son capitales para las nuevas generaciones. ¡°La gente termina y¨¦ndose porque est¨¢ harta de la compa?¨ªa o del jefe¡±, concluye.