La m¨¢quina que reta al hombre para debatir
IBM presenta una inteligencia artificial todav¨ªa en desarrollo, Project Debater, programada para construir un discurso con argumentos en favor y en contra sobre asuntos complejos y pol¨¦micos
La competici¨®n entre inteligencia artificial y seres humanos lleva d¨¦cadas encima de la mesa. El hombre contra la m¨¢quina. Tanto Deep Blue, que venci¨® en una partida de ajedrez a Gary Kasparov, como Watson, convertida en concursante en el programa de televisi¨®n Jeopardy, fueron de los primeros proyectos en retar p¨²blicamente a la sociedad. M¨¢s all¨¢ de atemorizar a algunas personas con una posible rebeli¨®n de robots, la tecnolog¨ªa demostr¨® c¨®mo un ordenador procesaba en poco tiempo una cantidad ingente de informaci¨®n. Sin embargo, la comprensi¨®n del lenguaje no estaba entre sus virtudes. Mucho menos expresarse con complejidad. El proyecto de IBM Project Debater pretende echar esto por tierra y ya ha lanzado el guante a los humanos.?
Lo que les espera a las dos personas que debatir¨¢n con Project Debater es una m¨¢quina negra parecida a un t¨®tem, de metro y medio de altura y con tres c¨ªrculos que se juntan para emular una boca. Los temas planteados: subsidiar la carrera espacial y fomentar la telemedicina. En esta ocasi¨®n, la inteligencia artificial se mostrar¨¢ a favor en ambos casos; aunque pod¨ªa haber argumentado justo lo contrario. ¡°Se trata de ense?ar las dos caras de la moneda para que cada uno tome su propia decisi¨®n. No es ni blanco ni negro, como muchas cosas con las que nos topamos en la vida. Queremos que este sistema viva en esa zona ambigua y subjetiva¡±, explica Ranit Aharonov, directora del proyecto.
Aunque todav¨ªa sigue en fase de desarrollo desde que IBM comenzara hace seis a?os con el desarrollo, el dominio del lenguaje durante el debate es casi impecable. Construye una argumentaci¨®n con frases complejas, aporta datos ¨Ctrabaja con 300 millones de art¨ªculos cient¨ªficos y de prensa¨C y se atreve a anticipar los argumentos del oponente. Hasta suelta alg¨²n chiste apto para tecn¨®logos como que ten¨ªa que respirar para quitarse los nervios, pero que no puede porque es una m¨¢quina. ¡°Es fascinante. Coger fragmentos de diferentes fuentes y unirlos en una estructura coherente y fluida es un logro m¨¢s que significante¡±, razona Chris Reed, profesor de la Universidad de Dundee y experto en inteligencia artificial desde hace m¨¢s de 20 a?os.
Inteligencia artificial para conversaciones telef¨®nicas
El debate dista de un intercambio dial¨¦ctico constante. Pese a que replica a su oponente argumentando con total naturalidad, Project Debater necesita un par de minutos para procesar las respuestas que provienen del otro atril, las intervenciones hay que establecerlas y dejar que cada uno exponga su postura en forma de mon¨®logo. Aunque, como afirma Aharonov, la idea de este sistema no es construir un paquete para debatir en el que la m¨¢quina est¨¦ incluida. ¡°Pretendemos que tenga relaci¨®n con los procesos de toma de decisiones. Que muestre las ventajas e inconvenientes sobre asuntos en los que no existe una respuesta clara¡±, a?ade.
?Un robot en el Consejo de Ministros?
Puestos a imaginar, cabe la posibilidad de que a largo plazo Project Debater aparezca en medio de un Consejo de Ministros para debatir con los pol¨ªticos. O como un tercer candidato en los debates presidenciales de Estados Unidos. Tal y como sugiere Reed, m¨¢s que fijarnos en las capacidades ret¨®ricas que ha adquirido, que son bastante limitadas, la clave radica en pensar c¨®mo utilizarla para mejorar la argumentaci¨®n. ¡°Tiene una gran aplicaci¨®n potencial en situaciones en las que un equipo humano puede tomar decisiones basadas en diferentes alternativas. Esta inteligencia artificial puede tener peso en departamentos legales, gabinetes m¨¦dicos y consejos directivos por ejemplo¡±, comenta.?
Las posibilidades abiertas por esta inteligencia artificial no deben entenderse como una tecnolog¨ªa que suplante la toma de decisiones por parte de los seres humanos. Al menos as¨ª lo sugiere Aharonov. Se trata m¨¢s de una herramienta capaz de manejar un lenguaje complejo y de apoyo para cuando existe un debate sobre asuntos en los que se requiere mayor informaci¨®n. Para evitar cualquier intoxicaci¨®n en el rastreo de documentos y llegar a conclusiones alejadas de la realidad, Project Debater cuenta con cierta protecci¨®n ante las fake news. ¡°Est¨¢ programada para que sepa qui¨¦nes est¨¢n defendiendo una postura y qui¨¦nes est¨¢n detr¨¢s de estos argumentos¡±, expone la directora del proyecto.
El futuro que le espera a este sistema es mejorar sus habilidades comunicativas, interactuar con mayor naturalidad con sus oponentes y seguir form¨¢ndose acerca de m¨¢s temas sobre los que debatir ¨Csi no tiene suficientes datos, avisa de que no est¨¢ preparado¨C. El salto mostrado con la capacidad de comprensi¨®n resulta innegable. Esta inteligencia artificial va m¨¢s lejos de pedir una canci¨®n, cambiar de canal o saber el tiempo. ¡°En nuestro presente, donde todo es absolutamente colaborativo, si quieres una interacci¨®n m¨¢s compleja y sofisticada, Project Debater es un buen camino sobre el que construir¡±, concluye Chris Reed.
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