Julio C¨¦sar, el primer experto en posicionamiento natural
El conquistador inici¨® una guerra para conseguir recursos e influencia que le permitieran potenciar su imagen personal. El 'ecommerce' tiene mucho que aprender de ¨¦l
Cayo Julio C¨¦sar (100 a. C. ¨C 44 a. C.) es, probablemente, la figura m¨¢s reconocible e ic¨®nica de la antigua Roma. Su genio pol¨ªtico y militar, su romance con la reina egipcia Cleopatra o su tr¨¢gico final, asesinado por su propio hijastro Bruto en el Senado, han trascendido los libros de historia. Pero lo que no todo el mundo sabe es que Julio C¨¦sar demostr¨® igualmente un inusitado talento en algo que tambi¨¦n le habr¨ªa hecho triunfar en estos tiempos actuales tan tecnol¨®gicos e hiperconectados. Me refiero a que C¨¦sar fue seguramente el primer gran experto en posicionamiento natural.
Me explico. C¨¦sar fue uno de los m¨¢ximos exponentes de la expansi¨®n del Imperio Romano. Su campa?a en La Galia es a menudo se?alada como ejemplo de excelencia militar. La velocidad con la que mov¨ªa sus tropas, tomando por sorpresa al enemigo; o el valor que demostraba ante sus hombres, situ¨¢ndose en ocasiones a pie y en primera l¨ªnea de combate, obligando a hacer lo propio al resto de generales, est¨¢n acreditados hist¨®ricamente. Adem¨¢s, Julio tambi¨¦n sab¨ªa cuidar la puesta en escena. Su regia figura, desfilando en su cuadriga en actitud triunfante y adornado con una corona de laurel ha sido explotada hasta la saciedad en innumerables recreaciones literarias, teatrales, cinematogr¨¢ficas, televisivas y hasta del mundo del c¨®mic. Al margen de la iconograf¨ªa popular, hoy sabemos que a C¨¦sar le gustaba cuidar la imagen que proyectaba, y que acostumbraba a aparecer en batalla ataviado con una espectacular capa de color rojo. Elementos que forman parte de lo que hoy no dudar¨ªamos en llamar ¡°su marca personal¡±.
En lo que se incide menos en los tratados de Historia es en los motivos que le llevaron a embarcarse en aquella gesta en la actual Francia. La versi¨®n oficial afirma que fue a la mayor gloria de Roma. Pero hoy la mayor¨ªa de los entendidos concluyen que C¨¦sar no conquist¨® y saque¨® La Galia ¨²nicamente por amor patri¨®tico, sino que tambi¨¦n pes¨® -y mucho- en su ¨¢nimo la pura ambici¨®n personal. Que se invent¨® aquella guerra de conquista porque necesitaba notoriedad y recursos econ¨®micos para poder financiar una campa?a que le permitiera comprarse una posici¨®n prominente en el despacho oval de su ¨¦poca: el Senado de Roma.
?C¨®mo lo hizo? Siguiendo una estrategia que hoy no dudar¨ªan en imitar los actuales expertos en marketing digital. En primer lugar, como si se tratara de una fuerte campa?a de SEM, el bot¨ªn obtenido en La Galia permiti¨® a C¨¦sar comprarse alianzas y vencer resistencias org¨¢nicas que le alejaban de los c¨ªrculos del poder. Pero, como buen experto en posicionamiento, Julio era consciente de que el dinero no era suficiente para alcanzar sus objetivos. En sus c¨¢lculos contaba con que tambi¨¦n necesitaba obtener el respaldo popular de la ciudadan¨ªa para llegar a la cumbre del poder pol¨ªtico. Por esa raz¨®n, a su desembolso econ¨®mico le sum¨® una decidida apuesta por el SEO o posicionamiento natural.
En aquella ¨¦poca no exist¨ªa Google, ni hab¨ªa motores de b¨²squeda ni blogs o webs sobre los que volcar contenidos optimizados, pero ¨¦l escrib¨ªa h¨¢bilmente sus palabras clave en forma de victorias militares y caudillos b¨¢rbaros derrotados. Todas estas haza?as fueron plasmadas en el libro Comentarios a la Guerra de las Galias, que se cree que fue dictado por ¨¦l mismo en plena campa?a. Es decir, Julio C¨¦sar fue uno de los primeros creyentes en las bondades de una buena estrategia de contenidos. Estos relatos de gloria y victoria llegaron convenientemente hasta las calles de Roma, granje¨¢ndole al general fama y renombre popular, y con ello, el espaldarazo que necesitaba para satisfacer sus ambiciones.
Julio C¨¦sar fue uno de los primeros creyentes en las bondades de una buena estrategia de contenidos¡±
En definitiva, C¨¦sar se meti¨® en una guerra para conseguir los recursos y la influencia que le permitieran potenciar su imagen personal y, de esta forma, obtener aquello que anhelaba m¨¢s que ninguna otra cosa: el poder en Roma. Bajo este punto de vista, podr¨ªa decirse que Julio C¨¦sar fue un adelantado a su tiempo y uno de los primeros expertos en posicionamiento natural de la Historia. Su manejo de la estrategia como v¨ªa para potenciar su marca personal era incluso superior a la que exhib¨ªa en el campo de batalla para doblegar a sus enemigos.
Dos mil a?os m¨¢s tarde, el mundo de internet en general y del comercio electr¨®nico en particular tiene mucho que aprender de su ejemplo. Como ¨¦l, quienes trabajamos en la venta online tambi¨¦n buscamos obtener rentabilidad, recursos, visibilidad y expansi¨®n internacional. Y tambi¨¦n debemos reinvertir gran parte de esos recursos en abrir nuevos caminos que nos lleven a tener una presencia adecuada en la Red.
La guerra formaba parte de la esencia de la cultura romana. El comercio electr¨®nico no es una industria b¨¦lica, pero s¨ª un entorno de competencia pura que obliga a luchar como un David en un mundo de Golliats. Por lo que os confieso que muchas veces, m¨¢s que como Roma, nos sentimos como aquella peque?a aldea gala que resist¨ªa todav¨ªa y siempre al invasor.
Rafa Torres es CEO de Mactual.?
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