Los ¡®made in China¡¯ que no llegan a Espa?a

Made in China, loved by the world. La frase est¨¢ hasta en las cajas de pa?uelos de la sala de juntas. Es el lema de Gree y la condensaci¨®n de su "sue?o chino" -alineado con el del presidente Xi Jinping- de un futuro donde la tecnolog¨ªa inventada y ensamblada en el pa¨ªs sea sin¨®nimo inequ¨ªvoco de calidad e innovaci¨®n. "Nuestros productos pueden viajar a Europa y el mundo entero por su calidad y tecnolog¨ªa", se vanagloria Fernando Xie, responsable de negocios exteriores de la empresa especializada en sistemas de climatizaci¨®n con sede en Zhu Hai (China).

Es f¨¢cil decirlo. La tarea de hacerlo realidad se complica cuando entran en la ecuaci¨®n los reyes del mercado moderno: dispositivos inteligentes, conectados, llenos de sensores y aceptables para el mercado local pero no tan f¨¢cilmente adaptables a los dominios del Reglamento General de Protecci¨®n de Datos (GDPR). "En algunos productos que ya estamos vendiendo muy bien en China, necesitamos encontrar un camino para poder venderlos en Europa", admite Xie.

Un ejemplo de esto es el sistema de aire acondicionado que Ana Liang, responsable de distribuci¨®n para el sur de Europa, tiene previsto presentar -que no lanzar- en Espa?a durante el pr¨®ximo febrero. "Est¨¢ conectado con todas las estaciones meteorol¨®gicas. Seg¨²n la temperatura de cada ciudad donde est¨¢ instalado el equipo, puede autoajustarse para optimizar a¨²n m¨¢s", explica. En China ya funciona. "No es tan f¨¢cil lanzarlo en Espa?a por la protecci¨®n de datos. Est¨¢ muy estricto esto. Asia en general es menos estricto, hay menos cl¨¢usulas a respetar y menos penalizaciones. El problema es Europa".

Esta adaptaci¨®n es clave para la apuesta de Gree, cuya estrategia competitiva pasa por ofrecer tecnolog¨ªas que no tengan los rivales m¨¢s asentados del Viejo Continente. "Hemos empezado conversaciones porque este es un punto que nos diferencia de los dem¨¢s. Ya sabemos que los aires acondicionados enfr¨ªan o dan calor, pero aparte de eso, ?qu¨¦ m¨¢s pueden dar?", se?ala Liang.

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Estamos adaptando nuestro software para que cumpla la ley Fernando Xie

No es que sus cifras vayan mal. Cuando se ponen estupendos, los responsables de distribuci¨®n sacan la artiller¨ªa pesada: "Gree fabrica uno de cada tres aires acondicionados que se venden en el mundo". Pero la cifra tiene truco. Cuenta con la aplastante aportaci¨®n de los equipos que se venden en el descomunal mercado patrio. De hecho, el 80% de las ventas de Gree se quedan en el territorio chino, donde son el primer fabricante. Basta alzar la mirada para distinguir una notable representaci¨®n del logo de Gree entre las carcasas blancas que pueblan, casi vivienda a vivienda, las fachadas de los edificios de Zhu Hai.

En cuanto a planes de expansi¨®n, el salto a Europa ya es una realidad. Gree lleg¨® a Espa?a hace tres a?os y puso en marcha su actividad en Francia durante 2018. En el inminente 2019 dar¨¢n un paso m¨¢s e incluir¨¢n a Portugal en su cartera de pa¨ªses al sur de Europa. "Tengo mucha confianza puesta en estos mercados libres", asegura Xie. Adem¨¢s, la empresa tiene acuerdos de distribuci¨®n en Norteam¨¦rica, Am¨¦rica Latina, ?frica, Australia, Nueva Zelanda, Catar, Arabia Saud¨ª... Las variaciones del clima no son un problema. "Tenemos equipos que pueden funcionar con una temperatura desde -30 C? hasta 54C?. Es decir, podemos venderlos desde el desierto hasta el polo norte", afirma Liang.

La estrategia de Gree para limar las incompatibilidades legales tambi¨¦n est¨¢ en marcha. "Sabemos que en Europa hay una regulaci¨®n muy estricta, as¨ª que estamos adaptando nuestro software y nuestras apps para que cumplan la ley", insiste Xie. Por una parte, ya tienen servidores instalados en territorio europeo. Por otra, est¨¢n en constante comunicaci¨®n con abogados locales. "Normalmente ning¨²n fabricante tiene la intenci¨®n de violar las normas locales. Lo que pasa es que hay que estudiarlas y dominarlas muy bien", argumenta Liang.

• Cuestiones de gusto

"Esto es solo para el mercado dom¨¦stico porque sabemos que difiere de vuestro gusto", adelanta Yoyo Liang se?alando un carnaval de equipos de climatizaci¨®n de todas las formas y colores. Si Audrey Hepburn fuera un aire acondicionado europeo, estos ser¨ªan las Supremas de M¨®stoles.

"Los de aqu¨ª concentran los valores de la vida feliz y son especialmente para parejas de reci¨¦n casados", explica Liang. Ante ella se alza una enorme torre rosa coronada de flores. Colgando de la pared hay otro equipo m¨¢s peque?o, pero del mismo tono. "Podemos crear un momento muy rom¨¢ntico si apagamos las luces. ?Veis?". Cuando pulsa el interruptor, en la carcasa del equipo prende un estampado de rosas luminosas que cambian de color a cada segundo. Un par de pasos m¨¢s all¨¢ asoma imponente otro dispositivo gigante, esta vez con un paisaje boscoso impreso en su superficie. La imagen es personalizable: "Para que pueda mostrar su estilo y dignidad".

Todos estos dise?os inesperados, coloridos, florales, luminosos y customizables tambi¨¦n est¨¢n por ahora fuera del alcance del consumidor europeo. "Tenemos muchos productos que tienen un aspecto muy llamativo", reconoce Ana Liang. "Eso no os gusta en Europa. En cambio, aqu¨ª se venden. Es otra cultura. Aqu¨ª a la gente le gusta el show-off. Que se vea".

• ?Gree para todo?

En lo que a China se refiere, el mercado de la climatizaci¨®n ya se ha quedado peque?o para esta empresa, que cuenta con un 18% de participaci¨®n estatal. Durante los ¨²ltimos a?os, los equipos de innovaci¨®n y desarrollo de la compa?¨ªa han diversificado sus esfuerzos en el desarrollo de nuevas l¨ªneas comerciales. Los resultados que van desde lavadoras hasta tel¨¦fonos m¨®viles pasando por software para hogares inteligentes.

Aunque sus plantas de producci¨®n siguen siendo m¨¢s humanas que rob¨®ticas, trabajan tambi¨¦n en la creaci¨®n de maquinaria para automatizaci¨®n de procesos en la industria 4.0. Y no contentos con todo lo anterior, tienen su propia l¨ªnea de peque?os electrodom¨¦sticos. "Cuando llegas al 50% de un mercado, tienes que buscar m¨¢s l¨ªneas de m¨¢s negocio", sentencia Liang.