Claves para desconectar de las pantallas durante el verano

Si no es un correo electr¨®nico, es un wasap y, si no, alguien que ha dado me gusta a nuestra ¨²ltima foto de Facebook o una alerta de un medio de comunicaci¨®n. Est¨¢ claro que las pantallas aumentan la ansiedad de los trabajadores. Un estudio de la Universidad de California se?ala que cuando miramos notificaciones constantemente tendemos a estresarnos m¨¢s, ya que luego sentimos que tenemos que trabajar m¨¢s deprisa para recuperar el tiempo perdido.

No estamos hablando de un problema aislado: seg¨²n este mismo informe, una de cada cuatro personas consulta su smartphone cada 30 minutos y el 25% de los millennials lo mira m¨¢s de cien veces al d¨ªa. La problem¨¢tica est¨¢ asumida cuando hablamos de nuestro d¨ªa a d¨ªa, sin embargo, nos cuestionamos menos el uso que hacemos de la tecnolog¨ªa cuando vamos a estar fuera de la oficina por un tiempo.

Se acercan las vacaciones y, con ellas, la ilusi¨®n ante unos d¨ªas o semanas de descanso laboral, la oportunidad de cambiar nuestros h¨¢bitos y salir de la rutina durante una temporada para disfrutar m¨¢s de los amigos y la familia y ser capaces de volver al trabajo con las pilas cargadas.

El principal problema con el que nos encontramos es que no siempre es f¨¢cil darse cuenta de que nos hace falta desintoxicarnos de las pantallas. ¡°En mi experiencia, cuando le dices a alguien que est¨¢ enganchado, siempre lo va a negar¡±, lamenta el experto en tendencias, innovaci¨®n y marca personal Gustavo Entrala. ¡°Es un problema m¨¢s f¨¢cil de ver en otras personas que en ti mismo¡±.

El 59% de los padres estadounidenses considera que sus hijos est¨¢n enganchados a las pantallas y un 27% admiten que ellos tambi¨¦n experimentan cierta adicci¨®n, seg¨²n una encuesta desarrollada por la ONG Common Sense Media. Tal vez se quedan cortos. Un estudio de Nielsen calcula que los adultos pasan una media de dos horas y media al d¨ªa con la vista puesta en el m¨®vil.

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El experto considera que es posible detectar dos h¨¢bitos que nos ayudar¨¢n a darnos cuenta de que tenemos que cambiar algo: cuando sacamos constantemente el m¨®vil del bolsillo para comprobar si tenemos alguna llamada, mensaje o notificaci¨®n y cuando percibimos que hemos dejado de lado alguna actividad que antes realiz¨¢bamos con m¨¢s frecuencia. ¡°Aunque no tenemos la sensaci¨®n de consumir mucho tiempo con las pantallas, es habitual darse cuenta de que ¨²ltimamente no leemos libros, pasamos menos tiempo con la gente que queremos o apenas hacemos deporte¡±, se?ala.

Una vez somos conscientes del problema, es el momento de buscar soluci¨®n. Y no es sencillo. Un informe del Observatorio de Riesgos Laborales de la Universidad Jaime I advierte de que cerca del 8% de los usuarios se siente inc¨®modo, irritable o impaciente al tener que usar las TIC. No obstante, el 30% afirmaba tener problemas para desconectar de ellas. Para colmo, dejar a un lado el m¨®vil durante las vacaciones puede llegar a resultar m¨¢s complicado que hacerlo en nuestro d¨ªa a d¨ªa. ¡°En verano cambiamos de escenario, de h¨¢bitos y de rutina. Las pantallas son un recurso que nos ayuda a conservar aquello que nos da seguridad¡±, explica Entrala.

Las pantallas son un recurso que nos ayuda a conservar aquello que nos da seguridad

La respuesta tiene que ser radical: tenemos que salir de nuestra zona de confort. Tenemos que ser conscientes de que no pasa nada si apagamos la consola durante unos d¨ªas o si dejamos el m¨®vil en casa cuando vamos a la playa. ¡°Hoy, parece imprescindible llevar el m¨®vil a todas partes por si pasa algo. Lo cierto es que no pasa nada. Si alguien pod¨ªa tardar cinco minutos en localizarte, ahora va a tardar 20. No es tan dram¨¢tico¡±, comenta el experto.

Por otro lado, resulta positivo recuperar algunos h¨¢bitos que estamos perdiendo y marcarnos una serie de objetivos a cumplir. En este sentido, ser¨ªa recomendable hacer una lista con aquello que queremos hacer durante las vacaciones y centrarnos en completarla.

Tambi¨¦n existen soluciones externas bastante creativas a las que podemos recurrir. Es el caso de Komoru, la propuesta del estudio creativo Cohda que consiste en un bol inspirado en los tradicionales jardines zen japoneses para que entierres el tel¨¦fono. Las microesferas que componen su arena bloquean las se?ales electromagn¨¦ticas y aislan el dispositivo mientras est¨¢ dentro.

Los beneficios de afrontar un plan de desintoxicaci¨®n tecnol¨®gica son perceptibles en el corto plazo. Tras superar el efecto retirada, que puede producir cierto nerviosismo seg¨²n los expertos, los usuarios pueden prestar una atenci¨®n m¨¢s continuada a lo que hacen en cada momento sin preocuparse por interrupciones. Esto afecta directamente al descanso, por lo que si somos capaces de apagar nuestros terminales mientras estemos de vacaciones, es m¨¢s probable que volvamos a casa con las pilas cargadas.

Por otro lado, diversos estudios han demostrado que la necesidad de interacci¨®n natural en el ser humano no debe responderse exclusivamente a trav¨¦s de estos dispositivos. ¡°La pantalla es un est¨ªmulo que llena vac¨ªos que uno tiene en la vida. Si te aburres, la miras. Si te encuentras mal con una persona emocionalmente, subes una foto a Instagram para conseguir likes y recuperar tu autoestima¡±, opina Entrala. ¡°Cuando tu vida est¨¢ bien y descubres que la vida sin pantallas es muy gratificante, es m¨¢s sencillo terminar con h¨¢bitos que no te aportan nada y te quitan energ¨ªa y tiempo¡±.

Desde EL PA?S RETINA, nos hemos confabulado con la plataforma Empantallados para crear El verano de tu vida, una serie de contenidos en los que trataremos de entender los s¨ªntomas que nos indican que nos estamos pasando de la raya con la tecnolog¨ªa durante nuestras vacaciones y explicaremos c¨®mo hacer un uso responsable de los dispositivos tecnol¨®gicos en verano.