As¨ª contribuye ¡®El negro de WhatsApp¡¯ a perpetuar el racismo
El uso de las apps de mensajer¨ªa en c¨ªrculos de confianza, la viralidad de los memes y su car¨¢cter supuestamente humor¨ªstico afianzan los estereotipos, seg¨²n un estudio
Tal vez no lo has enviado, pero es probable que lo hayas recibido. Seguramente lo has visto y quiz¨¢s te ha hecho gracia. El negro de WhatsApp es una foto editada de un hombre negro casi desnudo que lleva cinco a?os circulando en forma de meme por esta app de mensajer¨ªa y otras redes sociales. Y tambi¨¦n es una foto de c¨®mo el racismo, amparado por las tecnolog¨ªas de comunicaci¨®n encriptada, y facilitado por nuevos formatos y formas de generar contenidos, persiste en nuestra sociedad y nos pasa inadvertido.
"En WhatsApp, como est¨¢ estructurado en estas redes de confianza, somos m¨¢s permisivos", explica Ariadna Matamoros-Fern¨¢ndez, del centro de investigaci¨®n de tecnolog¨ªas digitales de la Universidad de Tecnolog¨ªa de Queensland (QUT), en Australia. El objetivo final de esta actitud pasiva es, en l¨ªneas generales, tener la fiesta en paz. "Es un poco como cuando vas a casa en Navidad. Si tienes un familiar que hace una broma racista, pues quiz¨¢s no le dices nada. O le dices algo al principio, pero despu¨¦s lo dejas".
Este fen¨®meno y su relaci¨®n con las nuevas tecnolog¨ªas y los nuevos modos de comunicaci¨®n que estas facilitan han sido objeto de estudio de la investigadora en su ¨²ltimo paper. "Quer¨ªa estudiar el racismo en redes. Y si quieres hablar de racismo, tienes que hablar de raza. Es importante, aunque nos han ense?ado a no ver la raza en una sociedad que est¨¢ extremamente racializada", explica. En este contexto empez¨® a preguntarse qu¨¦ significa ser blanco y c¨®mo encajan en ese marco del privilegio racial las cosas que se consideran graciosas.?"Todo esto est¨¢ muy dentro de nuestra cultura y no te lo planteas".
Un disfraz de humor
El negro de WhatsApp es, por sus caracter¨ªsticas, un claro ejemplo de c¨®mo se estructura este fen¨®meno. Para empezar, el retrato presenta a un hombre hipersexualizado. "Esto viene de una larga historia, por parte de los blancos, de mercantilizar los cuerpos negros", a?ade la investigadora, que explica en su paper c¨®mo, con este tipo de contenidos, la gente blanca reafirma inadvertidamente su poder y privilegios en sus interacciones cotidianas en WhatsApp. Sin embargo, las implicaciones que tiene el masivo intercambio de esta y otras im¨¢genes de trasfondo racista se disuelven en el hecho de que, al ser memes, son una broma. "No ves que es racista porque lo utilizas como un objeto para tu propia diversi¨®n, para tus risas o placer".
Es una cuesti¨®n de educaci¨®n e ignorancia Ariadna Matamoros-Fern¨¢ndez (QUT)
La realidad aflora en el contexto que rodea a estos contenidos. "Si no lo pones en una Historia donde existe el black face, donde siempre se pintan los cuerpos negros hipersexualizados, donde proyectas tus fantas¨ªas sexuales en el otro... Si no sabes todo esto, no te parece racista. Y la gente te dir¨¢ que esto podr¨ªa pasar con un blanco. Pero, vaya, es negro y tiene un pene enorme". En este sentido, Matamoros-Fern¨¢ndez, sit¨²a el problema esencial m¨¢s all¨¢ del formato del meme y de la tecnolog¨ªa que lo hace viral: "Es una cuesti¨®n de educaci¨®n y de ignorancia".
El marco desde el que se suele estudiar el racismo en Espa?a comienza en los a?os ochenta, concluida la dictadura y con la llegada de la inmigraci¨®n. "Pero en el pasado colonial hay mucha contribuci¨®n espa?ola", matiza la investigadora. "El racismo es estructural, no solo es prejuicio. Y lo reproducimos diariamente en frases como 'estoy trabajando como un negro'. ?De d¨®nde viene esto?".
WhatsApp sin ley
Sin embargo, incluso en el caso de que alguien detecte lo ofensivo del meme, lo m¨¢s probable es que no ocurra nada. "Lo que hace WhatsApp es que en estos grupos privados de familia y amigos es m¨¢s dif¨ªcil que cuando t¨² haces una 'cagada', es dif¨ªcil que alguien te llame la atenci¨®n. Si t¨² haces una broma racista en Twitter, vas a tener a gente que se te va a echar encima si lo ve".
Whatsapp rechaza este en sus t¨¦rminos de uso tipo de contenidos
En el opaco backstage que erige la encriptaci¨®n de extremo a extremo caracter¨ªstica de WhatsApp, vale pr¨¢cticamente todo. A falta de un sistema de moderaci¨®n de contenidos, los controles que dispone la plataforma pasan por limitar a cinco el n¨²mero de veces que puede reenviarse un mismo mensaje y bloquear las cuentas abusivas. Adem¨¢s, los usuarios tienen la opci¨®n de denunciar y bloquear contactos, pero no existe la posibilidad de reportar contenidos concretos.
Sin embargo, la app de mensajer¨ªa se cubre las espaldas en sus t¨¦rminos y condiciones. "No usar¨¢s nuestros servicios en formas que sean ilegales, obscenas, difamatorias, amenazantes, intimidantes, acosadoras, agresivas, ofensivas desde el punto de vista racial o ¨¦tnico o que promuevan o fomenten conductas que ser¨ªan ilegales", proclaman los particulares mandamientos de la plataforma. "Para ellos es casi un documento legal, una salvaguarda", razona Matamoros-Fern¨¢ndez. "Nadie puede denunciar contenido en WhatsApp. Y t¨² no vas a denunciar a tu colega porque te ha enviado un meme".
El humano defecto
Sin embargo, se?ala la investigadora, los avatares tecnol¨®gicos son la guinda de un pastel que empieza por nosotros: "El negro de WhatsApp lo que indica es que tenemos que volver el debate a lo humano. Lo tecnol¨®gico lo que hace es amplificar, normalizar, es mucho m¨¢s f¨¢cil".
?C¨®mo se resuelve lo humano? Matamoros-Fern¨¢ndez prescribe una combinaci¨®n de tres factores: regulaci¨®n del estado, mayor colaboraci¨®n por parte de las plataformas y educaci¨®n de la ciudadan¨ªa. "Por ejemplo, muchos acad¨¦micos ya han dicho que antes de que Facebook se fusione con Instagram y WhatsApp, a lo mejor hay leyes antimonopolio que se tienen que activar, porque una vez que est¨¦ todo junto, ser¨¢ muy dif¨ªcil de romper y hay muchos problemas asociados".
El apartado de educaci¨®n supera la cuesti¨®n de las habilidades digitales. "Tambi¨¦n hace falta alfabetizaci¨®n racial, que no est¨¢ en nuestro curriculum educativo", se?ala la investigadora. "Vivimos en la idea de que no hablamos raza. Hablamos de nacionalidad, de cultura... Pero la que la raza s¨ª importa. Es una categor¨ªa que organiza buena parte de nuestra sociedad".
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