¡°Si Facebook cobrara por suscripci¨®n, quien no puede permit¨ªrselo no podr¨ªa usarlo¡±

Cada vez que un grupo de nuevos ingenieros se incorpora a las filas de Facebook, Mike Schroepfer, responsable de desarrollo de tecnolog¨ªa de la red social, les da la bienvenida. ¡°Una de las primeras lecciones que les doy es que va a haber mucha gente en el mundo con opiniones y altas expectativas sobre el trabajo que hacen¡±, comenta el ejecutivo en una mesa redonda organizada con motivo del evento tecnol¨®gico WebSummit, que se celebra estos d¨ªas tanto en Lisboa como de forma virtual. Esas grandes esperanzas ata?en a problemas como la manipulaci¨®n electoral, el discurso de odio o la gesti¨®n de la informaci¨®n potencialmente da?ina que se vierte en la plataforma en relaci¨®n con asuntos tan sensibles como la pandemia. ¡°Nuestro trabajo es estar a la altura¡±, concluye.

El objetivo de la divisi¨®n que lidera Schroepfer es desarrollar tecnolog¨ªas que ampl¨ªen y complementen el trabajo de los humanos que gestionan la plataforma. En este contexto, el que fuera vicepresidente de ingenier¨ªa en Mozilla, ha visto pasar una revoluci¨®n ante sus ojos en cuesti¨®n de un lustro. ¡°Hace solo cinco a?os, el contenido que violaba las normas de nuestra plataforma era detectado casi exclusivamente por la gente real que lo ve¨ªa o nuestros equipos de revisores. Ahora la inmensa mayor¨ªa de este contenido se localiza primero por nuestros sistemas automatizados¡±, compara.

En medio de esos avances, la comunidad de usuarios no se ha mantenido est¨¢tica. El problema del discurso de odio ha sido un creciente quebradero de cabeza para Schroepfer y su equipo. ¡°Es al mismo tiempo una de las cosas m¨¢s horribles que puedes encontrar en Internet y tambi¨¦n una de las m¨¢s tecnol¨®gicamente complejas para abordar utilizando inteligencia artificial¡±, razona. Su compromiso es continuar avanzando en sistemas que puedan identificar los contenidos da?inos con mayor velocidad y eficiencia. ¡°Estamos en el punto en que estos sistemas superan o igualan la capacidad de un humano no entrenado¡±, se?ala. ¡°Si me hubieras preguntado hace tres a?os, no habr¨ªa estado tan seguro de que pudi¨¦ramos llegar hasta aqu¨ª

Aqu¨ª entran en juego sistemas de aprendizaje autosupervisado en los que el algoritmo se entrena a s¨ª mismo y modelos multiling¨¹es que permiten que lo aprendido en un idioma sea v¨¢lido en otros. El modelo XLM-R juega en las dos ligas. Permite identificar discurso de odio y otros contenidos no admitidos por la plataforma y trasladar lo aprendido a otras lenguas, de manera que no es necesario crear un modelo para cada idioma. Con sistemas como estos, se rebaja adem¨¢s la barrera que supone la predominancia del ingl¨¦s en Internet, los conjuntos de datos para entrenamiento y el desarrollo tecnol¨®gico en general.

En la misma l¨ªnea, la red social present¨® en octubre un modelo de traducci¨®n capaz de interpretar de forma directa cien idiomas sin necesidad de recurrir al ingl¨¦s. Ahora falta encontrar la manera de implementar esta herramienta en el engranaje de Facebook. ¡°Todav¨ªa est¨¢ en la fase de investigaci¨®n. Ponerlo a funcionar en la escala a la que operamos es otro desaf¨ªo al que nos enfrentaremos durante los pr¨®ximos dos a?os¡±, matiza el ejecutivo. ¡°Hay much¨ªsimos avances como este en el que probamos que podemos hacer algo una vez para un experimento. ?Pero c¨®mo haces lo mismo cientos de miles de millones de veces, todos los d¨ªas, para miles de millones de personas, y con la precisi¨®n y robustez necesarias? Hay mucho que hacer¡±.

El lado bueno del lado malo

Schroepfer defiende con fervor que los avances conquistados por Facebook y su ecosistema de servicios justifican con creces la mir¨ªada de controversias que rodean a esta y otras redes sociales. ¡°Sigo aqu¨ª porque creo que la tecnolog¨ªa es una de las mejores maneras de mejorar la vida de la gente¡±, asegura. Frente a las cr¨ªticas al modelo de negocio basado en anuncios personalizados, aduce que ese formato da alternativas a gente que de otro modo no podr¨ªan permitirse publicitar su negocio. "Mucha gente piensa en la publicidad en Facebook como algo malo. Deber¨ªan preguntar a las peque?as empresas que usan estas herramientas para entender c¨®mo impacta en sus vidas y bienestar econ¨®mico", argumenta.

Los beneficios que recibe Facebook como administrador de ese engranaje hacen posible, asegura Schroepfer, que los servicios de mensajer¨ªa y videollamada disponibles en la plataforma o en WhatsApp est¨¦n disponibles de forma gratuita para sus cerca de 3.000 millones de usuarios activos. "Por eso puedo construir un laboratorio que nos permite tener la mejor tecnolog¨ªa del mundo para luchar contra los contenidos malos y extremistas", a?ade. "Si cobr¨¢semos por suscripci¨®n, funcionar¨ªa para la gente que puede permit¨ªrselo, pero quien no puede permit¨ªrselo no podr¨ªa usarlo".

Ante el problema el problema de la polarizaci¨®n en las redes, el ejecutivo, asegura que est¨¢n trabajando para neutralizarla. "No me voy a sentar aqu¨ª a decir que es perfecto o que hemos terminado", matiza, antes de quitar hierro a las advertencias de quienes ven a Facebook como un gigante con la capacidad de predecir nuestro comportamiento. "Eso est¨¢ fuera del alcance de cualquier tecnolog¨ªa que haya visto".

En el futuro pr¨®ximo de la divisi¨®n tecnol¨®gica de Facebook, la realidad virtual cobra especial importancia. "Estamos incansablemente centrados en bajar el coste de esta tecnolog¨ªa para que m¨¢s gente pueda utilizarla", asegura Schroepfer. Seg¨²n sus c¨¢lculos, estos sistemas son ahora cinco veces m¨¢s baratos que hace cinco a?os. "Por geniales que sean tu smartphone y tu PC, no se han vuelto cinco veces m¨¢s r¨¢pidos ni cinco veces m¨¢s baratos en el mismo periodo".