2023, el a?o en el que vivimos en bragas
Un sinf¨ªn de celebridades se han sumado al fen¨®meno estil¨ªstico del a?o, aunque su r¨¦plica en el mundo real no est¨¢ tan clara
Los seguidores de la serie Sexo en Nueva York seguro que recordar¨¢n ese m¨ªtico episodio de su cuarta temporada en el que Carrie Bradshaw es llamada a desfilar durante la Semana de la Moda junto a modelos y otras personalidades del c¨ªrculo elegante de Manhattan. Para sorpresa de la columnista, su ¨²nica prenda a llevar bajo un abrigo de Dolce & Gabbana es una braguita enjoyada. Aunque la idea no entusiasma a Bradshaw, tras varias evasivas decide lanzarse a la piscina ¨Cy casi de forma literal, por la estrepitosa ca¨ªda que experimenta sobre la pasarela¨C, aclamada entre aplausos y los gritos de su amigo Stanford ¡®oh my GOD, she¡¯s fashion roadkill!¡¯ ¨C?Dios m¨ªo, ha sido atropellada por la moda!¨C.
Como en otra infinidad de momentos de la serie, el personaje de Sarah Jessica Parker resulta revolucionario ¨Ce incluso visionario¨C en cuesti¨®n de estilismo, ya que puso por primera vez en un contexto medi¨¢tico de moda y m¨¢s all¨¢ de la alcoba eso de salir vestida con unas simples bragas. Dos d¨¦cadas despu¨¦s, el fen¨®meno no-pants o pantless, tal y como el p¨²blico anglosaj¨®n ha bautizado al modo de vestir sin pantalones o una falda para poner la ropa interior en un primer plano, parece haber despegado por completo con una lista casi infinita de celebrities que se atreven, al igual que Bradshaw, a acudir a un evento o salir a la calle literalmente en bragas.
Una de las primeras im¨¢genes que hizo saltar la alarma sobre una posible tendencia tuvo lugar a finales del a?o pasado, cuando Kendall Jenner fue vista paseando por Los ?ngeles y a plena luz del d¨ªa con un ramo de girasoles en mano, bolso de Bottega Veneta en la otra y un jersey azul marino de la misma firma. En vez de unos pantalones llevaba unas sencillas medias de Calzedonia de siete d¨®lares y una braguita a juego. Nada m¨¢s y nada menos.
A las pocas horas y entre bromas y elogios, cuentas de Instagram como la de la estilista Dani Michelle pon¨ªan la balanza a favor del arriesgado look, que d¨ªas despu¨¦s ser¨ªa secundado por su hermana Kylie Jenner a la llegada del desfile de Loewe con un conjunto de camiseta interior y braguita de la marca. Esta proeza de estilismo gener¨® en su perfil de Instagram 2.9 millones de likes al postear el look.
Desde entonces, ya sea dejando las bragas a la vista o sugiriendo su presencia con camisas largas y chaquetas oversize (Maya Hawke, Hailey Bieber, Emily Ratajkowski o la mism¨ªsima Alexa Chung durante su ¨²ltima visita a Madrid son algunos ejemplos), un sinf¨ªn de personalidades se han sumado a la tendencia no-pants con el consecutivo revuelo en redes sociales que conlleva.
La actriz Camila Mendes con solo un sujetador y un culotte de tiro alto bajo una chupa de cuero a la entrada del desfile de Coach, el look de nueva oficinista de Sidney Sweeney, la manera de llevar la braguita retro seg¨²n Chiara Ferragni, la propuesta fiestera de Beyonc¨¦, Bella Hadid por Manhattan comiendo un trozo de pizza con sus vertiginosas piernas al aire bajo un boxer... Son im¨¢genes que se han hecho virales, planteando seriamente esta tendencia como estilismo diurno o llevado al l¨ªmite con las alocadas e inclasificables versiones de Julia Fox.
Y quedar¨¢ grabado para la posteridad la aparici¨®n de la modelo y actriz Jodie Turner Smith durante el evento Vogue World: London, vestida por Viktor & Rolf con una braga y una franja de tela escultural en forma de lazo junto a tiras de diamantes, guantes negros y unos infinitos stilettos. Sublime en todos los sentidos.
Lotta Volkova, la gran impulsora del movimiento
Pero si hay una mujer que ha sido capaz de instigar con ¨¦xito a la revoluci¨®n pantless como ya intentaron en su momento Kim Kardashian, Anna Dello Russo o Nicki Minaj, ella es Lotta Volkova. Esta rara avis de nuestra generaci¨®n en materia de estilismo que se dio a conocer al mundo entero como la mano derecha de Demna para Vetements y Balenciaga, es la gran conjuradora de la ropa interior como prenda b¨¢sica de armario. Si en la c¨¢psula que dise?¨® para Jean Paul Gaultier la primavera de 2022 ya abord¨® la lencer¨ªa a modo de material aspiracional para el d¨ªa a d¨ªa, ahora sigue perpetuando la tendencia al frente del estilismo de Miu Miu.
Desde su primera colaboraci¨®n para el prefall 2019 de la marca junto a la fot¨®grafa Julie Greve, Volkova se ha convertido en parte inherente de la savia nueva y sorprendente que recorre la segunda l¨ªnea de Miuccia Prada, incluido su empe?o por poner la ropa interior en un primer plano. ¡°Todo este movimiento empez¨® con Lotta Volkova, que tiene las mejores piernas de la moda. Como estilista de Miu Miu est¨¢ haciendo un trabajo muy profundo de campo para las colecciones de la marca, busca concienzudamente en su archivo. De ah¨ª recuper¨® para el desfile la primera braga que Miuccia Prada dise?¨® en Miu Miu, en el verano del 2000, con un tono azul marino siguiendo la l¨ªnea sobria de la marca¡±, concreta Iria Dom¨ªnguez. La experta en comunicaci¨®n de moda se refiere al desfile oto?o¨Cinvierno 2022, la colecci¨®n m¨¢s rupturista de Miu Miu hasta entonces por las microfaldas que dejaban entrever ¨Ca¨²n de forma sutil¨C el filo de una braguita satinada en colores pastel.
Si el siguiente verano Miu Miu incidi¨® en la tendencia con juegos de transparencias y bajando unos cent¨ªmetros el tiro de las prendas, este invierno 2023 Lotta deja la sugerencia a buen recaudo y defiende un estilismo donde la ropa interior brilla en todo su esplendor. ¡°Hablamos de una tendencia que nace directamente de las pasarelas y parte de la superposici¨®n de leotardos o medias para finalizar con las braguitas a la vista, como muestra este ¨²ltimo desfile¡±, puntualiza Alba Melendo, directora creativa y la estilista de cabecera de Karol G y Bad Gyal.
Sin quererlo, la creativa rusa hab¨ªa dictaminado sentencia: s¨ª o s¨ª, las bragas se convertir¨ªan en una prenda b¨¢sica para salir a la calle los pr¨®ximos meses. ¡°Si ha ocurrido ahora y no hace a?os es porque no hab¨ªa habido una estilista a la altura de Lotta Volkova trabajando en una casa de moda tan exquisita como Miu Miu¡±, corrobora Alicia Padr¨®n, directora creativa y visionaria del street style. ¡°Lotta ha conseguido que en Miu Miu el estilismo supere a la propia colecci¨®n, es f¨¢cil encontrarte a chicas por la calle que se han cortado las faldas y las chaquetas para replicar ese look [oto?o¨Cinvierno 2022]. Cuando una marca consigue que su trabajo sobre una pasarela se lleve en la calle roza casi el concepto de movimiento cultural, algo parecido a ese esp¨ªritu revolucionario que supuso en los a?os 60 la aparici¨®n de la minifalda¡±, se?ala Dom¨ªnguez.
Chicas ¡®pantless¡¯: de Edie Sedgwick a Emma Corrin
En esa misma d¨¦cada comienzan los primeros escenarios de ensayo y error de la tendencia, con una tierna Edie Sedwick posando con solo una camisa y medias negras bajo el objetivo de Andy Warhol, seguido de la proliferaci¨®n de los hot pants que trajeron los 70 o el triunfo del aer¨®bic en la posterior d¨¦cada. Los a?os 90 normalizaron su presencia en la fotograf¨ªa de moda, unida a esa imagen de resaca interminable en la cama perpetuada por el heroin chic. ¡°Nunca olvidar¨¦ a Rose McGowan en los VMA¡¯s del 98. Ese look poderos¨ªsimo cambi¨® la historia de las alfombras rojas. Tambi¨¦n me impact¨® Sigourney Weaver en Alien, porque cuanto m¨¢s pesado es el upper body m¨¢s me gusta el contraste. Y por supuesto las fotos de Corinne Day a Kate Moss en British Vogue del verano del 93¡å, se?ala Padr¨®n.
Pero si hablamos de d¨¦cadas, Iria Dom¨ªnguez apunta a los 2000 como la otra pata temporal del movimiento, que viene a confirmar el car¨¢cter c¨ªclico de la moda con una fuerte presencia de est¨¦tica Y2K, con aquellas tendencias de la segunda d¨¦cada que propulsaron it girls como Cory Kennedy. ¡°Estamos viviendo un revival del indie sleaze y la est¨¦tica Tumblr, con momentos imborrables como ese m¨ªtico robado que hicieron de Mary Kate Olsen con una camisa y zapatones de Balenciaga por la calle¡±.
En 2023, y como a?adido al t¨¢ndem de ¨¦xito que forman Volkova y Prada, entra la actriz Emma Corrin, nueva musa de Miu Miu y quien mejor ha defendido la ausencia de pantalones en sus ¨²ltimas apariciones. La princesa Diana en la serie The Crown no solo se enfunda uno de sus culottes siempre que puede (como el del look 48 de la firma para asistir al festival de Venecia) sino que es imagen de su ¨²ltima colecci¨®n Holiday y ha desfilado con unas bragas de paillettes para este oto?o¨Cinvierno 2023 junto a Mia Goth, Zaya Wade y Ethel Cain.
¡°Es quien mejor lleva la tendencia, le pega mucho y lo lleva a su terreno como si fuera parte de su propio armario¡±, se?ala Dom¨ªnguez. Tras su estilo arriesgado y a menudo sin g¨¦nero se esconde el estilista brit¨¢nico Harry Lambert (creador del mito est¨¦tico que rodea a Harry Styles), que juega con el eclecticismo al l¨ªmite y que encaja como un guante en la nueva era Miu Miu.
Junto a Miu Miu, una multitud de marcas se han sumado a la tendencia desde la primavera pasada, como muestra Bottega Veneta en el look defendido por Kendall Jenner o el juego de transparencias que formulan sobre ropa interior Antonio Marras y Ann Demeulemeester. De la propuesta pantless de Coperni y Chlo¨¦ que pone el foco en la prenda de abrigo a la versi¨®n ochentera con prominentes hombreras del desfile Andreas Kronthaler para Vivienne Westwood de este oto?o, pasando por los calzoncillos lenceros de N.21 o los micro shorts de Missoni en su punto jacquard. Y la pr¨®xima temporada el fen¨®meno promete perdurar en el tiempo, como vaticinan los desfiles de Michael Kors o Gabriela Hearst visibilizando lencer¨ªa de estilo 70s bajo caftanes de rejilla.
De la pasarela y la percha ¡®celebrity¡¯ al mundo real
Mil y una f¨®rmulas de c¨®mo llevar la tendencia no-pants se han percibido a la salida de los desfiles, en esa pasarela alternativa que se monta durante Las Semanas de la Moda. Alicia Padr¨®n, c¨¦lebre por sus estilismos irrepetibles a cualquier hora del d¨ªa, describe su experiencia: ¡°Yo me lo he puesto con una braga negra tipo brief y una falda de poliuretano transparente por encima. Tengo una de Jil Sander con un suave color lila que tinta un poco mis piernas con la luz y me hace sentir un poco m¨¢s vestida, aunque el pl¨¢stico haga un poco de efecto invernadero¡±, confiesa.
Llevado al mundo terrenal fuera de la moda, en cambio, los ejemplos escasean. ¡°Si consideras a la gente que trabaja en la moda como un p¨²blico real, entonces s¨ª, es real¡±. Alba Melendo tampoco confirma su ¨¦xito generalizado: ¡°No se trata de una an¨¦cdota loca de este a?o pero tampoco es apta para todos los p¨²blicos. En realidad es m¨¢s para gente con piernas esbeltas, delgadas y cuerpos trabajados en gimnasio. La moda es un juego, nos lo tenemos que tomar as¨ª¡±.
Verlo sobre una pasarela o en un reel de Instagram, y vivirlo en tu propia piel, es otra cosa. En la web de moda, cotilleos y estilo de vida Page Six, la periodista Elena Fishman cuenta c¨®mo se sinti¨® al llevar la tendencia durante unas horas. ¡°Mientras desfilaba por el Upper West Side con mis bragas y tacones a lo Kylie [Jenner] cre¨ª al principio estar viviendo una pesadilla, y el hecho de que fuera hiciera mucho fr¨ªo no ayud¨®¡±, describe. ¡°Aunque ir con los muslos al descubierto result¨® bastante c¨®modo y, a los transe¨²ntes pareci¨® gustarles la idea, a?adir un abrigo lo hizo todo m¨¢s f¨¢cil, adem¨¢s bloque¨® mi trasero a la vista¡±, relata divertida la periodista.
Entonces, si estamos ante una tendencia compleja de ejecutar que no va a secundar el consumidor, ?qu¨¦ sentido tiene para las marcas defenderla? Iria Dom¨ªguez lanza una teor¨ªa no muy descabellada sobre el asunto: ¡°Si te fijas, es una manera sutil de poner la atenci¨®n en los zapatos, que es la principal fuente de ingresos de una marca junto a los bolsos. Es su manera de centrar la venta en los complementos¡±. Menos ropa y unos buenos zapatos. As¨ª nos vestiremos en el 2024.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.