?A qui¨¦n quieres enga?ar con ese donut?

?Qu¨¦ sucede con esos macarons, con ese carrot cake con frosting una vez la bloguera de moda los ha fotografiado en plano cenital con sus sandalias tipo Birkenstock (con calcetines) en segundo plano? Qui¨¦n sabe, pero 9 de cada diez veces no acaban en el est¨®mago de la bloguera. La cuenta de Instagram You Did Not Eat That (no te comiste eso) ha nacido con el objetivo crucial de aclarar esa falacia. Su creadora, que prefiere mantenerse en el anonimato, ha trabajado "en los medios y en la moda" durante m¨¢s de una d¨¦cada y asegura en una entrevista que en este tiempo la cuesti¨®n de los blogs se ha metido "en una espiral del absurdo", con chicas (casi siempre chicas) que hacen de su vida un eterno shooting hiperproducido en el que la comida es un elemento m¨¢s de escenograf¨ªa.

Una bloguera nunca se inmortalizar¨¢ con una tapa de callos o un plato de estofado y se mantendr¨¢ alejada de todo carbohidrato que no sea el arroz de un nigiri, o alg¨²n plato de pasta especialmente fotog¨¦nico, de paso por #Milano. M¨¢s bien mantendr¨¢ una obstinada preferencia por cualquier cosa que pueda formar parte de un brunch o una merienda (?qui¨¦n m¨¢s tiene tiempo de merendar, m¨¢s all¨¢ de los 12 a?os, si no una bloguera?) y que aporte un buen Pantone.

Todo empez¨® con los macarons. La autora de la cuenta de Instagram par¨®dica asist¨ªa a una presentaci¨®n de unas gafas de sol en la que colocaron una fuente de macarons como elemento decorativo. Uno por uno, los blogueros y allegados se acercaban a la mesa y fotografiaban las gafas al lado de una monta?ita de pastitas francesas crom¨¢ticamente coordinadas. Alguno, osado, hasta hac¨ªa como que se lo llevaba a la boca y se hac¨ªa un selfie con el macaron a punto de ser devorado, pero despu¨¦s lo devolv¨ªa al plato. Al final, los blogueros se fueron y la comida se qued¨®.

A partir de ah¨ª, la autora an¨®nima empez¨® a peinar Instagram y la blogosfera en busca de fotos especialmente rid¨ªculas de gente tendenciosa con comida. Descubri¨® que los donuts son los nuevos cupcakes, quiz¨¢ siguiendo el esp¨ªritu de s¨²bito amor por la comida basura que le ha entrado a la moda ¨²ltimamente (?el equivalente cal¨®rico a cuando se pusieron de moda las gorras de camionero?), con el logo de McDonalds en los jerseis de Moschino y los bolsos de comida china y de paquetes de patatas fritas que han hecho Charlotte Olympia y Anya Hindmarch. Tambi¨¦n es habitual el product placement literal, o sea colocar la consabida cajita de Ladur¨¦e con la torre Eiffel de fondo. Para la autora del Instagram, las fotos m¨¢s ofensivas son las de regazo, "porque sacar un donut con cobertura rosa encima de unos muslos separados por ocho pulgadas de thigh gap es dif¨ªcil de tragar". Aunque quiz¨¢ los m¨¢s involuntariamente c¨®micos son los posts obviamente patrocinados, en los que el bloguero ha recibido dinero o regalos por fotografiarse con algo. Cierta marca de helados celebr¨® hace poco un aniversario enviando muestras de su producto a varios creadores de opini¨®n y el resultado fue francamente gracioso. ?Qui¨¦n no extender¨ªa un pu?ado de polos encima de una colcha? No se ve¨ªa una interacci¨®n con la comida tan natural desde que Victoria Beckham asegur¨® que "come de todo", incluso "tostadas con sal".

La boda de los Kimye, en la que se sirvi¨® comida que podr¨ªamos calificar de haute viejuna (ancas de rana, escargots y otras cosas que aparec¨ªan antes en las pel¨ªculas para evidenciar las diferencias entre los sofisticados de clase alta y el parvenu), sospechamos que por expreso deseo de Kanye West ¨C?es la salsa bearnesa el equivalente a las americanas estilo Ivy League?¨C tambi¨¦n ha dado ocasi¨®n para mucho Instagram conjuntando tu Givenchy con tu prote¨ªna. La misma Kourtney Kardashian se fotografi¨® con unas patitas rebozadas de batracio.

Algunos de los aludidos han reaccionado respondones, como @ElliotWestVillage, que escribi¨® "s¨ª que me lo com¨ª y luego corr¨ª para quemarlo", otros se lo han tomado con humor, como las bloguera Eva Chen y Emily Weiss, que han tagueado @Youdidnoteatthat en sus posts de comida, y los hay que han ofrecido pruebas de lo contrario, como Leandra Medine, de Man Repeller, que colg¨® un v¨ªdeo en el que se com¨ªa un cupcake. Otros, en cambio, han bloqueado el acceso a sus cuentas de Instagram.