Los ?ngeles azules, el grupo de cumbia mexicano con el que Coachella desaf¨ªa a Trump
No s¨®lo Beyonc¨¦, The Weeknd o Eminem son los artistas m¨¢s esperados del festival californiano que arranca este fin de semana, sino tambi¨¦n esta formaci¨®n querid¨ªsima por los mexicanos.
Ni es la primera vez, ni ser¨¢ la ¨²ltima. En el ¨²ltimo lustro los festivales de m¨²sica nos han ofrecido sorpresas que, a?os ha, ser¨ªan del todo impensables. Quienes fueron al Primavera Sound en 2016 se encontraron con Los Chichos, y el Sonorama de Aranda del Duero cont¨® con Raphael en 2014 y dos a?os despu¨¦s con El D¨²o Din¨¢mico; artistas que por muy cl¨¢sicos que sean poco (o nada) tienen que ver con el grueso de m¨²sicos y bandas de pop, rock y electr¨®nica que proliferan en estos eventos. Postureos aparte, todos ellos acabaron triunfando y sorprendiendo para bien al p¨²blico en sus respectivas actuaciones. De modo que m¨¢s all¨¢ de las cr¨ªticas iniciales de los puristas o los h¨ªpsters m¨¢s cerrados de mente, si algo queda claro es que los bookers de estos festivales, mediante este tipo de contrataciones, se aseguran un golpe de efecto publicitario de lo m¨¢s efectivo. Para bien o para mal, al menos que hablen.
Y no, esto no s¨®lo ocurre en nuestro pa¨ªs. Hace unos meses el festival californiano de Coachella desvel¨® su line up para esta edici¨®n, el cual se celebra durante este y el pr¨®ximo fin de semana. Beyonc¨¦ (que tuvo que cancelar su aparici¨®n el pasado a?o a causa de su maternidad, siendo sustituida por Lady Gaga), The Weeknd o Eminem brillan esta vez como principales cabezas de cartel, pero en la letra peque?a hay una formaci¨®n cuya confirmaci¨®n ha causado much¨ªsima sorpresa: Los ?ngeles Azules, liderados por la familia Mej¨ªa Avante.
En Espa?a puede que la mayor¨ªa desconozca qui¨¦nes son Los ?ngeles Azules, pero prueben de preguntarle a alg¨²n amigo mexicano para que les ilustre. Desde que emergieran a principios de los ochenta, esta banda familiar de Barrio San Lucas en Iztapalapa, una de las zonas m¨¢s castigadas por la desigualdad y la pobreza en la Ciudad de M¨¦xico, hall¨® en la m¨²sica su mejor ant¨ªdoto para aspirar a una vida mejor. Poco a poco, a trav¨¦s de sus actuaciones en sonideros (lo que vienen siendo fiestas callejeras al estilo de los soundsystem jamaicanos o el funk de favela de Rio de Janeiro) y el apoyo en sus inicios del sello Discos Dancing, su cumbia rom¨¢ntica chilanga marc¨® a toda una generaci¨®n.
Aunque no todo fue un camino de rosas. La buena aceptaci¨®n en la capital mexicana de la salsa a principios de los noventa, y el hecho de que se quedaran sin la protecci¨®n de su sello discogr¨¢fico, provoc¨® uno de los episodios m¨¢s complicados para la formaci¨®n. La cumbia por entonces ya no estaba tan de moda, pero ellos lejos de reciclarse siguieron fieles a su sonido y no se detuvieron hasta que en 1993 firmaron un contrato con Disa Records, quien edit¨® en 1996 C¨®mo Te Voy a Olvidar, uno de los buques insignia de su repertorio.
A partir de aqu¨ª no cesaron sus apariciones en la televisi¨®n mexicana, colando sus temas en telenovelas de gran ¨¦xito como Rosalinda (protagonizada por Thal¨ªa) y empezando a ofrecer conciertos en California y Florida dada la demanda del p¨²blico. Su resurgir era un hecho, y m¨¢s despu¨¦s de que alguien proveniente del pop como Julieta Venegas les homenajeara con una versi¨®n de El List¨®n de Tu Pelo, o la propia Lucero se atreviera a reinterpretar a modo de ranchera su C¨®mo Te Voy a Olvidar. Una nueva generaci¨®n de artistas empezaba a reivindicarles como uno de los mayores estandartes de la m¨²sica popular mexicana.
Tras publicar un ¨¢lbum de versiones de Juan Gabriel en 2006, un a?o despu¨¦s la banda edit¨® Tu Juguete a trav¨¦s de Discos Musart. La estrategia no les fue nada mal ya que el disco fue todo un ¨¦xito en Argentina y les hizo internacionalizar a¨²n m¨¢s su cumbia rom¨¢ntica, pero en su M¨¦xico natal volvieron a ser algo menospreciados por los medios ya que su m¨²sica se vio opacada por el reggaet¨®n y el resurgir de los narcorridos. Por en¨¦sima vez, la cumbia no gozaba de su mejor momento.
Pero la sorpresa no se hizo esperar. Tras cambiar nuevamente de discogr¨¢fica les propusieron actuar en el festival de rock y pop Vive Latino de la Ciudad de M¨¦xico en 2013. Y aunque las cr¨ªticas no tardaron (como ahora ha ocurrido con lo de Coachella), su actuaci¨®n marc¨® un antes y un despu¨¦s en su futuro. Tras aquello, ese mismo a?o, Camilo Lara de Instituto Mexicano del Sonido produjo un disco en el que la banda regrab¨® sus mayores ¨¦xitos junto a invitados especiales como los rockeros S¨¢ul Hern¨¢ndez, Vicentico o Jay de la Cueva; en 2014 Aleks Syntek propuso a nuestros protagonistas que colaboraran con ¨¦l para grabar juntos una versi¨®n cumbia de Tu Recuerdo Divino y, ya en 2016, consolidaron el crossover musical lanzando el largo De Plaza en Plaza, en el que Los ?ngeles compartieron estudio de grabaci¨®n junto a Natalia Lafourcade, Gloria Trevi, Fito P¨¢ez, Ana Torroja, Miguel Bos¨¦ o el propio Syntek, entre otros artistas.
El hecho de que todos estos nombres ajenos a la cumbia se prestaran a colaborar con la banda volvi¨® a poner sobre el mapa a la familia Mej¨ªa Avante. Y lo que es m¨¢s importante: acerc¨® su legado a un nuevo target de p¨²blico que, hasta entonces, les ve¨ªa como algo caduco. Por mucho que las modas sean c¨ªclicas, nadie puede discutir que gracias a su empe?o Los ?ngeles Azules son todo unos supervivientes. Por muchas vicisitudes que han vivido en sus carnes, finalmente han ganado la batalla sin traicionarse a s¨ª mismos y acerc¨¢ndose en su justa medida a otros m¨²sicos que, lejos de modernizar, simplemente han refrescado su sonido.
Llegados a este punto la pregunta es clara: ?qu¨¦ representa su inminente actuaci¨®n en Coachella? Pues nada menos que un golpe sobre la mesa contra las pol¨ªticas xen¨®fobas de Donald Trump. Que una de las bandas m¨¢s populares de M¨¦xico act¨²e en un evento como este es algo as¨ª como llevar al caballo de Troya hasta el coraz¨®n del desierto californiano. Teniendo presente que California es el Estado con el mayor n¨²mero de mexicanos residentes (cerca del 40% de la poblaci¨®n total), no cabe duda de que los programadores del festival no han dado puntada sin hilo. Los prejuicios musicales de muchos seguir¨¢n ah¨ª, pero ya ver¨¢n c¨®mo cambiar¨¢ el asunto cuando en los pr¨®ximos d¨ªas veamos im¨¢genes de Paris Hilton, Rihanna o Kendall Jenner d¨¢ndolo todo entre el p¨²blico con Los ?ngeles Azules. Avisados quedan.
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