La cara se pone en buenas manos: por qu¨¦ los salones de belleza est¨¢n regresando al tacto

En los salones de belleza se vive una vuelta al origen, a la artesan¨ªa y a lo sensorial. La tendencia arranc¨® hace a?os, pero se aceler¨® tras la desconexi¨®n forzosa de la pandemia y hoy se erige como imparable. A ella ha contribuido el asentamiento de las facialistas, profesionales especializadas en el rostro cuyos referentes se remontan, como se?ala Mar¨ªa Casado, experta en el cuidado hol¨ªstico de la piel, a figuras como Elizabeth Arden. Como concepto, el t¨¦rmino est¨¢ m¨¢s arraigado en EE UU, Reino Unido o Francia. ¡°Empec¨¦ a ver facialistas en Par¨ªs alrededor del a?o 2003 en formaciones y congresos¡±, cuenta Esther Moreno, miembro del gremio. En aquel entonces, en Espa?a, las profesionales no se especializaban, sino que combinaban la manicura o los masajes corporales con faciales. ¡°El fen¨®meno tom¨® fuerza hace unos 10 a?os, con el auge de las redes sociales¡±, asegura Zoila Berm¨²dez, responsable de belleza en Selvarrosa.

Trabajar con las manos permite realizar una extracci¨®n de impurezas, como los puntos negros, muy minuciosa. ¡°Los problemas de la piel se acentuaron por el uso de activos sint¨¦ticos y petroqu¨ªmicos y por el abuso de aparatolog¨ªa que, cuando no se emplea correctamente, puede quemar, causar ros¨¢cea o dejar marcas¡±, explica Vanessa Delli, fundadora de DelliCare Bio. Lo que no significa que las facialistas devotas de los movimientos manuales no conf¨ªen en la tecnolog¨ªa: ¡°El 80% de nuestros tratamientos son manuales y el 20% suma la aparatolog¨ªa, buscamos un perfecto equilibrio consciente, combinando la energ¨ªa del ser y la tecnolog¨ªa de la ciencia¡±, explica Delli. Las manos, a?ade Esther Moreno, permiten responder a la piel en cada momento, otorgarle lo que reclama, ajustando la presi¨®n y la t¨¦cnica en tiempo real.

Una oda al tacto

Mariona Vilanova, fundadora del atelier hom¨®nimo en Barcelona, ha torneado sus dedos con innumerables saberes: kobido, shiatsu, drenaje linf¨¢tico manual, el vodder dan¨¦s o el masaje de tejido conectivo alem¨¢n. ¡°Nuestras manos son antenas, escuchan y transmiten. Tocar armoniza las emociones¡±, nos cuenta y alude al reciente estudio neurocient¨ªfico de Natura Biss¨¦ y la Universidad de Murcia y Starlab, que demuestra que el masaje facial aumenta el bienestar mental y la autoestima. ¡°Envejecemos de manera hol¨ªstica: no solo el tejido cut¨¢neo, tambi¨¦n cambia la fisionom¨ªa debido a tensiones acumuladas, al estancamiento del sistema linf¨¢tico y el sistema sangu¨ªneo, la acumulaci¨®n de toxinas y desechos celulares, al deterioro del tejido conectivo y al cambio y migraci¨®n de los dep¨®sitos de grasa¡±, explica. Vilanova reconoce que la aparatolog¨ªa puede ser un buen complemento, pero las manos permiten afinar. ¡°Con un buen entreno en t¨¦cnicas manuales, conocimiento de la anatom¨ªa y un diagn¨®stico con el tacto se pueden hacer maravillas en 50 minutos. Despu¨¦s de un facial, a algunas de mis clientas el m¨®vil no les reconoce el rostro, porque la expresi¨®n se les relaja¡±, explica. Rituales, como La Maga en cuatro fases durante 90 minutos, con procedimientos personalizados de alta cosm¨¦tica org¨¢nica, esculpen, mitigan tensiones, definen la mand¨ªbula, elevan el cuello, las mejillas y los p¨¢rpados, alisan e iluminan.

Las 3 R

Esther Moreno, cosmet¨®loga y facialista, curtida en la prestigiosa academia de Jean D¡¯Estr¨¦es, es c¨¦lebre por su m¨¦todo de las 3R: reconectar, reencontrar y redescubrir. ¡°Todas las pieles pueden ser bonitas. Cada uno de mis tratamientos es ¨²nico y a medida. Es fundamental la entrevista previa que realizo para entender las preocupaciones, el estilo de vida y en qu¨¦ punto est¨¢ la dermis¡±. Moreno promueve una relaci¨®n m¨¢s saludable y consciente a trav¨¦s de sus protocolos para los que selecciona activos de diferentes marcas y distintas t¨¦cnicas manuales. ¡°Cuando las manos entran en contacto con la piel se establece un di¨¢logo. El tacto de las facialistas se agudiza gracias a la pr¨¢ctica: sentimos c¨®mo cambia la textura o penetra un activo. Con las manos, siento la estructura y la respuesta, lo que me permite adaptar mi t¨¦cnica¡±. Como sus compa?eras de oficio no reniega de la tecnolog¨ªa. ¡°La aparatolog¨ªa bien usada alcanza profundidades a las que las manos no llegan, logra cambios estructurales y puede ser m¨¢s precisa¡±. Es una experta en diagn¨®stico: antes del ritual, eval¨²a hidrataci¨®n, elasticidad, presencia de impurezas, y sensibilidad. ¡°No somos sim¨¦tricos, por lo que no trabajo igual cada lado ni cada zona del rostro. La piel es un ¨®rgano en constante evoluci¨®n¡±.

Cuando las manos entran en contacto con la piel, se establece un di¨¢logo. El tacto de las facialistas se agudiza: sentimos c¨®mo cambia la textura o penetra un activo, y eso me permite adaptar mi t¨¦cnica.

Esther Moreno, cosmet¨®loga y facialista

El sonido de la piel

Desde sus inicios, ha confiado en el poder sanador y energizante de las manos. Vanessa Delli, fundadora de DelliCare Bio, formada en est¨¦tica integral, con dos m¨¢steres, uno en est¨¦tica facial y otro en tratamientos faciales para condiciones especiales (piel sensible, acn¨¦¡­) dise?a faciales hol¨ªsticos a la carta. En sus rituales sensoriales, combina t¨¦cnicas milenarias (shiatsu, kobido o guasha) con movimientos punteros de firmas como Omorovicza o Eve Lom. ¡°Aparte de lo hol¨ªstico, conf¨ªo en la vibraci¨®n con cuencos y en el sonido para armonizar: mi objetivo es ayudar al cliente a encontrar el equilibrio no solo en la piel, sino tambi¨¦n en el cuerpo, el esp¨ªritu y la mente¡±. La conversaci¨®n previa, la respiraci¨®n consciente y el ba?o de sonido con cuencos tibetanos en tratamientos como Jade Jewel Beauty (60 minutos, con rodillos, punteros de jade y cosm¨¦ticos de The Organic Pharmacy) alisan e iluminan, y tambi¨¦n ayudan a liberar endorfina, serotonina y oxitocina, seg¨²n su creadora.

M¨¢s de 50 movimientos manuales

Mar¨ªa Casado, la facialista que ha trabajado con personajes tan dispares como Javier Calvo y Javier Ambrossi o de Sigourney Weaver, combina medicina china, kobido y otras t¨¦cnicas como la kinesiolog¨ªa. ¡°Una m¨¢quina puede hacer muchas cosas, pero el contacto humano, tan escaso en estos ¨²ltimos a?os, es fundamental. La m¨¢quina no experimenta los cambios emocionales del cliente, yo s¨ª, por eso coordino el tratamiento tambi¨¦n a trav¨¦s de la respiraci¨®n¡±. Como Vanessa Delli, Casado conf¨ªa en el PNL, programaci¨®n neuroling¨¹¨ªstica que ense?a a cambiar h¨¢bitos para reforzar la autoestima en la cabina. ¡°Antes el cliente ped¨ªa una m¨¢quina sobre la que hab¨ªa le¨ªdo o escuchado. Ahora solicita un momento de relax y una piel luminosa. Tampoco quieren abusar del maquillaje. Nada como las manos para sustituirlo: oxigenan, tonifican, igualan y eliminan grasa¡±. En un solo ritual, como The Ultimate Glow, Lift and Sculpt (una hora y media), Casado puede llegar a combinar m¨¢s de 50 movimientos diferentes. ¡°Gestos que adapto seg¨²n las necesidades¡±, afirma.