Tener hijos entre amigos: ?una alternativa a la familia tradicional cuando no hay pareja?

En la serie Friends, Rachel, el personaje de la actriz Jennifer Aniston, decid¨ªa iniciar su maternidad con Ross, no como una pareja, sino como un par de amigos que cr¨ªan juntos a su hija. Al final la cosa acab¨® bien para ellos. No le fue tan bien en su papel en Mucho m¨¢s que amigos, pel¨ªcula en la que decid¨ªa criar a su hija con su amigo gay (Paul Rudd). Desde entonces, la idea de tener un hijo entre amigos ha dado para muchas m¨¢s tramas en la ficci¨®n, como fue el caso de Madonna en Algo casi perfecto, junto con Ruppert Everet o algo m¨¢s recientemente Friends with kids donde una pareja de amigos conclu¨ªa directamente que esta era la mejor forma de afrontar la paternidad. Una vez m¨¢s, las cosas acaban por ser m¨¢s complicadas de lo que planeaban inicialmente.

La idea de tener un hijo entre amigos y plantear la crianza desde un v¨ªnculo afectivo diferente, es una realidad m¨¢s all¨¢ de las pel¨ªculas. Tambi¨¦n hay ejemplos de personas conocidas, como el actor argentino Guillermo Pfening, quien decidi¨® ser padre con una amiga.

En una sociedad en la que el amor ya no es un valor al alza, no son pocas las personas que, sobre todo al llegar a cierta edad, se plantean si no es mejor compartir la custodia de un hijo con un amigo, que no con una pareja inestable, que puede acabar siendo tu enemigo.

As¨ª, al igual que Tinder es el lugar para tener sexo sin compromiso, existen apps, como CoperantaLys, cuyo objetivo es unir a personas que quieren tener un hijo, aunque no necesariamente ser una pareja. Esta app contempla m¨²ltiples posibilidades, como madres solteras que buscan solo un donante de esperma pero por la v¨ªa tradicional, hombres solteros que buscan una mujer para ser padres sin compromiso sentimental o parejas homosexuales que buscan con quien compartir la paternidad a falta de opciones biol¨®gicas.

Teniendo en cuenta que la familia tradicional es un esquema que se ha quedado peque?o, ?es una buena idea ser padres entre amigos? ?Qu¨¦ debemos tener en cuenta para tomar esta decisi¨®n?

La primera pregunta es por qu¨¦ hay personas plante¨¢ndose esta opci¨®n de familia. El psic¨®logo Pedro Adrados?ve dos factores clave. ¡°Sobre todo el factor edad (en el caso de las mujeres, por su reloj biol¨®gico) y la experiencia de relaciones sentimentales frustradas¡±. No es de extra?ar que, ante el aumento de separaciones y divorcios, haya quien se plantee si no es mejor evitar el conflicto emocional y apostar por una coparentalidad desde otro tipo de v¨ªnculo, a priori m¨¢s s¨®lido.

¡°El dolor no resuelto, los miedos, culpas y frustraciones encallados en las exparejas pueden jugar en contra de la coparentalidad derivada de la separaci¨®n. En este sentido, este modelo de coparentalidad entre amigos se inicia sin estas dificultades y por lo tanto m¨¢s ¡®limpio¡¯¡±, aporta el psic¨®logo.

Si estos son los pros, tambi¨¦n hay que valorar los contras respecto a una coparentalidad en pareja, aunque esta se acabe separando. ¡°La ¨²nica diferencia es el recorrido afectivo de los progenitores divorciados. En este caso puede favorecer el entendimiento, la negociaci¨®n y la consecuci¨®n de acuerdos. Esto podr¨ªa ser una ventaja, aunque todos sabemos que en muchos casos esto no es as¨ª¡±.

Queda entonces por recordar que, igual que se rompen las parejas, los amigos tampoco son hoy un valor seguro, y tambi¨¦n podr¨ªan surgir conflictos entre los mismos y romper esa amistad. A este respecto, la psic¨®loga Judith Viudes?reflexiona que ¡°es cierto que esa relaci¨®n ideal de amistad podr¨ªa romperse, pero de la misma manera que puede romperse una relaci¨®n de pareja. Y volvemos a lo mismo, el v¨ªnculo que se perpetua es el ser padres y ese es el importante¡±.

Compartir un modelo de crianza

Antes de lanzarse a una app a buscar al padre o madre de nuestro hijo, o de plante¨¢rselo a nuestro amigo de juergas de la juventud ?incluso los personajes de Ted Mosby y Barney Stinson llegan a plantearse una coparentalidad en una noche de borrachera en C¨®mo conoc¨ª a vuestra madre? es importante asegurarse no tanto del v¨ªnculo que nos une, sino del modelo de paternidad que queremos compartir desde entonces.

¡°El objetivo principal es ser padres y es necesario compartir esa decisi¨®n tan importante con una persona allegada con la cual existe, normalmente, una amistad duradera y estable. Un v¨ªnculo firme en el que se comparten ideales, valores, educaci¨®n, creencias, respeto y, sobre todo, la devoci¨®n y la libre elecci¨®n por ser padres¡±.

No se trata de una decisi¨®n que pueda ser revocada, ambos debemos aceptar la paternidad a partes iguales, pero teniendo claro que no se trata de dos personas educando a un hijo a su manera, sino compartiendo un mismo modelo de crianza.

¡°Como en cualquier otro modelo familiar, lo importante es constituir un buen equipo¡±, insiste Pedro Adrados. Es por ello que, seamos pareja, amigos o dos personas que quieren asumir juntas este reto, una de las claves es que los valores e ideales acerca de la familia, la crianza y la educaci¨®n sean parecidos. No se trata de que nos una solo el deseo de ser padres, sino que queramos ser el mismo tipo de padres juntos.

¡°Todos tenemos nuestras propias ideas y deseos vinculados a nuestra historia personal, a c¨®mo fuimos criados. Todo esto debe ser hablado. La comunicaci¨®n es fundamental para poner en com¨²n todos estos asuntos¡±. Y es que al igual que en una pareja, los conflictos pueden surgir despu¨¦s. No es lo mismo que ser amigos, que amigos con hijos.

Como recuerda Adrados, ¡°la coparentalidad no se define por la forma en la que cada progenitor proporciona los cuidados, protecci¨®n y educaci¨®n al menor, sino por la sincronizaci¨®n y armon¨ªa de los padres en dicho ejercicio. Es por tanto un proceso de comunicaci¨®n, cooperaci¨®n y coordinaci¨®n entre ellos¡±.? Sobre esta idea insiste una vez m¨¢s Judith Viudes, ¡°sea cual sea el v¨ªnculo que compartan dos personas, lo importante es que?sean plenamente conscientes de que?es una decisi¨®n muy importante, sin vuelta atr¨¢s, cargada de responsabilidades, comunicaci¨®n constante, valores compartidos y amor por la paternidad¡±.