?No me gusta el ¡®counturing¡¯, busco texturas ligeras que no tapen el rostro?

En su mano derecha guarda su mayor se?a de identidad. Lucia Pica (N¨¢poles, 1976) tiene una mancha roja de nacimiento que le cubre desde las falanges de los dedos hasta la mu?eca. De ah¨ª su obsesi¨®n por los colores c¨¢lidos, sobre todo por el rojo, al que dedic¨® su primera colecci¨®n en cuanto aterriz¨® en la maison. Tras tres a?os como dise?adora creativa global de maquillaje y color en Chanel, miss Pica, que es como la llama el mism¨ªsimo Karl Lagerfeld, est¨¢ revolucionando el mundo de la belleza y se ha convertido en un referente para la generaci¨®n mil¨¦nica, entre otras cosas, por sus revolucionarias texturas y su pasi¨®n por alcanzar una paleta que habla de sentimientos y sensaciones. Su nueva colecci¨®n crucero, ?clat et Transparence, que evoca un rostro besado por el sol, se inspira en un viaje a la isla siciliana de Pantelaria.

Coco Chanel dej¨® de herencia unos cuantos mantras de belleza entre sus c¨¦lebres citas. ?Cu¨¢l es su favorito?

?Ponte el pintalabios rojo y ataca?. Coco contribuy¨® al empoderamiento de la mujer. Se anticip¨® mucho a su tiempo. Las liber¨® del cors¨¦, las incit¨® a vestir en negro y a broncearse. Era imparable, ten¨ªa tanta energ¨ªa que no pod¨ªa pararse ni as¨ª misma.

El rojo es precisamente una de sus obsesiones¡­

Puedo pasarme d¨ªas y meses buscando un color, necesito que sea redondo. En la primera colecci¨®n hicimos hasta 28 pruebas de un mismo tono. No me gustan los matices fr¨ªos, estoy obsesionada con la calidez. Y sobre todo con el rojo, claro. Cada pigmento posee su personalidad, los colores hablan de muchas cosas¡­ no puedo explicarlo bien, pero trato de buscar su profundidad.

Vivimos en la era del contouring. ?C¨®mo lo lleva?

No me gusta que la gente cubra su rostro tras el maquillaje. Ahora existe tecnolog¨ªa para resaltar la belleza con texturas ligeras y empolvadas. Mi objetivo es conseguir que la piel sea cada vez m¨¢s trasl¨²cida.

?C¨®mo es trabajar codo con codo con Lagerfeld?

?Es tan listo! Cuando conoces por primera vez a Karl es como tener enfrente a un mito. Qu¨¦ se yo. Es como conocer a Michael Jackson¡­ Es muy cool, simp¨¢tico y dulce conmigo. Me sorprende ver lo informado que est¨¢ siempre, tiene una gran cultura. Pero lo mejor de ¨¦l es su capacidad para transformar la visi¨®n de las cosas desde su sentido del humor. Le admiro mucho.

?Y qu¨¦ ha aprendido de usted misma tras tres a?os al frente del maquillaje y color de Chanel?

Si crees en una idea, la gente reacciona ante la energ¨ªa que proyectas. Quiero que las personas amen los colores. Busco que se puedan utilizar. Si creas algo que no puedes experimentar f¨ªsicamente, es un fracaso.

Hoy en d¨ªa, el p¨²blico est¨¢ sobreinformado. ?Complacer al mil¨¦nico es el objetivo actual de las marcas?

Cuando ideo una colecci¨®n pienso en hacer algo potente, pero tambi¨¦n que la pueda llevar el mayor n¨²mero de mujeres posible. Nadie se queda fuera.

?Sigue siendo pol¨ªticamente correcto afirmar que el maquillaje empodera a la mujer?

Claro que s¨ª, pero no para cambiar el aspecto, sino para disfrutar de las sensaciones que aporta. Un rojo en las mejillas te hace sentir m¨¢s feliz y una m¨¢scara de pesta?as, m¨¢s despierta.

?Qu¨¦ opina de los hombres que se maquillan?

No me importa que lleven eyeliner si es a lo David Bowie [r¨ªe]. Me gusta cuando se usa para desarrollar la creatividad individual, como forma de expresi¨®n.

Trabaja para una de las casas de lujo m¨¢s importantes del mundo. ?Qu¨¦ es el lujo para usted?

El tiempo. Mi idea de felicidad es el verano en la costa italiana. Como en la colecci¨®n crucero ?clat et Transparence, me imagino la brisa de Pantelaria. O a Jane Birkin en la pel¨ªcula La Piscine.

?C¨®mo viven su ¨¦xito profesional en casa?

Con orgullo. Siempre digo que mi madre trabaja para Chanel en Italia porque se pasa el d¨ªa recopilando todas las revistas en las que aparece algo de la firma [r¨ªe]. Soy la peque?a de la familia y tengo tres hermanos varones¡­ Imag¨ªnate. Desde bien peque?a tuve que pelear y gritar mucho para que me escucharan.

Diana Vreeland dec¨ªa que llevaba toda la vida persiguiendo el rojo perfecto hasta que lo encontr¨® en la capa de un ni?o en un retrato renacentista. ?Ha dado usted con el suyo ya?

Hay que perder el miedo al rojo. Forma parte de nosotros, empezando por nuestros propios labios. No es natural llevar un color beis, por ejemplo; lo natural es el carm¨ªn. Mi favorito est¨¢ por llegar¡­ y est¨¢ en la colecci¨®n de la pr¨®xima Navidad, ?es maravilloso!