Buscando mi antiguo perfume desesperadamente: por qu¨¦ las fragancias se descatalogan
Hablamos con mujeres que han buscado por tierra, mar y aire aromas perdidos que formaban parte de su memoria olfativa y preguntamos a expertos por qu¨¦ se deja de fabricar una fragancia.
En la segunda temporada de la serie Hacks, la diva de la comedia Deborah Vance sufre un grave contratiempo mientras est¨¢ de gira: Black Pashmina, el perfume que utiliza desde hace 25 a?os, va a desaparecer del mercado. Uno de sus asistentes localiza un centro comercial a 300 kil¨®metros donde a¨²n lo tienen en stock y autom¨¢ticamente la ruta marcada se desv¨ªa para conseguir todos los frascos disponibles lo antes posible. Aunque la escena puede parecer una exageraci¨®n propia de la ficci¨®n, no lo es tanto: cuando las marcas descatalogan fragancias, muchas de sus fieles sienten que les han arrebatado una parte importante de su personalidad que es imposible recuperar.
El idilio de M? del Carmen Garc¨ªa (75 a?os) con MaGriffe, de la firma francesa Carven, comenz¨® en los a?os 60 del siglo pasado en una perfumer¨ªa de la Gran V¨ªa. Ella le fue fiel hasta que hace casi una d¨¦cada desapareci¨® del mercado de manera inesperada. Lo busca desde entonces, primero en peque?os comercios de barrio que a¨²n la ten¨ªan en stock y despu¨¦s en Internet, aunque no es f¨¢cil. Los ¨²ltimos tres botes que tiene aparecieron en una tienda online que se los envi¨® desde Francia y puede que sean los ¨²ltimos disponibles. Hay amores que son para siempre aunque la relaci¨®n ya no sea posible, como el de una persona con su perfume preferido descatalogado.
Su hija Sandra S¨¢nchez ( la ayuda con el rastreo. Ella naci¨® a mediados de los a?os 70, cuando su madre ya llevaba a?os utilizando ese perfume y lo asocia inevitablemente a ella. ¡°El frasco ven¨ªa en una caja alta preciosa, con un dise?o inconfundible, a rayas verdes y blancas oblicuas¡±, comenta Sandra. La dise?adora Marie-Louise Carven, que tambi¨¦n es la creadora de la fragancia, pens¨® en el packaging como homenaje a uno de sus vestidos, que se llama igual. Hace casi diez a?os, la marca lo descatalog¨®. ¡°Lanz¨® una nueva versi¨®n, con el mismo nombre, MaGriffe, pero ya no era lo mismo. El dise?o del frasco hab¨ªa cambiado y hab¨ªan suavizado la fragancia¡±, dice Sandra. Su madre lo prob¨®, pero ¡°se desilusion¨® porque no era lo mismo¡±. Hasta el momento no ha encontrado ning¨²n otro que le convenza.
Por su parte, Marta L¨®pez (32 a?os) sufri¨® su mal de amores ¡®perfumesco¡¯ a los 14 a?os cuando Generation Courreges, la fragancia juvenil de la casa, desapareci¨® del mercado. ¡°Me cabre¨® un mont¨®n porque tuve que buscar otro que me gustara y eso era dif¨ªcil: las fragancias juveniles suelen ser empalagos¨ªsimas y eso es algo que no soporto. Amor Amor de Cacharel es el ep¨ªtome¡±, afirma. Tard¨® tiempo en llegar a Quiz¨¢s de Loewe, el perfume que utiliza actualmente intercalado con Fleur de Mimosa Body Mist de &Other Stories. ¡°Es un poco vanidoso, pero me encanta que alguien a quien hace tiempo que no veo me diga eso de ¡®sigues oliendo igual¡¯ o ¡®huele a ti¡¯¡±.
Silvia Delgado (49 a?os) tuvo que buscar una alternativa a Les Belles de Nina Ricci despu¨¦s de agotar todas las posibilidades que ten¨ªa de encontrarlo ¡°incluso poni¨¦ndome en contacto con la marca¡±, comenta. Lo que m¨¢s le gustaba de la fragancia era ¡°la planta de tomate que llevaba incluida entre sus componentes. Fue un regalo y acertaron de pleno¡±. Despu¨¦s se pas¨® a Fraicheur Vegetale Bambou de Yves Rocher, que ahora tampoco est¨¢ disponible y a d¨ªa de hoy est¨¢ encantada con Agua Mar De Coral de Loewe.
Marina P¨¦rez (31 a?os) lleg¨® m¨¢s lejos e incluso acudi¨® a un servicio de r¨¦plica de perfumes para conseguir oler de nuevo a Sparks Will Fly de H&M pero ¡°costaba una pasta. Ya no soy la misma, mucha gente la asociaba conmigo y fue una pena¡±, afirma. Cada perfume que se descataloga tiene, al menos, una fiel que llora por su p¨¦rdida y clama por su vuelta.
Por qu¨¦ desaparece un perfume
A?oramos los perfumes descatalogados, dice Daniel Figuero en la primera p¨¢gina de su libro Contraperfume?(editorial Superflua, 2021). El escritor es tambi¨¦n Fragance Embassador de la casa Dior, as¨ª que sabe bastante del tema y explica que ¡°vamos construyendo nuestra memoria olfativa durante toda la vida, resultando en un v¨ªnculo tan profundo que su ausencia puede disparar cierto s¨ªndrome de abstinencia: encontramos a los clientes rogando por una ¨²ltima dosis, ofreci¨¦ndose a comprar bajo cuerda los restos de un probador o buceando en los outlets digitales m¨¢s infectos con tal de evitar la condena al olvido¡±. De esta manera, el perfume ¡°sobrepasa la categor¨ªa de producto y se convierte en algo m¨¢s¡±.
Elizabeth Arden sac¨® al mercado su fragancia Eau Fraiche en 1986 y en aquel momento se convirti¨® en un perfume muy relevante porque era diferente al resto, con sus toques c¨ªtricos y florales. Su gran n¨²mero de devotas fue descendiendo hasta el a?o pasado, cuando dej¨® de formar parte del cat¨¢logo de la marca por un motivo puramente econ¨®mico. ¡°En los ¨²ltimos a?os sus ventas eran muy diferentes por regiones del mundo y en Espa?a segu¨ªa habiendo un peque?o n¨²mero de gente que segu¨ªa siendo muy fiel y por eso lo segu¨ªamos ofreciendo. Pero lleg¨® un momento en el que debido a las previsiones de ventas eran tan bajas que la compa?¨ªa decidi¨® terminar su producci¨®n¡±, explica el director de marketing de Elizabeth Arden, Miguel Gallastegui.
Esa es una de las razones habituales que pueden motivar la desaparici¨®n de una fragancia, pero puede haber otras. Figuero comenta que ?en una industria que debe cumplir con recomendaciones muy estrictas por parte de la IFRA (la Asociaci¨®n Internacional de Fragancias), el listado de ingredientes que puede contener un perfume cada vez es m¨¢s corto. Casi todas las materias primas de origen animal se prohibieron hace tiempo, as¨ª como muchos ingredientes o mol¨¦culas potencialmente da?inas en altas concentraciones¡±. La marca tiene la opci¨®n de reformularlo sin la nota vetada, lo que supone un reto para los perfumistas ya que ¡°deben sustituir la materia prohibida con otras sustancias que igualen no solo el aroma, si no la fijaci¨®n y el peso en la composici¨®n¡±.
Asimismo, observa que ¡°a pesar de que cada a?o se lanzan m¨¢s de 2500 nuevas referencias en el mundo, -una velocidad y una obsesi¨®n por la novedad que no exist¨ªan ni siquiera hace 20 a?os- el espacio en las perfumer¨ªas no es infinito¡±. En ese sentido, Gallastegui aclara que cuando desaparece un perfume, en este caso Elizabeth Arden, no se busca un sustituto cuando se lanza uno nuevo sino que ¡°se lanza pensando en ofrecer una propuesta novedosa. Pero s¨ª que es verdad que a medida que se van descontinuando intentamos no perder a la consumidora de la marca y ofrecemos alternativas¡±.
Algunos de los perfumes descatalogados pueden volver a aparecer en el mercado bajo colecciones o proyectos especiales, aunque nunca como fueron concebidos originalmente. ¡°Las f¨®rmulas actuales nos han acostumbrado a una menor concentraci¨®n de ingredientes naturales y las concentraciones que se utilizaban anteriormente son dif¨ªciles de entender bajo criterios modernos, que convierten con facilidad ese intento de rescate en una composici¨®n ¡®antigua¡¯ y dif¨ªcil de vender¡±, sostiene Figuero.
Despedirse de un olor que forma parte de la identidad personal no es f¨¢cil, como se ha visto en los testimonios recabados. De hecho, gran parte de las preguntas que las clientas de Elizabeth Arden hacen a la marca en las redes sociales son sobre productos descatalogados, especialmente perfumes y labiales. ¡°A veces si somos capaces de decirles d¨®nde encontrarlo les ayudamos y si no intentamos ayudarles con la alternativa m¨¢s parecida¡±, sostiene Gallastegui. Seg¨²n sus vendedoras, parece que las clientas de Eau Fraiche se est¨¢n pasando a White Tea, el ¨²ltimo lanzamiento de la firma.
Figuero recomienda a los ¡®hu¨¦rfanos de perfume¡¯ que abracen el cambio y superen la ruptura sin m¨¢s miramientos. ¡°Podemos buscar fragancias de la misma familia olfativa, sin necesidad de hacer hincapi¨¦ en el aspecto novedoso sino en la b¨²squeda de sensaciones que generen buenos recuerdos y sugiriendo que aquella persona que vest¨ªa esa fragancia descatalogada ya no es la misma. No nos ba?amos en el mismo r¨ªo dos veces ni nos perfumamos con la misma fragancia¡±. ?l recuerda con cari?o Eau d¡¯Elide de Dyptique, porque fue un regalo de alguien muy querido ¡°y adem¨¢s la inspiraci¨®n de un fauno ech¨¢ndose la siesta me conquist¨®¡±. Tambi¨¦n guarda como oro en pa?o un ¨²ltimo frasco de Midnight Poison de Dior, aunque ha decidido que ¡°ya es hora de usarlo. Nunca sabemos qu¨¦ ocurrir¨¢ en el futuro¡±. Nuevos aromas para seguir tejiendo una memoria olfativa propia que nunca se podr¨¢ descatalogar.
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