Pros y contras de ser ¡®freelance¡¯: el modo de trabajo que mira al futuro

Ser freelance. Trabajar por cuenta propia, sin jefes y desde cualquier lugar del mundo con conexi¨®n a internet, ya sea tu pueblo o un lugar ex¨®tico y remoto. Ser freelance, tambi¨¦n: trabajar dependiendo del encargo, lidiando con la incertidumbre de cu¨¢ndo ser¨¢ el siguiente trabajo, sin vacaciones y, en Espa?a, pagando una cuota mensual inamovible con independencia de lo que se ingrese. Una forma de trabajo que es tendencia, dicen estudios como este de LinkedIn que asegura que el 43% de los trabajadores de Estados Unidos en 2020 ser¨¢n freelancers?y que el modelo se extiende en m¨¢s pa¨ªses desarrollados. Forma que en algunos casos se presenta como una opci¨®n sugerente en busca de una mejor conciliaci¨®n con la vida personal y, en otros, como la ¨²nica opci¨®n para conseguir un trabajo -¡°el 42% de los espa?oles [que busca empleo] busca un trabajo flexible porque no encuentra uno permanente¡±, dice un informe publicado por Adecco y LinkedIn sobre la gig economy-. Analizamos con expertos sus ventajas y desventajas.

1. Libertad. No tener jefes que delimiten y controlen tanto el horario como la actividad y poder realizar el trabajo desde cualquier lugar y en las condiciones que se elijan. ¡°Quienes trabajan como freelance destacan la libertad de esta modalidad. Pueden manejar sus horarios y definir cu¨¢ndo entregar un trabajo. Esto les permite hacer otras actividades y organizarse mejor¡±, cuenta Gabriel Schwartz, psic¨®logo y director de Psicolog¨ªa Laboral, a S Moda. As¨ª lo cree el periodista que est¨¢ tras la cuenta de humor @Yo_freelance en Twitter, que prefiere mantener el anonimato. Lleva casi una d¨¦cada trabajando como freelance en el extranjero, colaborando para hasta una decena de medios (peri¨®dicos, medios digitales, revistas, radio¡­) y, seg¨²n explica v¨ªa e-mail, ¡°la principal ventaja es la libertad que siento respecto a m¨ª y mi trabajo. Decidir qu¨¦ quiero hacer, c¨®mo lo quiero hacer. S¨¦ que hay restricciones (sobre todo de tiempo y de presupuesto) pero siento que tengo mucha libertad sobre el trabajo que hago y eso me hace implicarme much¨ªsimo en cada cosa¡±.

2. Gesti¨®n del tiempo. ¡°Al menos un 60% de las funciones que realizamos podemos hacerlas en la modalidad de teletrabajo¡±, cuenta Rebeca Mart¨ªnez S¨¢nchez, doctora en Ciencias de la Administraci¨®n por la Universidad Aut¨®noma de M¨¦xico y autora del paper El teletrabajo como tendencia del mercado laboral, a S Moda. Esa posibilidad de trabajar desde casa o desde cualquier otro lugar abre la posibilidad en el caso del freelance a una mejor gesti¨®n del tiempo, ahorrando la cantidad de horas y dinero destinados al transporte a diario, y el desgaste psicol¨®gico que este conlleva. Y a una mejora de la productividad, siempre y cuando se tengan las herramientas: ¡°Va a depender de las caracter¨ªsticas psicol¨®gicas de la persona que sea beneficioso o no. No ser¨ªa una modalidad recomendable para personas a las que les cuesta mucho autogestionarse o que son muy dispersos¡±, apunta Andr¨¦s Mart¨ªn Quinteros, del Centro Psicol¨®gico Cepsim.

3. Adi¨®s a los problemas (y beneficios) de la estructura de empresa. Permite librarse de ese jefe t¨®xico, del compa?ero fisg¨®n y envidioso o ¡°no sufrir mobbing (acoso laboral) y otras situaciones problem¨¢ticas que se dan dentro de estas estructuras m¨¢s enfermas¡±, apunta Andr¨¦s Mart¨ªn. Pero tambi¨¦n ¡°nos priva del sentimiento de pertenencia, que no se da al teletrabajar y que siempre es importante. Muchas veces un buen trabajo grupal puede fomentar la creatividad¡±.

4. Condiciones de trabajo m¨¢s precarias. Estar desligados de esa estructura conlleva tambi¨¦n la falta de mejoras y beneficios sociales derivados de las negociaciones colectivas. Si estas, como explica la soci¨®loga Lidia Arroyo,?investigadora de g¨¦nero y TIC del IN3 (UOC) y profesora de la UAB, est¨¢n desapareciendo dentro de la propia estructura de la empresa a favor de unas negociaciones cada vez m¨¢s individuales, el trabajo como aut¨®nomo est¨¢ completamente desprovisto de ellas.?¡°La externalixaci¨®n de los puestos de trabajo ha hecho que empresas o instituciones que ten¨ªan personas contratadas las contraten ahora como aut¨®nomos que ofrecen servicios, de forma que ya no formen parte de la plantilla, lo que se puede entender como una expulsi¨®n de la estructura de trabajo. Eso hace que se pierdan derechos: permisos por vacaciones o enfermedad, y que estas mismas personas tengan que gestionar eso solas, lo que genera mucha m¨¢s competencia entre los que antes eran compa?eros de trabajo¡±.

?Trabajar a distancia deber¨ªa ser un paso adelante en la evoluci¨®n laboral que beneficiara a ambas partes, nunca un pretexto para abaratar el trabajo y precarizarlo?,? apunta Rebeca Mart¨ªnez.??Es el trabajador quien asume todos los costos derivados del trabajo:?tener un equipo y su mantenimiento, internet, la limpieza del lugar de trabajo, la renta de este?. Y tambi¨¦n las responsabilidades: ?Se deja en manos del trabajador lo que gana y las horas que trabaja, lo cual ser¨ªa precioso en una situaci¨®n id¨ªlica, pero no en la vida real, donde en realidad se juega con la situaci¨®n de desventaja del trabajador que acaba aceptando muchos encargos a bajo precio para poder acabar el mes con un ingreso digno, a costa de haber echado m¨¢s horas que las que tiene el d¨ªa?, cuenta desde la experiencia @Yo_Freelance. ?El trabajo no se valora econ¨®micamente como deber¨ªa?.

?Escribo, colaboro, freelanceo. Se multiplican los verbos para explicar la ruina?, resum¨ªa la periodista Gabriela Wiener en su art¨ªculo Freelance: una autobiograf¨ªa, publicado en ElDiario.es, donde se?alaba adem¨¢s un informe de CNT en 2018 que radiograf¨ªa la precariedad del trabajo de este gremio en el panorama nacional y apunta:??¡°Esta precariedad afecta especialmente a las mujeres periodistas racializadas, migrantes, trans y/o con diversidad funcional¡±.

5. Conciliar mejor la vida privada, ?una trampa para la igualdad laboral de las mujeres? Sobre el papel, este modelo permite mejorar la conciliaci¨®n con cualquier aspecto del ¨¢mbito privado que se quiera realizar, desde actividades o activismo, a los cuidados de terceros o el trabajo dom¨¦stico. El problema se da cuando, por estar estos dos ¨²ltimos relacionados tradicionalmente con roles de g¨¦nero femenino, la conciliaci¨®n o flexibilizaci¨®n del trabajo perjudica, de nuevo, a las mujeres.

¡°La rigidez de horarios en empresas antes hac¨ªa que las mujeres dejaran el puesto por no poder gestionarlos. Ahora, con modelos m¨¢s flexibles, como el teletrabajo o el trabajo por encargos, se consigue un aumento de la autonom¨ªa e incluso de la creatividad: se pueden llevar a cabo proyectos propios e innovadores que dentro de una estructura m¨¢s tradicional y patriarcal¡±, expone la soci¨®loga Lidia Arroyo. Algo que empodera pero que no crea m¨¢s oportunidad de empleo o condiciones igualitarias para ellas: ¡°Hacen que dependan m¨¢s de la capitalizaci¨®n. La sociedad est¨¢ pensada en torno a las tareas de cuidado que realizar¨¢ esa mujer, lo que provoca que los hombres vayan al trabajo con disponibilidad plena y que las mujeres entren y salgan del mercado en funci¨®n de la demanda, lo que las hace candidatas perfectas para la gig economy y el trabajo freelance. Las dificultades del mercado regularizado vuelven a aparecer pero con condiciones mucho m¨¢s precarias¡±.

6. Soledad, estr¨¦s y otros asuntos de salud mental. ?La vida freelance es un combate contra las propias perezas y la propia soledad?, titula Yorokobu una entrevista con Sergio C. Fanjul, escritor y columnista en El Pa¨ªs.?¡°Cierto aislamiento y la p¨¦rdida de contacto e interacci¨®n que se generan cuando el trabajo es presencial¡±, entre las principales desventajas a nivel psicol¨®gico de este modelo, seg¨²n Gabriel Schwartz. ¡°La ventaja de no tener que ir a la oficina choca con sentirse un poco solo. Hay quienes piensan tambi¨¦n que la falta de interacci¨®n tampoco permite crecer o acceder a puestos de mayor responsabilidad (y mejores pagos)¡±. Y surgen tambi¨¦n otros problemas de salud mental como el estr¨¦s, la ansiedad o la depresi¨®n, a menudo derivados de esa incertidumbre sobre el trabajo a medio o largo plazo o de las peores condiciones de trabajo. Seg¨²n un estudio de Health and Safety Executive en Reino Unido sobre trabajadores aut¨®nomos, ¡°el estr¨¦s supuso el 37% de todos los casos de enfermedades relacionadas con el trabajo y el 45% de los d¨ªas laborales perdidos por enfermedad¡±, recog¨ªan en The Guardian.

7. El tiempo es dinero o la dificultad para desconectar.??La imposibilidad de?parar de trabajar y la consecuente p¨¦rdida de la capacidad de disfrutar?, explica de nuevo?Schwartz. Una idea que tiene su germen en la contabilizaci¨®n monetaria del tiempo que se deriva de este modelo de trabajo: ?cu¨¢nto tiempo me va a llevar hacer este trabajo y cu¨¢nto me van a pagar por ello? En su art¨ªculo La trampa psicol¨®gica de ser freelance, publicado en The Cut, la comunicadora Charlotte Cowles, lo cuenta as¨ª en primera persona: ?Me volv¨ª hiperconsciente de cu¨¢nto dinero pod¨ªa (o deber¨ªa) cobrar por mi tiempo, y esto me hizo infeliz y me hac¨ªa sentir mal cuando mis horas no laborables no alcanzaban el mismo valor. Era similar a la rabia de ver el tax¨ªmetro correr mientras est¨¢s en un atasco, ese goteo de minutos y d¨®lares que pasa ante tus ojos?.?

8. ?El freelance puede ser m¨¢s feliz? Compartir el espacio de trabajo en coworking para combatir la soledad y aislamiento, elegir bien esas actividades o momentos del d¨ªa que se dedicar¨¢n a lo personal y que trabajando en empresa no podr¨ªas llevar a cabo (una clase de yoga aprovechando el descanso de mediod¨ªa, por ejemplo), una buena planificaci¨®n y, lo m¨¢s importante, que la oferta de trabajos por parte de las empresas est¨¦ bien remunerada, son algunas de las opciones para saborear las verdaderas ventajas de esta forma de trabajo. Circunstancias que, seg¨²n recoge Peter Warr, psic¨®logo de la Universidad de Sheffield, en su estudio sobre causas de felicidad e infelicidad en el trabajo, puede acercar al trabajador independiente a la primera.