Brain and beast: ?Un cliente espa?ol con un salario normal no se podr¨ªa comprar mi ropa ni la de nadie?

Siempre han sido una especie de verso suelto dentro del resto de firmas que presentan sus propuestas en la pasarela madrile?a. Brain and Beast no dise?a vestidos de fiesta ni trajes sobrios para eventos especiales, sino prendas mucho m¨¢s casuales que, vali¨¦ndose del patchwork, la deconstrucci¨®n, la iron¨ªa o el hackeo de iconos de la cultura pop, siempre aluden a una problem¨¢tica social m¨¢s o menos literal. ?La gente dice que somos transgresores. Pero yo nos veo normal¨ªsimos?, dice el dise?ador ?ngel Vilda, alma m¨¢ter del proyecto.

Esta colecci¨®n, ¡® Oasis¡¯, va de la epidemia narcisista en la que vivimos sumergidos¡­?Por qu¨¦ escogiste este punto de partida?

Lo peor no es que estemos haciendo apolog¨ªa del ¡®yo¨ªsmo¡¯, lo peor es que est¨¢ bien visto. Estamos entendiendo los empoderamientos de una forma narcisista. En ciertos sectores est¨¢ bien visto ser un eg¨®latra y que tus necesidades primen por encima de todo. La colecci¨®n va de c¨®mo ense?amos nuestras vidas perfectas en redes, que parece que todos somos ricos y triunfadores cuando la verdad no es esa.

Estoy muy harto de ese tema, y de ver que todo el mundo tiene unas colecciones maravillosas con unos presupuestos maravillosos, de 50 looks con 50 modelos, pero a la vez s¨¦ cu¨¢l es la realidad porque llevo muchos a?os en esto¡­As¨ª que lo que queremos es ense?ar cosas bonitas, pero tambi¨¦n ense?ar la mierda.

?Pero esa idea de individualidad y perfecci¨®n extremas no es la que mueve la moda hoy?

Absolutamente. Y no solo la moda. Es que hay gente nativa digital que no solo sube fotos con filtro y se acaba poniendo b¨®tox a los 16 a?os. Estamos obsesionados con cosas absurdas cuando todo es mucho m¨¢s sencillo. Es verdad que el esp¨ªritu de Brain and Beast es un poco hacer el papel de mosca cojonera, pero me hace gracia cuando dicen que somos transgresores. Perdona, los transgresores sois vosotros, nosotros somos muy normales.

?C¨®mo has traducido ese mensaje tan complejo en la colecci¨®n?

He intentado que el proceso creativo sea hipertextual, es decir, he trabajado como se funciona en Internet, sin narrativa lineal, con elementos interconectados. En el desfile conviven personajes que nos van a recordar a cosas muy malas¡­.digamos que hay dos partes: una, la mala, tiene muy presente la geometr¨ªa y est¨¢ hecha exclusivamente de blanco, negro y gris. Los modelos no van maquillados, es como lo opuesto a Brain and Beast. Por ejemplo: el desfile se abrir¨¢ con una mujer que tiene la cara atravesada por un espejo, como la madrastra de Blancanieves.

En medio mostraremos 15 looks coloristas, la m¨²sica cambiar¨¢ para inspirar inocencia y tranquilidad. Por eso la colecci¨®n se llama ¡®Oasis¡¯, porque quiero mostrar ese par¨¦ntesis donde hay vida pero no se puede permanecer para siempre. Resumiendo: me encanta rayaros.

Estar¨¢s harto de escuchar a gente decir que no entiende Brain and Beast¡­

?Sabes lo que pasa? Que me da igual que no se entienda nada. Uno de mis ¨ªdolos es David Lynch precisamente por eso, porque me fascina aunque no lo entienda. No hay que buscarle una explicaci¨®n a todo, y mucho menos a esto. Esto es ropa, si quieres te la compras y si no, pues no.

Y t¨², precisamente, eres de los pocos que puede decir que vive de vender lo que dise?a.

S¨ª, y el proceso de vender ha sido largu¨ªsimo y dur¨ªsimo porque hemos tenido que hacer una apuesta absolutamente extranjera. En Espa?a es imposible vender. Seamos realistas: yo porque me pongo la ropa que dise?o, pero un cliente espa?ol normal con un salario normal no se podr¨ªa comprar mi ropa ni la de nadie. Que esa es otra: te salta en Instagram la publicidad de una tienda de lujo que vende camisetas a seiscientos euros y parece una cosa natural: no lo es.

Tambi¨¦n es una cuesti¨®n de apuesta. Cuando en Espa?a se gasta ese dinero se hace en una marca conocida. ?Crees que no hay apuesta por la moda en ese sentido, como s¨ª lo hay en otros pa¨ªses?

Es as¨ª. Nuestros representantes no son espa?oles, est¨¢n en Shanghai y en Hong Kong. Uno de nuestro principales clientes es I. T. Hong Kong, una multinacional que tiene veintitantas tiendas, entre ellas Dover Street Market. No te puedes imaginar d¨®nde colocan nuestra ropa. Aqu¨ª en mi vida va a estar una camiseta de Brain and Beast colgada al lado de una de Balenciaga, aqu¨ª soy un mierda. Pero en Asia la moda es otra cosa. All¨ª somos ¡®moda espa?ola¡¯, no s¨¦ si me explico¡­

?Es imposible abrirse camino aqu¨ª?

Hace poco estuvimos en una comida con el due?o de una tienda multimarca espa?ola y nos dec¨ªa que solo compraba marcas si sabe que se est¨¢n vendiendo mucho a nivel internacional. Yo le dije: entonces nunca voy a vender en tu tienda porque me est¨¢s pidiendo que sea como M¨®nica Naranjo, que me hinche a vender fuera y que cuando sea famoso, vuelva.

Vender ropa no es vender chorizo. Prefiero pensar que existen otro tipo de componentes, porque t¨² puedes estudiar la historia y la sociolog¨ªa de un pa¨ªs por c¨®mo se viste. Esto no es como vender jam¨®n york, pero en esta industria son muy narcisistas y lo que priman son otras cosas.

Como, por ejemplo, la aspiraci¨®n. Ahora parece que si no cuentas con una cartera de celebridades no eres nadie. Pero en Brain and Beast sac¨¢is siempre a gente normal y hac¨¦is ropa que, m¨¢s all¨¢ del desfile, se puede poner cualquiera.

Y cuando saco a una famosa no abre el desfile. Si est¨¢ all¨ª es porque es mi amiga, como otra persona an¨®nima.

Detestas la idea de la moda de autor como algo inalcanzable. ?Crees que esas t¨¢cticas, pagar a influencers, mostrar entornos de ensue?o¡­sirven para vender realmente o no hay nada m¨¢s detr¨¢s?

Yo creo que en muchos casos no funciona. De hecho, hay una cosa que me alucina: t¨² haces una presentaci¨®n y una fiesta y, en ocasiones, siempre va la misma gente. Los amigos, no los consumidores reales. Hablando de esto, ayer me pas¨® una cosa s¨²per curiosa: me fascina Alex Saint, pero no la he querido invitar a desfilar porque, al ser tan famosa, me daba verg¨¹enza. Y ayer coincidimos en el desfile de Eduardo Navarrete y me dijo que quer¨ªa venir al m¨ªo. Me sorprende que todav¨ªa quede gente famosa que sea normal y haga estas cosas sin que haya nada de por medio¡­

?Por qu¨¦, despu¨¦s de tantos a?os desfilando en Barcelona, decidisteis venir a hacerlo en Madrid hace tres temporadas?

Porque, sinceramente, ya me cansa hacerme la moderna y la dise?adora de culto. No quiero ser el nombre que dice la moderna de turno porque el resto no lo conoce. Ir a Madrid nos ha supuesto una cobertura medi¨¢tica infinitamente superior. Lo decidimos cuando entr¨® Charo Izquierdo a dirigir la pasarela; ella dio un giro impresionante? y ya no nos sent¨ªamos tan extraterrestres. Llev¨¢bamos 19 temporadas presentando en Barcelona y hab¨ªa que dar otro paso. Como dec¨ªa, nuestros representantes son asi¨¢ticos, pero hacemos el desfile en Espa?a es por log¨ªstica, nos sale m¨¢s barato y el material me lo facilita Ifema. Es curioso, pens¨¦ que tardar¨ªamos en integrarnos pero el equipo es maravilloso y nos recibi¨® estupendamente y eso no tiene precio. El Comit¨¦ de Moda de la pasarela tiene muchas ganas de innovar, adem¨¢s.

Vendiendo en Asia, ?el desfile sigue siendo importante?

El negocio de moda en Espa?a no est¨¢ en vender ropa;? nuestra estrategia no va de vender m¨¢s camisetas sino de tener una presencia que nos permita tener otros trabajos, como las colaboraciones con marcas comerciales. En estos diez a?os hemos ido de puristas, pero eso ya lo hemos perdido. Si hace un tiempo me hubieran propuesto colaborar con una marca comercial habr¨ªa dicho que no, pero ahora, sinceramente, si puedo llevar mi idea del dise?o a una colaboraci¨®n con? alguien masivo lo voy a hacer.

?Dir¨ªas que Brain and Beast vive un buena etapa?

Estoy muy contento; estamos currando much¨ªsimo porque ahora hemos servido los pedidos de verano, antes del fin de a?o chino, y se nos ha juntado con el desfile de ahora. El d¨ªa uno nos vamos a Shanghai a una feria de pre-fall porque el representante nos ha pedido una colecci¨®n pre-fall, que esa es otra¡­.Y luego hay un mont¨®n de firmas espa?olas que alardean mucho pero esto no lo hacen. Tienen todo el tiempo del mundo para presentar una colecci¨®n largu¨ªsima, claro.

?Te ves creciendo hasta el punto de buscar inversor o prefieres mantener tu independencia?

Quiero crecer pero nunca voy a tener un socio. Brain and Beast es mi ni?o y con mi ni?o hago lo que me da la gana. Cumplimos ahora diez a?os y es cuando la cosa empieza a dar beneficio real como para reinvertir de verdad. Ahora es cuando de repente me encuentro a gente con mi ropa puesta, imag¨ªnate el subid¨®n. Bueno, el otro d¨ªa me top¨¦ con una falsificaci¨®n de uno nuestros jerseys en Aliexpress. Eso es se?al de que vamos por el buen camino.