¡®Chicas malas¡¯: Cuando el rosa era el ¨²nico color de la temporada
Diez a?os despu¨¦s de su estreno, el largometraje que lanz¨® a la fama a Lindsay Lohan se ha convertido en un fen¨®meno de culto del cine ¡®teen¡¯.
La trama es tan sonrojante y elemental que uno nunca sabe si Chicas malas iba en serio o fue la en¨¦sima genialidad de su guionista, Tina Fey. Diez a?os despu¨¦s de su estreno, la pel¨ªcula pasa sin problemas la criba del paso del tiempo: los mismos clich¨¦s, los mismos lugares comunes y la id¨¦ntica crueldad adolescente que en cuesti¨®n de segundos deviene en exaltaci¨®n de la amistad. Sucedi¨® en 2004, y la vigencia de la cinta que lanz¨® a la fama a Lindsay Lohan sigue intacta. Un tema universal (la aceptaci¨®n social) sirve para articular un relato trufado de di¨¢logos hilarantes y frases que han quedado para la posteridad, as¨ª como para constatar lo est¨²pidos que podemos llegar a ser cuando m¨¢s listos nos creemos.
"Los mi¨¦rcoles vestimos de rosa", la coletilla que declamaban las protagonistas del filme, resume el esp¨ªritu de una comedia hist¨¦rica que no por f¨¢cil se debe despreciar. Todo empieza cuando Cady (Lindsay Lohan), de 15 a?os, entra por primera vez en el instituto. Criada en ?frica por su padres zo¨®logos, la vuelta a los Estados Unidos pone a prueba su capacidad de superviviencia. En su intento por adaptarse a las subculturas del lugar, la protagonista topa con la peor cala?a de su generaci¨®n: Regina (Rachel McAdams), Gretchen (Lacey Chabert) y Karen (Amanda Seyfried). Envidias, desprecios y el amor en su expresi¨®n m¨¢s na¨ªf son los ingredientes que completan este tratado sobre la intensidad teen.
Chicas malas es indisociable de la figura de Lindsay Lohan, cuya trayectoria tras el estreno fue, como poco, err¨¢tica. Las decenas de pel¨ªculas posteriores no consiguieron distraer la atenci¨®n de lo esencial: la espiral de autosabotaje de un personaje que en la ficci¨®n simbolizaba el triunfo de las buenas personas y la vida ordenada. A trav¨¦s del ejemplo vital de Lohan, la moraleja del filme adquiere m¨¢s valor si cabe. La cinta la catapult¨® a la fama con solo dieciocho a?os, y con el ¨¦xito se gest¨® tambi¨¦n su ocaso. Dej¨® su Nueva York natal, y tras el rodaje decidi¨® instalarse en Los ?ngeles. Los esc¨¢ndalos y las noches en el Chateau Marmont desencadenaron lo que ya todos conocemos.
Pero antes del crep¨²sculo, hubo un tiempo en el que parec¨ªa que Lohan era una estrella en ciernes. Despu¨¦s de Chicas malas llegaron otros proyectos de similar factura: Devu¨¦lveme mi suerte y Herbie. Algo diferente debi¨® ver en la actriz el director Robert Altman cuando en 2006 le ofreci¨® un papel en El ¨²timo show, cinta que fue presentada en la Berlinale y en la que Lohan compart¨ªa cartel con Meryl Streep (madre e hija en la ficci¨®n). Ese mismo a?o Emilio Est¨¦vez la recult¨® para Bobby, otra pel¨ªcula en las ant¨ªpodas del universo adolescente, ambientada en la muerte del senador Robert Kennedy. Hollywood empezaba as¨ª a rendirse ante los encantos de una joven promesa cuya capacidad para mudar de piel estaba siendo reconocida por los directores.
La estela que siguieron las otras chicas malas poco tiene que ver con el de Lohan. Infinitamente m¨¢s tranquila, sin duda. Rachel McAdams, que interpretaba al personaje de Regina, se ha convertido en la antagonista de Jennifer Aniston. Si esta ¨²ltima es la reina de las comedias, McAdams lo es de los dramones rom¨¢nticos. La carrera de la canadiense ha seguido un curso ascendente pero discreto. El diario de Noa es la pel¨ªcula m¨¢s exitosa en la que ha participado (sali¨® durante a?os con el coprotagonista del filme Ryan Gosling). En su filmograf¨ªa podemos encontrar otros t¨ªtulos como De boda en boda, La joya de la familia, Medianoche en Paris o Sherlock Holmes, dirigida por Guy Ritchie.
Amanda Seyfried, que daba vida a la pasmada de Karen, ha sido la m¨¢s lista del sagaz cuarteto. Cuatro a?os despu¨¦s de Chicas malas, y tras haber digerido sin prisa el ¨¦xito, resurgi¨® de la nada con grandes papeles. Mamma mia!, Querido John, Alpha Dog o Los miserables son solo algunos de los trabajos que le han llevado a ganarse cierto respeto de cr¨ªtica y p¨²blico. Su pr¨®ximo papel ser¨¢ en la segunda parte de Ted, en 2015, pero antes estrenar¨¢ la comedia A million ways to die in the west, junto con Charlize Theron y Liam Neeson. Lizzy Caplan (Janis), que en la pel¨ªcula interpretaba a la enemiga ¨ªntima de Regina, en la actualidad protagoniza la serie Masters of sex. Por su parte, Lacey Chabert (Gretchen), la cotilla del grupo, no ha querido o no ha sabido sacar provecho del ¨¦xito de su debut. Se refugi¨® en la peque?a pantalla, prestando su voz a los personajes animados de Los Thornberrys o Padre de familia.
Mientras algunas parecen estar a por uvas, otras contin¨²an labrando su presente en pantalla. El inclasificable guion que perpetr¨® Tina Fey, basado en la novela Queen bees and wannabes de Rosalind Wiseman, sigue dando de s¨ª. Los personajes, originalmente atribuidos de forma diferente a las actrices (Lohan en el papel de Regina y Seyfried en el de Cady), ten¨ªan los roles perfectamente jerarquizados en un grupo de chicas de naturaleza marcial. ?Sus enemigos? La pr¨¢ctica totalidad de los compa?eros que ten¨ªan los pies en el suelo.
Hace poco, a las puertas del d¨¦cimo aniversario de la pel¨ªcula (el pr¨®ximo 30 de abril), Fey aseguraba que se reunir¨¢ con el reparto para festejar la efem¨¦ride. Y es que la juventud de los aludidos durante el rodaje, as¨ª como el desprop¨®sito generalizado que supuso el proyecto, motiv¨® el buen ambiente durante la grabaci¨®n. De esos d¨ªas nos queda un rap que algunos recordar¨¢n con nostalgia. Al fin y al cabo, la precoz sexualizaci¨®n de los adolescentes, el primer amor o la superviviencia en una jungla que en ocasiones resulta m¨¢s feroz que la propia vida adulta siguen siendo temas decididamente contempor¨¢neos.
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