Colita: ?No puedo expresar el profundo desprecio que siento hacia los pol¨ªticos?
Con la libertad del que ha dicho y hecho lo que le ha dado la gana toda la vida, la fot¨®grafa nos recibe en su casa barcelonesa para repasar algunos de los mejores cap¨ªtulos de su trayectoria.
Colita vive sola con sus cuatro gatos en una casa tranquila y soleada en medio de Barcelona, y, sin embargo, no se puede decir que haya nada solitario en esta mujer fuerte y decidida, malhablada, sensible y sumamente educada, que, sin otra voluntad que retratar a sus amigos, realiz¨® algunas de las fotograf¨ªas m¨¢s importantes de su ¨¦poca.
?C¨®mo empez¨® su afici¨®n a la fotograf¨ªa?
Mi padre era ingeniero y siempre me obsequiaba cosas ¨²tiles. Cuando cumpl¨ª 12 a?os, me regal¨® una c¨¢mara. Empec¨¦ a hacer fotos a mi familia, a los gatos, a todo lo que me rodeaba. Algunos a?os despu¨¦s, conoc¨ª a Oriol Maspons y descubr¨ª que los fot¨®grafos hac¨ªan lo que les daba la gana, lo pasaban pipa y, encima, cobraban. Pero nunca me dije: ?Voy a ser fot¨®grafa?. Lo que yo quer¨ªa era ir a tomar copas a Bocaccio, pasar los fines de semana en la Costa Brava y divertirme.
Su familia pertenec¨ªa a la burgues¨ªa, ?la apoy¨®? ?Le parec¨ªa normal que una mujer quisiera ganarse la vida haciendo fotos?
El plan era que fuese farmac¨¦utica, pero acab¨¦ haciendo Letras. Primero quise ser azafata, para largarme de casa lo antes posible. Cuando se lo dije a mi padre, exclam¨®: ??Acaso quieres ser una criada??.Y cuando, m¨¢s tarde, le dije que iba a ser fot¨®grafa, dijo: ??Fot¨®grafa? ?Como esos desgraciados que en los aperitivos del Ayuntamiento se lanzan sobre la comida??. Entonces me fui unos meses a Par¨ªs. Como me negaba a volver, tuvieron que venir a buscarme.
La fot¨®grafa tiene una vitrina donde resguarda sus antiguas c¨¢maras.
Sergio Moya
Y regres¨® a Barcelona.
S¨ª. Y conoc¨ª a Paco Rev¨¦s, un personaje clave en mi vida. Estaba haciendo el casting para la pel¨ªcula Los Tarantos y me llevaba con ¨¦l a ver a los gitanos. Lo pasaba pipa. La idea siempre era pasarlo bien. Muchas veces no puede ser, claro, pero no me resigno.
Y conoci¨® a Carmen Amaya.
S¨ª, me llamaba ?torera?, le ca¨ªa simp¨¢tica, fue la primera persona que me compr¨® una foto, pero nunca fuimos amigas. Ella se hac¨ªa sobre todo con los gitanos.
?Llevaba siempre la c¨¢mara encima??
No era una obsesa, sol¨ªa llevarla, pero no siempre. Ahora todo el mundo se retrata constantemente. Yo no estoy en Instagram, pero me parece estupendo. La fotograf¨ªa es un lenguaje, y que ese lenguaje haya transcendido a todo el mundo est¨¢ muy bien.
Las paredes de su casa est¨¢n cubiertas de fotograf¨ªas.
Sergio Moya
Fotografiaba a sus amigos.
S¨ª, cuando me emborrachaba con Jaime Gil de Biedma no sab¨ªa que iba a ser el mejor poeta de su generaci¨®n. Pero al conocerlo, pens¨¦: ?Ay, yo te necesito en mi vida, yo quiero verte, todo el rato?. Cuando ahora me preguntan que de qu¨¦ habl¨¢bamos¡ pues no s¨¦, habl¨¢bamos de libros, claro, pero lo que hac¨ªamos, sobre todo, era beber y cantar boleros. Eso es la amistad, ?no?
?C¨®mo era Jaime Gil de Biedma?
Era una de las personas m¨¢s incre¨ªbles que he conocido. No solo era guap¨ªsimo, sino que era muy inteligente, muy culto, aunque nunca te lo restregaba por las narices. Pero no aguantaba la estupidez, le vi dar alg¨²n rapapolvo terrible. Yo tampoco aguanto la estupidez. A veces, prefiero la ignorancia a la estupidez.
?Echa de menos a sus amigos??Su casa est¨¢ llena de fotos, de recuerdos.
Cada d¨ªa. Los amigos no se borran nunca, son una parte esencial de la vida. Yo no olvido.
Colita mirando por la ventana que da a su jard¨ªn.
Sergio Moya
?C¨®mo era la Gauche Divine?
?ramos un grupo de gente que nos gust¨¢bamos, que nos llev¨¢bamos bien, que pas¨¢bamos los veranos juntos. Se daba por sentado que ¨¦ramos inteligentes, brillantes, divertidos y?sexies. Est¨¢bamos encantados de habernos conocido. Trabaj¨¢bamos mucho pero no nos tom¨¢bamos en serio.
?Y Joan Manuel Serrat? ?C¨®mo lo conoci¨®??
Una noche, conoc¨ª al due?o de una discogr¨¢fica en la barra de Bocaccio, me lo present¨® su mujer. Me dijo: ?Ah, ?t¨² haces fotos? ?Por qu¨¦ no me vienes a ver ma?ana a la oficina? Al d¨ªa siguiente, estaba retratando a Serrat. Ten¨ªa muchas ganas de juerga todo el d¨ªa. Recuerdo que ven¨ªa a casa a ver el f¨²tbol.
Hizo de reportera gr¨¢fica durante a?os. ?Qu¨¦ opina de la reforma de la ley del aborto??
Yo siempre he ayudado a las mujeres que no quer¨ªan tener hijos, tambi¨¦n a las que s¨ª quer¨ªan y eran madres solteras o lo que fuera, y pienso seguir haci¨¦ndolo. Estoy a favor de la libertad de la mujer, en lo que se refiere a su co?o, y en todo lo dem¨¢s.
Herramienta m¨ªtica Manipulando su vieja Pentax.
Sergio Moya
Vive en Catalu?a, ?qu¨¦ piensa sobre el independentismo??
Yo soy primero barcelonesa, despu¨¦s catalana y, hasta hace poco, espa?ola. Pero, como muchos espa?oles, tengo un problema con el PP. No puedo expresar con palabras el profundo desprecio que siento hacia la clase pol¨ªtica espa?ola. Que Catalu?a sea independiente me importa un bledo, siempre y cuando la clase pol¨ªtica actual quede totalmente eliminada. Si siguen los mismos, yo me borro. Hay que sacar a todas esas momias, que venga gente nueva, aunque se equivoque. Los de mi generaci¨®n ya estamos cansados, cansados de firmar una carta de reivindicaci¨®n cada d¨ªa. A veces me pregunto qu¨¦ hemos hecho mal.
Se ha acabado el tiempo de la entrevista y nos acompa?a hasta la entrada. En la puerta nos mira, al fot¨®grafo y a m¨ª, y dice: ?Yo, de vosotros, empezar¨ªa a construir una guillotina y la colocar¨ªa en Plaza Catalu?a?. Cierra la puerta. La oigo alejarse canturreando.
El ordenador de la fot¨®grafa con una de sus conocidas im¨¢genes: Vargas Llosa, Donoso, Garc¨ªa M¨¢rquez y sus mujeres.
Sergio Moya
?Qui¨¦n no querr¨ªa tener un ?gallifante? en casa? Ella lo tiene.
Sergio Moya
La fot¨®grafa, de ni?a, con su hermano y su madre.
Sergio Moya
En su casa hay una habitaci¨®n dedicada al orden de su material gr¨¢fico.
Sergio Moya
Colita guarda el chaleco de sus a?os de reportera gr¨¢fica.
Sergio Moya
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