C¨®mo cuidar ese ba?ador que tanto te gusta para que no se estropee este verano
Drama de cambio de armario: sacar del fondo del caj¨®n biquinis y ba?adores para descubrir que est¨¢n hechos polvo. Consultamos con una experta qu¨¦ pasos seguir para que est¨¦n como el primer d¨ªa a?o tras a?o.
No falla: con la llegada del buen tiempo, al rescatar ba?adores y biquinis siempre nos sorprende alguna goma que se ha dado de s¨ª, alguna braguita que ha quedado inservible o alg¨²n ba?ador con zonas casi transparentes por el desgaste. Es cosa del implacable paso del tiempo, pero no solo. ¡°Hay que pensar que el traje de ba?o es una prenda muy delicada que requiere cuidados. La gente le dedica mucho tiempo a su ropa interior, pero no a la de ba?o¡±, apunta Peque de Fortuny, cofundadora y responsable de dise?o en Bohodot.
Alargar la esperanza de vida de estas piezas es cuesti¨®n, sobre todo, de buenos h¨¢bitos: ¡°Es interesante que tanto el agua salada del mar, como por supuesto el agua m¨¢s clorada de las piscinas, no permanezcan mucho tiempo en la prenda. Por lo que una sugerencia seria aclararlos siempre despu¨¦s de su uso, antes del lavado y mientras van a estar en una mochila durante cierto espacio de tiempo¡±, recomienda Irene Fari?a, profesora de tejidos en ISEM Fashion Business School y creadora del canal de Youtube La profe de Tejidos. De Fortuny, que lleva a?os trabajando con este tipo de materiales a?ade: ¡°No retorcerlo tras el lavado y no dejarlo abandonado sec¨¢ndose al sol, que es igualmente da?ino¡±.
Adem¨¢s de los cuidados peri¨®dicos, importa, y mucho, leer la etiqueta: ¡°La composici¨®n de 80% poliamida 20% elastano es una mezcla que aporta, entre otras propiedades, una buena resistencia y buena capacidad el¨¢stica¡±, aclara Fari?a. A m¨¢s licra, m¨¢s facilidad para recuperar la forma y menos probabilidades de darse de s¨ª. ¡°En cuanto al qu¨¦, creo que el algod¨®n es peor que el poliamida porque en seguida se da de s¨ª. El poliamida, aunque depende mucho de su calidad, es m¨¢s el¨¢stico¡±, aconseja De Fortuny.
Los tejidos empleados en la fabricaci¨®n de ba?adores son de los m¨¢s t¨¦cnicos que podemos encontrar en un armario. Generalmente han sido sometidos a tratamientos para que no desti?an al estar en remojo, para que no se transparenten, para que resistan, no se den de s¨ª, ¡°pero los sometemos a condiciones muy adversas cada vez que los usamos¡±, se?ala la dise?adora. La raz¨®n del deterioro de las gomas es pura qu¨ªmica. ¡°Estas materias sint¨¦ticas tienen dos enemigos: el exceso de productos de detergencia y el calor. Casi todo el mundo conoce la experiencia de estar planchando y notar como en algunas prendas, la plancha se detiene y se queda ¡®como pegada¡¯. Pues bien, adem¨¢s del calor f¨ªsico que proporciona por ejemplo una plancha, hay que pensar en el calor qu¨ªmico que se deriva de algunos productos. El caso que nos ocupa es el cloro. Un art¨ªculo de ba?o que se usa con frecuencia en piscinas, que est¨¢n cloradas, es un art¨ªculo que por exposici¨®n al calor va a ver afectadas sus propiedades, sobre todo la de capacidad de recuperaci¨®n. Por eso con el uso pueden ceder y no recuperar su forma¡±, explica la experta del ISEM. Pero que no canten victoria los partidarios de la playa porque, aunque en menor medida, el agua salada tambi¨¦n es da?ina. ¡°El cloro es mortal, pero el agua salada acartona. Y luego est¨¢ la arena, que se queda en las fibras¡±.
La parte positiva: los avances en el sector -que hoy trabaja m¨¢s con materia prima reciclada- son grandes cada a?o. ¡°La innovaci¨®n textil ha favorecido que empresas muy fuertes en el desarrollo de pol¨ªmeros como es Dupont y sus divisiones Invista o Lycra, hayan desarrollado fibras con capacidad el¨¢stica pero fabricadas con poli¨¦ster, que es la materia sint¨¦tica con un grado de fusi¨®n m¨¢s alto. Un ejemplo concreto de esto es la?fibra con patente de marca T.400 que est¨¢ ofreciendo un extraordinario comportamiento frente al calor y que puede encontrarse hoy en prendas de moda y moda deportiva incluyendo,?por supuesto, l¨ªnea de ba?o¡±, puntualiza Fari?a.
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