El enemigo en casa
Las famosas les conf¨ªan su bien m¨¢s preciado: su aspecto. Pero algunos estilistas, en lugar de elevarlas al Olimpo de la alfombra roja, encadenan desatinos.
Un discutible dise?o del belga Anthony Vaccarello ha sido el responsable de que la ingle de la modelo Anja Rubik en la gala del MET se haya convertido en la heredera de la pierna de Angelina Jolie en los Oscar. ?Qui¨¦n quiere adversarios teniendo estilistas? La fama no concede autom¨¢ticamente el don del buen gusto, y eso lo saben la mayor¨ªa de las estrellas, que dedican buena parte de sus ingresos a contratar a profesionales encargados de hacerlas brillar sobre la alfombra roja. El problema es que quien paga manda, y por aquello de que el cliente siempre tiene la raz¨®n, o por exceso de confianza, algunas famosas no le sacan rendimiento a su inversi¨®n.
Ese mismo d¨ªa Gwyneth Paltrow lo confirmaba. Impecable cuando se aleja de los focos, la actriz volvi¨® a cometer el error de ponerse en las manos de Elizabeth Saltzman, empe?ada en vestirla siempre con faldas cortas y minivestidos nada favorecedores, en esta ocasi¨®n, firmado por Prada.
Las transparencias del Gucci que luci¨® Beyonc¨¦ en la misma gala demuestran que un asesor de imagen, m¨¢xime cuando es amigo, como Ty Hunter, nunca debe fiarse de la buena prensa de una marca.
Quiz¨¢ por eso es tan complicado explicar la intensa relaci¨®n entre el mundo del pop y el de los estilistas. Johnny Wujek, estilista de Katy Perry y Nicki Minaj, es el gran representante de esta corriente demasiado amiga del exceso innecesario. La prudencia tampoco asegura nada. Rob Zangardi y Mariel Haenn, encargados de vestir a Jennifer Lopez y a Rihanna, ser¨ªan su equivalente sobrio ¨Cque ya es decir¨C, y aun as¨ª casi siempre fallan. M¨¢s preocupante es el caso de Arianne Phillips, nominada al Oscar al mejor vestuario por W.E., la pel¨ªcula dirigida por su clienta Madonna, pero incapaz de encontrar un look que aleje a la cantante de los brazos descubiertos. ?Su castigo? Ninguno: est¨¢ dise?ando los trajes de su nueva gira.
Anja Rubik, su vestido de vaccarello y su pierna al estilo angelina jolie.
Quien tampoco parece recibir reprimendas por su trabajo es L¡¯Wren Scott, responsable de haber sacado para siempre de la lista de las mejor vestidas a dos otrora habituales como Nicole Kidman y Sarah Jessica Parker. Un club en el que Pen¨¦lope Cruz puede ingresar pronto si Cristina Ehrlich no realiza elecciones radicalmente opuestas al vestido y sobre todo ?al peinado! que la actriz llev¨® en el estreno de To Rome With Love, lo nuevo de Woody Allen. Mientras se mantenga lejos de Brooke Dulien, responsable de convertir a Kelly Osbourne en una se?ora mayor prematura, no hay que perder la esperanza.
En la magia de l¡¯Wren scott conf¨ªan Sarah Jessica y Nicole kidman.
esta rihanna ¨¢rbol navide?o es obra de Rob Zangardi y Mariel Haenn.
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