Blanca Su¨¢rez y Eva Llorach: lecciones sobre c¨®mo gestionar el ego, la fama y la ambici¨®n
Con motivo del estreno de la pel¨ªcula ¡®Disco, Ibiza, Locom¨ªa¡¯, hablamos con Blanca Su¨¢rez y Eva Llorach sobre c¨®mo gestionar sobre la importancia de alzar la voz
El cl¨¢sico ¡°Ni canta ni baila, pero no se la pierdan¡± que acompa?ar¨¢ siempre a la leyenda de Lola Flores tiene algo que ver con Locom¨ªa, un grupo que no necesit¨® ni cantar ni afinar (pero s¨ª abanicar) para erigirse como el ep¨ªtome de la m¨²sica disco ochentera de Espa?a. La pel¨ªcula Disco, Ibiza, Locom¨ªa (en cines el 17 de mayo) examina las sombras que proyectaban sus hombreras, pues junto a la amistad y las familias escogidas, explora los conflictos que dinamitaron a un grupo que no supo gestionar el ¨¦xito. Lo que pocos saben, aunque el documental de Movistar + Locom¨ªa se encarg¨® antes de subrayar su figura, es que Lurdes Iribar fue una de las piezas claves de la banda como corista y dise?adora de vestuario. Nos reunimos con Blanca Su¨¢rez, que da vida a Iribar, y con Eva Llorach, que interpreta a la abogada que intenta reconciliar a los miembros del grupo, para saber c¨®mo gestionan ellas los aspectos y problemas que hicieron que la banda cerrara sus abanicos.
Al decirle al taxista que iba a entrevistar a las actrices de la pel¨ªcula de Locom¨ªa, ha gritado: ¡°?Pero si en Locom¨ªa no hab¨ªa mujeres!¡±.
Blanca Su¨¢rez: Sigue sorprendiendo la figura de Lurdes, pese a que fue una de las creadoras del grupo, del que se desvincul¨® pronto. El modelo de negocio en el que estaban envueltos no encajaba con ella y sinti¨® que no era su lugar. Creo que ni le hicieron justicia ni la acogieron como se merec¨ªa.
Eva Llorach: Interpreto a la abogada mediadora que intenta arreglar el entuerto que tienen. Estoy contenta con el resultado, porque ha quedado algo muy c¨®mico: se queda deslumbrada con ellos y se quiere hacer la moderna. En realidad, ella habr¨ªa querido llevar esa vida; es la t¨ªpica abogada de los a?os ochenta-noventa que viene de una familia bien y algo moderna, pero que no se ha atrevido a hacer muchas cosas. Madre m¨ªa: me estoy escuchando y parece que tengo un papel¨®n enorme, ?verdad? Pero se ve mucho, porque atraviesa todo el metraje.
Ahora que lo comenta, sus papeles, incluso cuando son ¡®peque?itos¡¯, siempre influyen en la trama, porque interpreta a personajes de peso.
E. Ll.: Creo que es al contrario: la clave radica en la forma en la que cojo cada papel, y no me voy a quitar m¨¦rito. Por escrito en ocasiones, cuando los personajes no son muy importantes ni tienen tanto peso, pueden parecer menos relevantes, pero los trabajo como si fueran los protagonistas. Siempre utilizo los personajes para aprender y trabajar cosas que me apetece explorar, y en este caso quer¨ªa apostar por la comedia. Me hace gracia cuando me dicen que siempre me dan papeles guais: yo aprovecho lo que me dan.
La propia Lurdes Iribar explic¨® a S Moda que en el grupo ella hac¨ªa de madre, de hermana, de amiga¡ ?No es cansino que las mujeres siempre tengan que adoptar el rol de cuidadoras?
B. S.: Cuando una mujer decide hacerlo porque quiere, me parece bien. Lo preocupante es cuando le imponen ese rol. Su car¨¢cter era bastante m¨¢s tranquilo y responsable, y lo digo entre comillas, que el del resto del grupo, pero era igual de alocada que la ¨¦poca que le toc¨® vivir. Sin embargo, lo hizo desde un lugar menos llamativo y menos folcl¨®rico que sus compa?eros, y eso la coloc¨® en el lugar de cuidar a los dem¨¢s, que terminaron por poner sobre ella unas responsabilidades que aunque a Lurdes no le molestaron cuando todo flu¨ªa, le hicieron dejar claro que ella no era ni su madre, ni su asistente, ni su costurera.
La ambici¨®n y el ego terminaron con ellos. ?C¨®mo van los suyos?
B. S.: Bastante bien. La nuestra es una profesi¨®n curiosa, porque alimenta mucho el ego, pero ya no porque uno lo haga, sino porque lo hacen los dem¨¢s y como resultado, te lo crees. Digo que es curiosa porque al d¨ªa siguiente puede haber un giro y caes en el olvido, pero t¨² te quedas con el ego bien alimentado. Y cuando est¨¢s en el olvido¡ ?qu¨¦ haces con ese ego? Si est¨¢s atenta a esto, encuentras muchas pistas de c¨®mo manejarte y d¨®nde colocarte. Yo identifico bien qu¨¦ l¨ªneas no cruzar para no alimentar m¨¢s de la cuenta al ego.
(En ese momento, Eva Llorach se remanga y ense?a en el antebrazo un tatuaje que reza ¡°ego free¡±).
E. Ll.: El ego siempre est¨¢. Comparto terapia con una amiga y ambas nos hicimos este tatuaje. Siempre he llamado a los momentos de explosi¨®n de felicidad ¡°ataques de felicidad¡±, y mi terapeuta me ha dicho que esos instantes son ¡°momentos ego free¡±. Ocurren cuando tu ego est¨¢ callado y de pronto dices: ¡°Esta soy yo y esto es lo que me da felicidad¡±. Es importante encontrar estos momentos, y m¨¢s a¨²n si eres actriz, porque te vas comparando con todo el mundo. Todos tendr¨ªamos que hacer terapia, y m¨¢s los actores, porque a veces nos quedamos cuc¨² despu¨¦s de cada trabajo. Yo me meto hasta el fondo y despu¨¦s, tengo que recuperar mi centro y estar en calma. Voy manejando el ego como puedo.
Volvamos a la ambici¨®n, ?son ambiciosas?
B. S.: Hay muchas maneras de demostrar y gestionar la ambici¨®n. Tenerla est¨¢ bien, pero no cuando hablamos de la ambici¨®n a toda costa que algunos tienen. Yo la coloco en l¨ªneas concretas: si deseas que te pasen cosas nuevas, cuando quieres seguir creciendo¡ Hay que tener un m¨ªnimo de ambici¨®n, pero bien gestionada; que no signifique pisar cabezas.
E. Ll.: Mi trabajo personal ahora mismo es lo m¨¢s importante. Cuando llegu¨¦ a Madrid, mi ambici¨®n laboral era lo esencial, pero he llegado a una edad en la que no me puedo identificar con la creencia de que el trabajo es lo m¨¢s importante para m¨ª. Ahora mismo estoy trabajando para estar bien y en calma.
La pel¨ªcula habla de la desaparici¨®n del tab¨², del poder de que cada uno reivindique y explique qui¨¦n es. ?Creen que parad¨®jicamente hoy, que tendr¨ªamos que ser m¨¢s libres, es m¨¢s dif¨ªcil serlo?
B. S.: A m¨ª me lo parece. Se ha avanzado mucho a la hora de poder hablar y mostrar cosas que antes se ocultaban, pero si no sigues un discurso muy concreto, se te clasifica. Los discursos actuales son muy marcados, radicales y dif¨ªciles de seguir en algunos aspectos determinados. Yo procuro no pronunciarme: hay algo de hacer todo el rato discursos que me agota. Est¨¢s fastidiada tanto si piensas algo con alg¨²n ¡°pero¡±, como si no te pronuncias.
E. Ll.: Yo me sorprendo a m¨ª misma pregunt¨¢ndome c¨®mo no voy a opinar de algo. Pero ?a qui¨¦n le importa? ?Por qu¨¦ tengo que opinar de todo y tener que mantener una opini¨®n p¨²blica todo el tiempo? ?No soy el presidente de la naci¨®n! ?Soy una actriz!
Sin embargo, precisamente su opini¨®n acerca de las acusaciones contra Carlos Vermut, con quien ha trabajado tres veces, s¨ª es especialmente relevante¡
E. Ll.: Lo he vivido con dolor. Aunque no voy a hablar de este caso en concreto, el feminismo es para m¨ª tan importante que quiero decir que me parece muy importante que todo lo relacionado con abusos de poder y maltratos sexuales, f¨ªsicos y psicol¨®gicos, se ponga sobre la mesa para que haya un debate y se analice. Creo que uno de los objetivos fundamentales del feminismo es que se entienda lo que supone denunciar; que hombres y mujeres comprendan la empat¨ªa. A quienes nos ha pasado algo, que somos el 90%, sabemos lo dif¨ªcil que es alzar la voz. Por eso, es importante que la gente entienda cu¨¢l es el mecanismo que te lleva a decir lo que te ha pasado.
?Estamos de verdad avanzando hacia un cine m¨¢s seguro?
B. S.: Las cosas est¨¢n cambiando. Aunque no he vivido ning¨²n tipo de situaci¨®n en ese sentido, considero que mi generaci¨®n coloca las cosas de manera diferente, y esto no quiere decir que seamos m¨¢s sumisos. Ahora la piel est¨¢ muy fina, pero la parte positiva es que hay figuras como la de las coordinadoras de intimidad, que por supuesto no exist¨ªan cuando yo empec¨¦ y que agradezco. Los rodajes son un ambiente relativamente hostil, y afortunadamente, ahora hay cosas que est¨¢n muy controladas.
Disco, Ibiza, Locom¨ªa es una historia llena de grises, porque habla de un fracaso. ?Qu¨¦ es para ustedes el fracaso? ?Y el ¨¦xito?
B. S.: Hay veces que dudo si existe realmente el fracaso, porque cuando las cosas no salen como piensas, creo que propicia que salgan otras¡
E. Ll.: La respuesta depende de mi estado de ¨¢nimo. Antes habr¨ªa dicho que ¨¦l ¨¦xito es tener varios papeles de protagonista, pero si lo pienso desde la calma y con el ego bien colocado, quiz¨¢s est¨¢ en otro lugar, en estar tranquila contigo misma y en tener lo poco o mucho que necesites cubierto. Estoy intentando autoconvencerme de que el ¨¦xito es estar en calma.
Eva, vi en las redes que el otro d¨ªa estaba usted leyendo a Olga Tokarczuk, que escribe que hasta la realidad envejece al estar sujeta a las mismas leyes que cualquier organismo viviente. ?Qu¨¦ tal llevan el paso del tiempo?
E. Ll.: Fatal. Mi imagen lleva 20 a?os registr¨¢ndose, y necesitas mucha terapia para entender que las actuales son tu nueva imagen. Cuando las veo, digo: ¡°Wow. ?Se est¨¢ cayendo todo!¡±. Soy el tipo de actriz que va a intentar envejecer sin intervenciones, algo que me quitar¨¢ trabajos, pero me dar¨¢ otros. Me niego a hacer cualquier cosa que modifique mi aspecto. Me estoy reconciliando con mi yo. ?ltimamente me veo muy guapa, pero es que cuando est¨¢s bien por dentro te ves mejor por fuera. Sin embargo, es innegable que es dif¨ªcil olvidarte de tu carcasa cuando eres actriz, porque vives de ella. Uno de los ejercicios terap¨¦uticos es enfrentarte al espejo todos los d¨ªas, mirarte reci¨¦n levantada e intentar quererte, porque si no quieres a esa persona que est¨¢ frente al espejo, tampoco vas a quererla pintada. Luego est¨¢ el tema de los filtros de las redes, que eliminan cualquier imperfecci¨®n: Instagram es el mal y quien lo invent¨®, Sat¨¢n.
B. S.: De repente, veo a las nuevas generaciones como ¡°las nuevas generaciones¡±, y eso me hace sentir mayor. Noto mucho los saltos generacionales, y me explota la cabeza con sus discursos, su forma de vivir, su manera de vestir¡ Tengo 35 a?os, y creo que es a partir de aqu¨ª cuando empiezas a ser consciente de lo r¨¢pido que pasa el tiempo y de que te vas a hacer mayor. En el espejo ves cosas diferentes, te sientes de forma distinta¡ Este a?o han exclamado: ¡°?Pues est¨¢s muy bien!¡±. Ese comentario no me lo hab¨ªan hecho antes.
Equipo
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.