Carey Mulligan: ?Me parece muy triste que el feminismo adquiera connotaciones negativas?
Ha luchado lo indecible por ser actriz. Ahora cambia de marcha para acceder a la categor¨ªa de las aut¨¦nticas estrellas. La ¨²ltima prueba es A prop¨®sito de Llewyn Davis, el nuevo proyecto de los hermanos Coen.
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Carey Mulligan mira por la ventana de su hotel londinense en un d¨ªa de oto?o obligatoriamente lluvioso. ?Hace unos a?os viv¨ªa al final de esta calle. Me sali¨® un papel en una serie y, por primera vez, tuve dinero propio. El problema es que me lo gast¨¦ todo en el alquiler?, recuerda. ?Fue una ¨¦poca bonita y algo loca. La gente llamaba a mi puerta a las tres de la madrugada. Ahora no podr¨ªa vivir as¨ª?. Parece que hable de un tiempo remoto, pero tan solo han transcurrido cinco o seis a?os. Aquella joven sin experiencia que serv¨ªa pintas en un suburbio londinense ha acabado convirti¨¦ndose en una de las int¨¦rpretes con mayor proyecci¨®n en el cine de hoy. Despu¨¦s de encarnar a Daisy Buchanan en El gran Gatsby, Mulligan suma y sigue con lo ¨²ltimo de los hermanos Coen, A prop¨®sito de Llewyn Davis, que llegar¨¢ a la cartelera el 3 de enero. Interpreta a Jean, una malhumorada cantautora folk en el Nueva York de los 60, embarazada de un beb¨¦ que no desea y decidida a someter a un hilarante maltrato verbal al padre de la criatura. Enfundada en un vestido negro de una sola manga y con gesto algo cansado tras una larga jornada promocional, la actriz se sent¨® a hablar de sus inicios dif¨ªciles, de su incomodidad en Hollywood, de su vinculaci¨®n al feminismo y de su relaci¨®n con la moda.
?Cu¨¢l es pregunta que le han hecho m¨¢s veces hoy?
Me han preguntado mil veces si me gusta cantar, como hago en la pel¨ªcula. Se lo voy a ahorrar: la respuesta es que me encanta, aunque no cre¨ª que pudiera hacerlo bien.
Pensaba empezar pregunt¨¢ndole si fue liberador exhibir tanta mala leche. Su papel es lo contrario a la dulce vecinita de al lado en la que intentan encasillarla.
No me voy a quejar porque me ofrezcan siempre lo mismo. Bastante suerte tengo con recibir cualquier tipo de oferta. Pero es cierto que no me interesa encarnar siempre al mismo personaje. Me encant¨® que fuera tan deslenguada, maleducada y honesta. Es distinta a las chicas inocentes y al cine de ¨¦poca que me suelen proponer.
?D¨®nde encontr¨® la rabia de su personaje? ?Tuvo que pensar en sus peores ex para encontrarla?
No me hizo falta [r¨ªe]. Rodamos mis escenas muy temprano, como a las seis o a las siete de la ma?ana. A aquellas horas es m¨¢s f¨¢cil estar algo cabreada que de excelente humor.
Sonar¨¢ a t¨®pico, pero su ascenso ha sido mete¨®rico. ?En alg¨²n momento le cost¨® aceptar la fama?
Al principio fue sobrecogedor. Actu¨¦ en An Education, una pel¨ªcula que cre¨ª que nadie ir¨ªa a ver. De repente estaba nominada al Oscar. Durante mucho tiempo me sent¨ª permanentemente nerviosa. Pasaba mis d¨ªas pensando en el miedo que me daba todo. Hace unos a?os me di cuenta de que no lo estaba disfrutando como deber¨ªa. Decid¨ª relajarme y empezar a pensar en la parte positiva.
Sus padres intentaron prohibirle que se dedicara a la interpretaci¨®n. ?Cada cu¨¢nto les recuerda que se equivocaron?
Intento no hacerlo muy a menudo [r¨ªe]. La verdad es que ahora los entiendo, aunque entonces me pareciera una injusticia. Estos a?os he conocido a decenas de actores brillantes a quienes no les han ido bien las cosas, pese a tener un enorme talento y calificaciones de las mejores escuelas de teatro. Comprendo que a mis padres les diera miedo.
Dice que al terminar el colegio llam¨® a la puerta ?de todas las escuelas de teatro de Londres?. Pero todas la rechazaron, sin excepci¨®n.
Tampoco me extra?a. Al lado de los dem¨¢s chicos, reconozco que no estaba lista. Recuerdo que prepar¨¦ un mon¨®logo de Sarah Kane, una autora teatral que habla de cosas muy l¨²gubres. Yo era una adolescente de clase media que no hab¨ªa vivido nada por el estilo. Fue un poco rid¨ªculo. ?Qu¨¦ pretenciosa fui!
Llewyn Davis es un artista que vive un rechazo permanente. ?Por qu¨¦ cree que le van mal las cosas?
Dir¨ªa que su problema es que no quiere hacer ninguna concesi¨®n, que es algo que les sucede a muchos artistas. Es admirable estar tan comprometido con tus principios, pero a la vez eso puede acabar limitando tus opciones.
?Habla por experiencia propia? ?Ha tenido que ceder en algo para alcanzar el ¨¦xito?
[Duda] De momento, dir¨ªa que no, aunque seguro que tendr¨¦ que hacerlo en el futuro. He tenido suerte. Despu¨¦s de An Education me llegaron muchas ofertas. Mi agente me dio un consejo: ?No aceptes a no ser que la idea de ver a otra chica interpretando al personaje te ponga enferma?. As¨ª es como he seguido escogiendo hasta hoy.
Ha luchado por sus papeles hasta lo indecible. Incluso se hizo un tatuaje para impresionar al director de Shame, quien buscaba a alguien menos refinado.
Es que el director, Steve McQueen, no ten¨ªa ning¨²n inter¨¦s en m¨ª. No dejaba de anular nuestras citas. Hice todo lo posible para convencerlo de que me contratara. En cuanto a Drive, fue la mujer del director quien me vio en una pel¨ªcula y lo convenci¨® para que me diera el papel. Si fuera por ¨¦l, nunca me lo hubiera dado, porque buscaba a una actriz latina. Dir¨ªa que lo m¨¢s dif¨ªcil es llegar hasta la puerta. Luego siempre encuentras la manera de entrar.
De peque?a escribi¨® cartas a Kenneth Branagh y Julian Fellowes, el creador de Downton Abbey, para que le echaran una mano. ?Estaba dispuesta a cualquier cosa para escapar a una vida convencional de clase media?
Julian me respondi¨® que har¨ªa mejor cas¨¢ndome con un abogado millonario [r¨ªe]. S¨ª que debi¨® de ser una reacci¨®n al entorno en el que crec¨ª, pero tambi¨¦n fue algo parecido a una llamada. Nunca imagin¨¦ que acabar¨ªa actuando en una peli de los Coen o junto a Leonardo DiCaprio, pero s¨ª me ve¨ªa como actriz. Mis padres me dec¨ªan: ?Si te dedicas a esto, no tendr¨¢s nada y vivir¨¢s en una pocilga?. Yo les respond¨ªa: ??Eso suena estupendo!?. Idealizaba la experiencia bohemia, la noci¨®n rom¨¢ntica de no tener dinero y malvivir en una buhardilla. Ahora veo que no me habr¨ªa gustado tanto.
Hay varias cosas que no ha realizado. Por ejemplo, cine abiertamente comercial.
Es que no se me dar¨ªa bien. Como actriz, no le veo demasiado inter¨¦s. Lo curioso es que esas cintas en las que los edificios saltan por los aires son mis favoritas como espectadora. La mejor pel¨ªcula de este a?o, para m¨ª, es Objetivo: la Casa Blanca [r¨ªe]. En realidad, no s¨¦ mucho de cine. Soy de esas personas que siempre fingen que han visto filmes que, en realidad, no han visto.
Otra cosa que no ha hecho son campa?as de moda. ?Por qu¨¦?
Me lo han propuesto, como a la mayor¨ªa de actrices de mi edad, pero creo que ser¨ªa una aut¨¦ntica basura como imagen de una campa?a. No me gusta que me hagan fotos ni que me reconozcan por la calle. Adem¨¢s, trabajar en una campa?a de moda dificultar¨ªa mi desempe?o como actriz. Ser¨ªa m¨¢s dif¨ªcil convencer a la gente de que puedo interpretar cualquier papel si, cuando piensan en m¨ª, me identifican con eso.
?No le interesa la moda? El a?o pasado fue anfitriona del Met Ball junto a Anna Wintour¡
La verdad es que fue muy intimidante, pero al final me puse un vestido totalmente loco [un dise?o de Prada de escamas doradas y plateadas] y le acab¨¦ encontrando la gracia. Lo mejor es que me pusieron al lado de Jeff Bezos, el presidente de Amazon. Creo que el 80% de la gente crey¨® que era su mujer. No ten¨ªan ni idea de qui¨¦n era.
Va a rodar Suffragette, donde interpretar¨¢ a una de las pioneras en la lucha por el voto de las mujeres. ?Qu¨¦ opina sobre la palabra feminista, de la que hoy reniegan muchas mujeres j¨®venes?
Yo no tengo ning¨²n problema con esa palabra. Me parece muy triste que el feminismo haya adquirido connotaciones negativas, tal vez porque la gente que controla el mundo no entiende en qu¨¦ consiste. Hoy en d¨ªa, a las mujeres que creen en la igualdad se las trata de obstinadas y dif¨ªciles. No deja de sorprenderme que retrocedamos hacia los mismos debates que sacud¨ªan el mundo hace exactamente un siglo.
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