Por qu¨¦ las ¡°mujeres jodidas¡± de Charlize Theron la convirtieron en la ¨²ltima gran estrella de Hollywood
Con cerca de 72 millones de espectadores en todo el mundo, la actriz sudafricana ha vuelto a demostrar su estatus de gran hero¨ªna del cine de acci¨®n con La vieja guardia, el ¨²ltimo gran fen¨®meno de Netflix.
¡°Mujeres muy jodidas¡±. Esa es la definici¨®n exacta del tipo de personaje que Charlize Theron dice buscar en cada producci¨®n. La actriz ganadora de un Oscar se ha convertido en una de las mayores estrellas del Hollywood reciente apostando, detr¨¢s y delante de la c¨¢mara, por tipas tan duras pero vulnerables, improbables e insumisas hero¨ªnas de acci¨®n que no le ponen f¨¢cil al espectador una empat¨ªa que siempre termina llegando. Derribando, de paso, el mito de la ¡®zorra malvada¡¯ y transform¨¢ndolo por el de ¡®tipa¡¯ ¨Co ¡®puta ama¡¯ en un argot m¨¢s mil¨¦nico¨C, la encarnaci¨®n del anhelado empoderamiento femenino. Con La vieja guardia, su ¨²ltimo gran ¨¦xito en Netflix, ha vuelto a demostrar a sus casi 45 a?os c¨®mo la mejor forma de encandilar a p¨²blico y cr¨ªtica es pasar ol¨ªmpicamente de ellos.
Dirigida por Gina Prince-Bythewood, esta adaptaci¨®n de una novela gr¨¢fica ha arrasado en Netflix desde su estreno, situ¨¢ndose como una de las pel¨ªculas m¨¢s vistas de la historia de la plataforma de streaming al rondar los 72 millones de espectadores en menos de un mes. En La vieja guardia Theron da vida a Andy, la l¨ªder de un grupo de guerreros inmortales que lleva siglos luchando para proteger a la humanidad. Es la primera vez que un filme dirigido por una mujer negra se cuela entre los diez m¨¢s vistos de Netflix y parece asegurado el rodaje de una nueva entrega. Este es el ¨²ltimo ejemplo del estatus de Theron como hero¨ªna de acci¨®n generacional, un puesto consolidado por trabajos como Blancanieves y la leyenda del cazador, Prometheus, At¨®mica, Fast & Furious 8 o Mad Max: Furia en la carretera. Marcando, de paso, un hito en un g¨¦nero que, como ella misma se?ala, ¡°las mujeres nunca han dominado¡±.
¡°No creo que jam¨¢s nos hayan dado la oportunidad de acceder a este tipo de papeles. Recuerdo ver a Sigourney Weaver en Alien cuando era joven y dejarme una gran huella. Much¨ªsimas otras mujeres podr¨ªan hacerlo genial si se les diera la oportunidad¡±, enunci¨® en The Independent. Theron tambi¨¦n se ha lamentado de que las mujeres no tengan una segunda ocasi¨®n de demostrar su val¨ªa en el g¨¦nero si su primera incursi¨®n fracasa en la taquilla, estando restringidas, adem¨¢s, ¡°a papeles de madres o de putas¡±. Su posici¨®n como estrella taquillera es doblemente meritoria teniendo en cuenta que jam¨¢s ha pasado por la m¨¢quina de vender entradas de las f¨¢bricas de superh¨¦roes como Marvel o DC.
Seal of approval from my OG Sam Hargrave! Love you mad - now let¡¯s get ready for Atomic 2!!! pic.twitter.com/qszPDHpTAj
— Charlize Theron (@CharlizeAfrica) July 15, 2020
En una memorable declaraci¨®n de 2012 en The Scotsman, la vers¨¢til actriz dej¨® pistas sobre cu¨¢l era su vocaci¨®n profesional: ¡°Estoy en la fase zorra, digamos que ese mercado me pertenece. Qu¨¦ gran legado dejar¨¦ atr¨¢s, dir¨¢n: ¡®interpret¨® a todas las zorras¡±, defendi¨® ir¨®nica, compar¨¢ndose con el periodo azul que atraves¨® Pablo Ruiz Picasso. Su atracci¨®n por este tipo de personajes, que abarca ya m¨¢s de una d¨¦cada, procede de su propia experiencia profesional, habiendo sido carne del escrutinio p¨²blico y de los egos machistas de Hollywood por su insumisi¨®n profesional y medi¨¢tica. ¡°He escuchado a la gente describirme con adjetivos como fr¨ªa, dif¨ªcil o una zorra¡±, declar¨® la que fuera modelo y ¡®chica Martini¡¯ en la promoci¨®n de la pel¨ªcula El esc¨¢ndalo (Bombshell), que le vali¨® su tercera nominaci¨®n al Oscar.
La sudafricana se ha mostrado inflexible a la hora de llevar su vida privada a las portadas (ha criado a sus dos hijos en la m¨¢s estricta intimidad) e insumisa con respecto al manual de la buena estrella hollywoodiense en las entrevistas, abrazando una incorrecci¨®n pol¨ªtica que, en su caso, no solo no ha perjudicado su carrera, sino que ha cimentado su estatus como gran estrella. La int¨¦rprete ha cargado contra periodistas, ha confesado haber sido v¨ªctima de acoso sexual por parte de un productor o ratificado su negativa a ponerse un vestido blanco y pasar por el altar. Tambi¨¦n ha desvelado sus enfrentamientos con compa?eros de reparto como Tom Hardy y manifestado su ¡°desgarro¡± porque George Miller no contara con ella para volver a dar vida a Imperator Furiosa en la pr¨®xima precuela de Mad Max: Furia en la carretera.
En el art¨ªculo ¡®Charlize Theron no est¨¢ aqu¨ª para hacer amigos¡¯, la editora de Buzzfeed Anne Helen Petersen teoriza sobre c¨®mo el triunfo profesional de la sudafricana se fundamenta en la deliberada ignorancia sobre los mandamientos que deben definir a las estrellas de Hollywood. Batiendo, incluso, al edadismo hist¨®rico que condena a decenas de actrices cuando entran en la madurez. ¡°Ha tratado de redefinir el futuro profesional que afrontan las actrices cuando su belleza envejece y ha luchado, reclamado o creado papeles que la industria por s¨ª sola no concibe para ellas. En el comienzo de su tercera d¨¦cada como actriz, Theron no solo ha entendido c¨®mo manejarse en el sistema. Est¨¢ tratando de cambiarlo por completo¡±.
La que es una de las estrellas mejor pagadas del mundo ha querido desligar tambi¨¦n esta predilecci¨®n por los personajes femeninos heridos pero vengativos de propia experiencia personal, habiendo vivido una infancia tan traum¨¢tica que resulta dif¨ªcil no relacionar con el rumbo de su carrera. Cuando solo ten¨ªa 15 a?os, en 1991, Charlize fue testigo del asesinato de su padre a manos de su madre, Gerda, en defensa propia. Su progenitor, ¡°un hombre alcoh¨®lico y muy enfermo¡±, seg¨²n ella misma confes¨®, les hab¨ªa disparado previamente a su madre y a ella hasta en tres ocasiones esa misma noche. La int¨¦rprete ha declarado que Gerda es la gran inspiraci¨®n en su vida y es su acompa?ante habitual en las grandes citas de premios.
Ajena al complejo y al¨¦rgica al prejuicio, la trayectoria de la tres veces nominada al Oscar es de las m¨¢s ins¨®litas de Hollywood. Despu¨¦s de una d¨¦cada de papeles de novias o esposas con alta carga sexual, su suerte cambi¨® en 2003 gracias a su rol en Monster. No solo por el personaje que le dio la estatuilla y el anhelado ¡®reconocimiento¡¯ en las colinas de Los ?ngeles, sino porque fue su primera experiencia como productora. Estas incursiones detr¨¢s de la c¨¢mara le han permitido tener voz y voto en la forma y el contenido de las historias de las que protagoniza (otros productores dif¨ªcilmente hubieran apostado por ella como trasunto de Schwarzenegger). Y tambi¨¦n de las que no protagoniza, ya que est¨¢ detr¨¢s de series como Mindhunter o el reality automovil¨ªstico de Netflix Hyperdrive. Y su ejemplo ya lo est¨¢ siguiendo la nueva generaci¨®n de estrellas, con Margot Robbie, Alicia Vikander, Gal Gadot o Brie Larson. Todas ellas tambi¨¦n alumnas de la ¡®escuela Theron¡¯ en lo que a compatibilizar taquillazos de acci¨®n con filmes de autor se refiere.
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