?Solo le pido a la vida que Jennifer Aniston y Brad Pitt vuelvan a estar juntos?: ?por qu¨¦ nos empe?amos en que se reconcilien?

Para muchos es la primera gran fotograf¨ªa que nos deja este reci¨¦n estrenado 2020. Jennifer Aniston y Brad Pitt, protagonistas de uno de los m¨¢s c¨¦lebres matrimonios ¨Cy divorcios¨C de este siglo, retratados juntos y en p¨²blico por primera vez en m¨¢s de una d¨¦cada. Si de verdad las redes han estado alguna vez cerca de arder, fue tras publicarse las im¨¢genes de este reencuentro propiciado por los premios del sindicato de actores de Hollywood (SAG Awards). Aniston, con vestido de sat¨¦n blanco y Pitt, de esmoquin pero sin corbata, celebraron juntos los respectivos galardones cosechados en la ceremonia: ¨¦l, el de mejor actor de reparto por ?rase una vez en¡­ Hollywood; ella, el de mejor actriz protagonista en televisi¨®n por The Morning Show. El episodio volvi¨® a despertar los deseos desinhibidos de las hordas de fans que desean que la pareja decida darse otra oportunidad y demostrar que, todav¨ªa en 2020, los romances made in Hollywood existen. Desconocedores de si ese final feliz escrito por los guionistas es realmente beneficioso para los personajes del cuento, ?por qu¨¦ seguimos empe?ados en ponernos el disfraz de cupido?

¡°Es el efecto de la familiaridad, que se ha potenciado hoy en d¨ªa con las redes sociales¡±, sostiene la psic¨®loga y sex¨®loga Susana Ivorra, que hace referencia a la falsa sensaci¨®n de conocer a un personaje p¨²blico por el hecho de que se haya colado en innumerables ocasiones en la pantalla del televisor. ¡°Se idealiza la relaci¨®n porque desde fuera solo se conoce la parte superficial: dos personas exitosas, atractivas, que generalmente caen bien a todo el mundo. Nos hacemos la idea de que est¨¢n hechos el uno para el otro pero desconocemos c¨®mo son en la intimidad, si tienen valores comunes o proyectos de vida similares¡±.

Tras el encuentro en los SAG Awards, las redes sociales y los medios de comunicaci¨®n registraron con precisi¨®n de perito cada detalle de las im¨¢genes (?por qu¨¦ la agarra de las mu?ecas?, ?la sonrisa de Pitt presenciando su discurso refleja admiraci¨®n o un fuego nunca extinguido?) y de las reacciones en las plataformas digitales (los ¡®Me gusta¡¯ de Courteney Cox coparon titulares). El blue monday, el supuesto d¨ªa m¨¢s triste del a?o, se convirti¨® en el dream monday, con cientos de tuiteros dispuestos a mostrar sus anhelos de reconciliaci¨®n y ofreci¨¦ndose incluso a participar para coronar este ¡®ochomil¡¯ de la prensa rosa. ¡°Si he podido volver a juntar a My Chemical Romance y a los Jonas Brothers, por supuesto puedo hacerlo con Brad Pitt y Jennifer Aniston. 2020 es el a?o en el que voy a lograr que pase¡±, aseguraba el productor musical Mark Hoppus en un tuit que cont¨® con m¨¢s de 35 mil ¡®me gusta¡¯. ¡°Solo le pido a la vida que Jennifer Aniston y Brad Pitt vuelvan a estar juntos, ?vale?¡±, a?ad¨ªa la youtuber espa?ola Andrea Compton.

M¨¢s all¨¢ del entretenimiento recreativo, ?qu¨¦ dice de nuestra manera de entender el amor este empe?o en la reconciliaci¨®n de una pareja divorciada desde hace quince a?os? ¡°La mayor¨ªa de nosotros anhelamos un amor eterno y buscamos modelos de referencia, en ocasiones, personajes famosos. Si esos modelos se rompen parece que perdemos el referente¡±, explica a S Moda Silvia Sanz. La psic¨®loga y sex¨®loga establece una analog¨ªa entre este episodio y los cuentos cl¨¢sicos. ¡°?Qu¨¦ suceder¨ªa si nos dijeran que el pr¨ªncipe abandon¨® a la princesa despu¨¦s de besarla? Generar¨ªa una frustraci¨®n por la expectativa que ponemos en la historia, y algo similar ocurre con este tipo de estrellas que creemos ideales¡±. Ivorra coincide: ¡°El amor rom¨¢ntico tiene ese punto t¨®xico en el que crees que, como en las pel¨ªculas, las personas destinadas a estar juntas deben sortear obst¨¢culos para lograrlo. En su caso se traslad¨® la imagen de que no dejaron de quererse, sino que alguien m¨¢s se interpuso. Al desaparecer ese obst¨¢culo ¨CAngelina Jolie¨C parece que todo pudiera volver a la normalidad. Sesgamos la realidad buscando una imagen, un gesto de amor entre ellos, que nos haga creer que fueron felices para siempre¡±.

El fen¨®meno no se da solo con Aniston y Pitt. Kristen Stewart y Robert Pattinson, Antonio Banderas y Melanie Griffith, Alexa Chung y Alex Turner, Rachel McAdams y Ryan Gosling o Emma Stone y Andrew Garfield son otras de las parejas cuyas rupturas tambi¨¦n rompieron el coraz¨®n de sus seguidores y cada posible reencuentro eleva las esperanzas de que la historia de amor pudiera retomarse. Incluso con d¨²os que jam¨¢s estuvieron juntos en la vida real pero s¨ª en la gran pantalla como Kate Winslet y Leonardo DiCaprio o Lady Gaga y Bradley Cooper, cuya qu¨ªmica nos lleva a fantasear con que aquello que hemos visto no puede ser producto solo de la imaginaci¨®n de los guionistas y de una notable direcci¨®n de actores.

La consabida complejidad y diversidad de las relaciones modernas no parece haber conseguido contrarrestar nuestra apuesta a que las historias rom¨¢nticas cuenten con un desenlace cl¨¢sico y no con un final agridulce a lo La La Land. En el caso de Jennifer Aniston, cuyo papel de Rachel Green en Friends la convirti¨® en la novia de Am¨¦rica ¨Cy de medio mundo¨C y cuya simpat¨ªa en el p¨²blico dio nombre incluso una neurona relacionada con la memoria selectiva, se suma el hecho de que la hemos visto enamorarse y desenamorarse en la ficci¨®n en numerosas ocasiones. Como si de un nuevo cap¨ªtulo de la m¨ªtica sitcom se tratara, nos sentamos en el sof¨¢ para recordar tiempos mejores que el actual. ¡°En este caso tambi¨¦n pueden participar la nostalgia y la negaci¨®n. La nostalgia porque esas relaciones nos recuerdan a ¨¦pocas buenas de nuestra vida y nos cuesta aceptar que ya no son lo que eran. Y de negaci¨®n porque si nos hemos sentido rechazados o hemos roto con nuestra pareja buscamos escenarios similares, esperando que las historias tengan un final distinto, para motivarnos y tener una expectativa de que todo puede volver a ser igual que antes¡±, evoca Sanz.

Por muy fuerte que lo deseemos, tanto Jennifer Aniston como Brad Pitt han sido expl¨ªcitos a la hora de confirmar que el amor est¨¢ m¨¢s que superado. Es lo m¨¢s habitual en estos casos, seas estrella de cine o no. ¡°Aunque algunas parejas s¨ª han regresado despu¨¦s de muchos a?os separadas, la realidad es que la mayor¨ªa ha crecido por el camino y ya no tienen ning¨²n inter¨¦s en volver¡±, concluye Susana Ivorra. M¨¢s all¨¢ de la amistad y el buen rollo que puedan mantener en futuros reencuentros, los rom¨¢nticos tendr¨¢n que conformarse con acudir a la hemeroteca para poder verlos viviendo felices y comiendo perdices.