Mabel, cantante e hija de Neneh Cherry: ?Sol¨ªamos ir a espect¨¢culos de flamenco y a montar caballos andaluces por la sierra?
Hija de la cantante sueca Neneh Cherry y el productor Cameron McVey, Mabel reafirma su estatus como gran revelaci¨®n de la m¨²sica pop brit¨¢nica reciente. Mientras ultima su segundo ¨¢lbum, advierte: ¡°Tengo la sensaci¨®n de que es lo mejor que he hecho hasta ahora¡±.
Sentarse en la primera fila del desfile que Fendi celebr¨® el pasado febrero en la Semana de la Moda de Mil¨¢n es para Mabel Alabama Pearl McVey (Alhaur¨ªn de la Torre, 26 a?os), m¨¢s conocida como Mabel a secas, ¡°un sue?o hecho realidad¡±. Dejando a un lado el clich¨¦, que una firma de lujo del calado de la italiana pose sus ojos en esta artista ratifica su influencia m¨¢s all¨¢ de los escenarios, donde ha logrado el reconocimiento de la industria ¡ªmejor solista brit¨¢nica en los premios Brit de 2020¡ª con ¨¦xitos rompepistas como Don¡¯t Call Me Up. La hija menor de la cantante sueca e icono generacional Neneh Cherry, junto a la que ocup¨® el codiciado front row, y del productor de grupos como Massive Attack, Cameron McVey, conoce bien la importancia de la imagen a la hora de construir una carrera musical. ¡°Para m¨ª, la m¨²sica y la moda van de la mano. Son dos formas de expresi¨®n personal, dos maneras de demostrarle a la gente qui¨¦n eres realmente¡±, concede.
Fiel a la est¨¦tica imperante entre las estrellas pop de su generaci¨®n ¡ªu?as kilom¨¦tricas, cambios capilares constantes y predilecci¨®n por las prendas ajustadas y subversivas¡ª, Mabel se muestra celosa con cada look que se pone durante esta sesi¨®n.?
En el marcado acento brit¨¢nico con el que responde ¡ªcreci¨® a medio camino entre Estocolmo y Londres, donde se ha establecido los ¨²ltimos tiempos¡ª es imposible intuir alguna reminiscencia de su infancia en M¨¢laga. All¨ª viv¨ªan sus padres cuando naci¨® y de all¨ª atesora recuerdos tan dichosos como remotos. ¡°Sol¨ªamos ir a espect¨¢culos de flamenco y me acuerdo de que la comida era impresionante. Me encantan las tapas y la gente espa?ola¡±, afirma asegurando que le gustar¨ªa explorar esas ra¨ªces tambi¨¦n en su m¨²sica. ¡°Ah, y tambi¨¦n adoro los caballos andaluces. Montarlos por la sierra de M¨¢laga es uno de los recuerdos favoritos de toda mi vida¡±, a?ade la joven, que sigue siendo una jinete empedernida y tiene su propio caballo en la capital londinense.
En aquel tiempo tambi¨¦n despert¨® en ella el germen que la empujar¨ªa a buscarse un hueco en la industria musical. ¡°Cuando ve¨ªa a mi padre tocando en su estudio yo pensaba, ¡®quiero hacer eso alg¨²n d¨ªa¡¯. Y lo mismo al ver a mi madre sobre el escenario. Ambos son incre¨ªblemente inspiradores y me siento muy afortunada por haber crecido rodeada de gente tan creativa¡±, confiesa. Su talento, heredado de la estirpe musical de la que proviene ¡ªsu abuelo era el virtuoso del jazz Don Cherry¡ª y estimulado a trav¨¦s del hip hop y el R&B de los noventa y los dos mil que pusieron hilo musical a su adolescencia, no hace, sin embargo, que Mabel se regodee en la nostalgia. ¡°No soy una de esas personas que piensa que cualquier tiempo pasado fue mejor. Todos nos ponemos nost¨¢lgicos alguna vez, pero siempre miro hacia adelante. Afronto el futuro con positividad pensando en c¨®mo puedo crecer y ser mejor¡±.
Una cualidad que comparte, dice, con la nueva generaci¨®n de artistas a la que pertenece. ¡°Creo que es un momento incre¨ªblemente excitante para la m¨²sica, que estamos siendo capaces de llevar nuestra herencia y lo que hemos escuchado cuando ¨¦ramos peque?os hacia el futuro¡±. No solo en lo referente al sonido, sino tambi¨¦n en lo que concierne a las letras. ¡°Estamos c¨®modos con lo que somos y mantenemos conversaciones muy importantes sobre identidad, raza, sexualidad, salud mental y todos esos temas que hace unos a?os eran tab¨²¡±.
Autora de la mayor parte de los temas de su primer disco, High Expectations, y muy consciente de la relevancia de manejar el control creativo de su carrera, a Mabel no le da miedo abordar sus relaciones amorosas o la ansiedad que padece desde que era una ni?a en sus canciones. Su Don¡¯t Call Me Up, con el que acumula m¨¢s de 800 millones de reproducciones en Spotify, pretende ser un himno de empoderamiento de la mujer despu¨¦s de la ruptura. ¡°No me quiero esconder detr¨¢s de ning¨²n personaje, quiero que la gente llegue a conocerme. Y para eso tengo que tener control del mensaje que estoy enviando. Lo que quiero decirles a mis fans es que pueden ser ellos mismos¡±, concluye, reacia a hablar sobre ning¨²n tipo de herencia familiar. Un mensaje en el que incidir¨¢ su segundo ¨¢lbum, que ver¨¢ la luz a lo largo de este a?o. La falsa modestia no va con ella: ¡°Tengo la sensaci¨®n de que es la mejor m¨²sica que he hecho hasta ahora¡±.
* Estilismo: Juan Cebri¨¢n.?Maquillaje: Stanislao Iafulli. Peluquer¨ªa: Vasile Longui. Asistente de fotograf¨ªa: V¨ªctor ?lvarez Ferreira.
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