Por qu¨¦ critican a Meghan Markle si est¨¢ haciendo todo lo que se esperaba de ella
Meghan Markle lleg¨® a presentarse como la salvadora de la corona brit¨¢nica, el soplo de aire fresco que reformar¨ªa lo m¨¢s rancio de la monarqu¨ªa. Hoy es criticada por los medios precisamente por intentar hacer lo que se esperaba de ella.
Al principio se vendi¨® como un cuento de hadas: el pr¨ªncipe Enrique, el chico malo rehabilitado de la Casa Real brit¨¢nica, encontr¨® el amor en los brazos de una actriz y fil¨¢ntropa estadounidense, Meghan Markle. Las comparaciones con otra estadounidense que cambi¨® las tornas de su monarqu¨ªa, la cuestionada Wallis Simpson, fueron inevitables (las dos estadounidenses, las dos divorciadas, las dos con un pasado de?socialit¨¦), pero el hecho de que la corona ahora s¨ª que aceptase a una extranjera era un s¨ªmbolo del cambio y el nuevo rumbo por el que apostaba la casa Windsor. Meghan Markle fue acogida con simpat¨ªa dentro y fuera de palacio, con titulares que parec¨ªan describir una comedia rom¨¢ntica m¨¢s que un matrimonio real: ?Enrique supo que era ELLA en el momento en que la conoci¨®??titulaba The Sun, ?Las estrellas estaban alineadas¡ y esta bella mujer entr¨® en mi vida?, dec¨ªa el Daily Mail, o el an¨¢lisis de The Daily Express que dec¨ªa que ?Meghan Markle llevar¨¢ el glamour de Hollywood a la casa Windsor?.
Markle representaba todo lo que pod¨ªa florecer en una monarqu¨ªa que, pese a las intentonas y los nuevos nacimientos reales, parec¨ªa estar marchit¨¢ndose: una mujer birracial, divorciada y trabajadora, adem¨¢s de solidaria, que con su pasado como actriz recordaba a los tiempos de Grace Kelly y que, por encima de todo, parec¨ªa casarse por amor. Era la historia perfecta: tan solo faltaba que comieran perdices.
Sin embargo, en los ¨²ltimos tiempos, la opini¨®n p¨²blica sobre Meghan Markle ha cambiado y los medios que antes doraban la p¨ªldora a la duquesa y a toda la Casa Real ahora se muestran en extremo cr¨ªticos con cada decisi¨®n, cada aparici¨®n p¨²blica y cada rumor que se genera sobre ella. Markle ha pasado de ser la m¨¢s querida a ser la m¨¢s odiada, y las razones parecen ser las mismas: el cambio que promet¨ªa la entrada de Markle ha sido, quiz¨¢s, rupturista para los esquemas tan tradicionales esperan de cualquier monarqu¨ªa. ?Por qu¨¦ la prensa y parte de la opini¨®n p¨²blica detestan a Meghan Markle?
De ?la novia ideal? a ?la duquesa dif¨ªcil?
Los primeros rumores surgieron a ra¨ªz de la boda real: seg¨²n inform¨® el tabloide?Daily Mail, y a pesar de que Enrique orden¨® al personal de servicio que ?Meghan deb¨ªa tener lo que quisiera?, el Palacio de Buckingham rechaz¨® dos propuestas de Markle: la primera, los ambientadores que Meghan quer¨ªa para la capilla de St. George, una reliquia del siglo XV, que la futura duquesa supuestamente dijo que ten¨ªa olor ?rancio? y la segunda, la tiara que finalmente no pudo lucir porque la reina se neg¨®, seg¨²n las informaciones publicadas. La reina pens¨® que la tiara era de origen ruso y, en el contexto del esc¨¢ndalo de Sergei Skripal, un ex esp¨ªa brit¨¢nico envenenado por agentes rusos, la casa real no quer¨ªa asociaciones negativas para un d¨ªa feliz. Aunque el segundo rumor s¨ª pareci¨® confirmarse, en ning¨²n momento se present¨® como motivo de disputa entre Meghan Markle y la reina. El primero nunca se lleg¨® a confirmar, pero ya se encontraba en la portada de la prensa amarilla. Aquella fue la primera vez que Meghan Markle se gan¨® el apodo de ?dictatorial? y comenzaron a surgir los rumores en torno a su dif¨ªcil car¨¢cter.
Enrique?y Meghan han sido criticados por el alto coste de las renovaciones de?Frogmore Cottage, su nueva casa en los terrenos del castillo de Windsor, cuya renovaci¨®n a alcanzado los dos millones y medio de libras, un dispendio que despierta las quejas del contribuyente. Sin embargo, tal y como explic¨®?Michael Stevens, responsable de las cuentas de la monarqu¨ªa brit¨¢nica: ?La propiedad no hab¨ªa sido reformada durante algunos a?os y ya hab¨ªa sido seleccionada para ser renovada?. Entre los arreglos que requer¨ªa la casa, se encontraban la renovaci¨®n de los sistemas de calefacci¨®n, la instalaci¨®n el¨¦ctrica y la instalaci¨®n de ca?er¨ªas de gas y agua. Las cr¨ªticas a la pareja se han centrado en unos rumores sobre el alto coste de una alfombra que la duquesa quer¨ªa conservar por todos los medios. La pareja formada por Enrique y Meghan ha despertado m¨¢s cr¨ªticas por esta reforma que los duques de Cambridge, el pr¨ªncipe William y Kate Midleton, por sus reformas del Palacio de Kensington, donde gastaron 5 millones de libras.
Otra de las especulaciones en torno al car¨¢cter de Markle tienen que ver con el abandono de varios miembros de su equipo: han sido cuatro en total los asistentes que han dejado su puesto desde que Markle entrase en escena y los peri¨®dicos sensacionalistas siempre han apuntado a que la duquesa es la culpable. El trabajo de sus asistentes era que Meghan Markle se integrase perfectamente en la familia real, as¨ª como guiarla en cuestiones de protocolo y apariciones p¨²blicas. Siempre seg¨²n los rumores vertidos en los tabloides, la duquesa habr¨ªa sido demasiado dura con sus empleados, llegando a levantar la voz y a enviar mensajes con sus requerimientos a altas horas de la madrugada.
El beb¨¦ de la disputa
Pero ha sido con el nacimiento del hijo del pr¨ªncipe Enrique y Meghan Markle, en mayo de 2019, cuando la opini¨®n p¨²blica se ha puesto en contra de la duquesa. Meghan Markle y el pr¨ªncipe Enrique han tomado una serie de decisiones que no han tenido buena acogida: la primera de ellas, fue la de no dar a luz en el hospital habitual de la realeza y hacerlo en otro con menos exposici¨®n medi¨¢tica y m¨¢s intimidad, rompiendo as¨ª una tradici¨®n de m¨¢s de cuatro d¨¦cadas. La segunda, fue la decisi¨®n de Meghan Markle de no hacer el cl¨¢sico posado postparto horas despu¨¦s de dar a luz, y hacerlo unos d¨ªas m¨¢s tarde, mostrando con naturalidad su tripa de madre primeriza, impensable en la mayor¨ªa de los posados de este tipo que acostumbramos a ver entre las celebrities.
La duquesa de Sussex volvi¨® a recibir cr¨ªticas por el modo de presentar al peque?o Archie a trav¨¦s de la cuenta de Instagram de los duques: tres d¨ªas despu¨¦s de su nacimiento, coincidiendo con el d¨ªa de la madre en Inglaterra, se public¨® una fotograf¨ªa en la que tan solo se ve¨ªan los pies del reci¨¦n nacido. La imagen fue criticada por algunos medios que alegaban que era demasiado ?art¨ªstica?, cuando los seguidores de la casa real solo quieren ver a Enrique, a Meghan y al ni?o.?Ambos volvieron a ser duramente criticados por el bautizo de Archie, que decidieron hacer a trav¨¦s de una ceremonia discreta que solo alberg¨® veinte invitados, privada y sin c¨¢maras, sin desvelar qui¨¦nes ser¨ªan los padrinos y con fotograf¨ªas escogidas por ellos. ?El celo con el que Enrique y Meghan preservan la intimidad de su reci¨¦n nacido no es recibido con buenos ojos por una sociedad que considera a un beb¨¦ real un bien com¨²n: o como?publicaba The Telegraph.??a los brit¨¢nicos nos duele?.
En 2018, d¨ªas despu¨¦s de la boda real, el corresponsal de la familia real para la BBC, publicaba un art¨ªculo donde desgranaba las peque?as pinceladas de modernidad que Meghan Markle introdujo en su boda. El art¨ªculo se titulaba ??Qui¨¦n cambiar¨¢ antes, Meghan o la familia real?? y el periodista apuntaba a la necesidad de cambio dentro de Windsor: ?La llegada de Meghan Markle marca un gran cambio para lo que sigue siendo una instituci¨®n muy tradicional y, algunos dir¨ªan, tambi¨¦n bastante r¨ªgida. Siempre se ha hablado de su modernizaci¨®n, e incluso su salvaci¨®n. La familia real necesita renovarse continuamente, y ha demostrado ser bastante h¨¢bil con eso?. El mismo periodista ha criticado recientemente a la duquesa por sus ¨²ltimas decisiones. Suena parad¨®jico, pero quiz¨¢s con Markle la monarqu¨ªa est¨¢ a un paso por delante de lo que dicta la sociedad.
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