Shakira rescata para su v¨ªdeo a la ¡®nanny¡¯ despedida por Piqu¨¦

Shakira contin¨²a con su mantra vital ?las mujeres no lloran, las mujeres facturan? y ha publicado El jefe, un nuevo tema en colaboraci¨®n con el grupo estadounidense Fuerza Regida. En esta canci¨®n, que podr¨ªa clasificarse como protesta, la colombiana se convierte en defensora de los derechos laborales de la mano de obra m¨¢s vulnerable. Con su letra se mete en el bolsillo a los trabajadores, muchos de ellos inmigrantes latinoamericanos, que han tenido que soportar condiciones de trabajo abusivas por parte de patrones despiadados y avaros. A la espera de juicio con la Hacienda espa?ola por el supuesto fraude de 14,5 millones de euros y en otro giro de los acontecimientos inesperado, la artista canta: ?Tengo un jefe de mierda que no me paga bien. Yo llego caminando y ¨¦l en Mercedes Benz. Me tiene de recluta. El muy hijo de puta, yeah?.

En este himno proletario, Shakira le dedica un lugar especial a Lili Melgar, la ni?era de sus hijos, Sasha y Milan, y la persona que supuestamente inform¨® a la cantante de que en su casa alguien se estaba comiendo la mermelada que a nadie le gustaba. ?Lili Melgar, para ti es esta canci¨®n, que no te pagaron la indemnizaci¨®n?, dice en el videoclip la cantante, mientras mira a c¨¢mara y enlaza con un primer plano de Melgar. La cantante estar¨ªa haciendo referencia al despido fulminante de la cuidadora por parte de Piqu¨¦ cuando se enter¨® de que era la aliada y confidente de su expareja. Una chispa de sororidad en un episodio, el de la separaci¨®n del futbolista y la cantante, en el que se han puesto sobre la mesa algunos prejuicios mis¨®ginos que ya cre¨ªamos superados, como hacer responsable principal de la situaci¨®n a la nueva pareja del futbolista, Clara Ch¨ªa, o humillarla p¨²blicamente llam¨¢ndola Twingo.

Con este cameo de Melgar en El jefe, Shakira rinde homenaje a la relaci¨®n de ambas mujeres y pone en valor el trabajo de las cuidadoras, gracias al cual millones de mujeres y hombres pueden seguir con sus carreras profesionales mientras otra persona cr¨ªa y cuida de lo m¨¢s importante de sus vidas: sus hijos. Aunque la trabajadora boliviana fue supuestamente despedida por Piqu¨¦, meses m¨¢s tarde fue contratada de nuevo por Shakira para hacerse cargo de los ni?os en su nuevo lugar de residencia, Miami. Ha sido la propia hija de Melgar la que ha confirmado en X (antes Twitter) que su madre sigue siendo la mano derecha de la cantante colombiana. ?A pesar de todo, ella sigue trabajando con SHAKIRA. TE AMO MAM??, ha escrito Dariana Melgar en la red social, donde otros usuarios han compartido fotos recientes en las que se ve a Sasha y Milan fuera de Espa?a, acompa?ados por Shakira y Lily Melgar. Shakira habr¨ªa concedido derechos de imagen a Melgar por su participaci¨®n en el v¨ªdeo e incluso se ha especulado?con que podr¨ªa haberle pagado una gran cantidad de dinero por ser inspiraci¨®n del tema.

El ocaso de la ni?era que rompe parejas

En la biograf¨ªa de los famosos, las ni?eras siempre han tenido un papel especial. Esas mujeres que se han metido en lo m¨¢s profundo de la convivencia y de la intimidad familiar, las mismas a las que las grandes influencers de hoy tienden a invisibilizar como si los hijos se criaran por arte de magia, han sido grandes protagonistas de las historias de personajes c¨¦lebres. Excepcionalmente, han ocupado titulares positivos. Enrique Iglesias, por ejemplo, cont¨® que fue su ni?era, a la que consideraba una madre, la que confi¨® en ¨¦l m¨¢s que sus propios padres y le financi¨® la grabaci¨®n de su primer disco. Pero la realidad es que esta profesi¨®n casi siempre ha ocupado titulares en los que las empleadas han sido reflejadas como las responsables de romper matrimonios o buscar fortuna con m¨¦todos cuestionables.

Mientras estas trabajadoras sosten¨ªan el sistema capitalista, la prensa se cebaba con ellas con historias como la del?actor Ethan Hawke, que estando casado con Uma Thurman, se enamor¨® de Ryan Shawhughes, ni?era de sus dos hijos, con la que se acab¨® casando en el a?o 2008. La prensa acus¨® a la ni?era de ser la responsable de romper la relaci¨®n entre los dos actores, aunque Ethan Hawke siempre ha desmentido esas informaciones asegurando que fueron otras razones las que terminaron con su matrimonio con Thurman. ?Uma y yo no nos separamos por la infidelidad de nadie?, dijo a ABC News. Algo parecido sucedi¨® cuando Sienna Miller se enter¨® por boca de unos de los hijos de?Jude Law de que su padre manten¨ªa una relaci¨®n ¨ªntima con su cuidadora. La prensa tampoco piedad con Rebecca Loos, que ahora vive en una granja con su marido e hijos. En aquella ¨¦poca, le dedicaron todo tipo de titulares en los tabloides ingleses y las revistas espa?olas por su supuesta relaci¨®n con David Beckham. Loos hab¨ªa sido contratada por la familia como asistente personal para ayudarlos a navegar por su nueva vida en Madrid. A Diana de Gales se la chantaje¨® con las supuestas infidelidades de Carlos de Inglaterra con la nanny?de sus hijos. La BBC acab¨® siendo condenada a pagar una indemnizaci¨®n de 235.000 euros por unas revelaciones ¡°totalmente infundadas¡± que tuvieron ¡°graves consecuencias personales¡± para Alexandria Pettifer, ni?era de Guillermo y Enrique de Inglaterra. Con datos ciertos o falsos, todos estos casos de familias famosas supuestamente destrozadas por las ni?eras construyeron una mirada de desconfianza hacia ellas en la cultura popular.

Pero no solo la cultura popular ha denostado esta profesi¨®n. Hasta 2022, las trabajadoras del hogar en Espa?a no ten¨ªan los mismos derechos laborales que el resto de los trabajadores por cuenta ajena. Mediante un decreto ley se les concedi¨® el derecho al subsidio por desempleo y protecci¨®n frente al despido. La entonces vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda D¨ªaz, afirm¨® que el decreto con car¨¢cter feminista convert¨ªa a Espa?a en ?un pa¨ªs mejor que pone en el centro a las que han sido las grandes olvidadas, las mujeres trabajadoras m¨¢s vulnerables?. Un colectivo ¡ªa?adi¨®¡ª con caracter¨ªsticas singulares: m¨¢s de un tercio de estas mujeres superan los 55 a?os, un 44% son extranjeras, y m¨¢s de la mitad desempe?an ese trabajo a tiempo parcial. La ley por fin deja de tratarlas como si fueran invisibles y la m¨²sica de Shakira las dibuja como aliadas y no como amenazas, mientras pone en valor su imprescindible trabajo. La imagen popular de las ni?eras rompe matrimonios?se ha empezado a derrumbar.