?Todos somos culpables?: Monica Lewinsky compara el juicio de Johnny Depp y Amber Heard con la pornograf¨ªa
?Puedo decirte que las cicatrices nunca desaparecen?, ha lamentado la exbecaria de la Casa Blanca en relaci¨®n a la especulaci¨®n y la crueldad que ha inundado las redes sociales.
Este mi¨¦rcoles, el jurado daba la raz¨®n en su veredicto a Johnny Depp, sentenciando que Amber Heard difam¨® a su exmarido en el art¨ªculo que escribi¨® en 2018 en The Washington Post, donde la actriz se presentaba como v¨ªctima de maltrato.??Una sentencia que ha llegado tras seis semanas de un medi¨¢tico juicio que ha generado una gran expectaci¨®n entre reproches y acusaciones mutuas de abuso y difamaci¨®n. Numerosas voces han dado su opini¨®n al respecto, incluida Monica Lewinsky, quien ha expresado su preocupaci¨®n sobre la manera en la que se ha especulado sobre el juicio y la crueldad con la que se ha debatido en las redes sociales.
?A menos que seas un troglodita, has estado expuesto a algo sobre el juicio entre Depp y Heard en las ¨²ltimas semanas?, arrancaba la ahora activista y exbecaria de la Casa Blanca, de 48 a?os, en un art¨ªculo publicado este martes en la edici¨®n estadounidense de la revista Vanity Fair,?antes del esperado veredicto. ?Hemos sintonizado tanto con este estrecho y c¨ªnico ciclo de encuentros en las redes sociales que consideramos que el juicio no es tr¨¢gico ni pat¨¦tico, sino un puro accidente automovil¨ªstico: accesible, de mal gusto e inmediatamente gratificante. Prescindimos del pensamiento cr¨ªtico y lo sustituimos por la emoci¨®n barata. Tal consumo disperso no ha permitido una comprensi¨®n real?.
Lewinsky?ha lamentando que ?la distorsi¨®n, y no la objetividad, se ha convertido en una moneda de cambio aceptable? y?considera que la facilidad con la que se ha podido seguir el juicio a trav¨¦s de las redes y los medios de comunicaci¨®n ha hecho que ?pensemos, inconscientemente, que tenemos derecho a mirar y mirar. A Juzgar. A comentar?.?Tambi¨¦n ha establecido paralelismos entre la expectaci¨®n que ha causado el juicio con la adicci¨®n a las drogas y se ha referido al mismo como ?pornograf¨ªa de tribunal?.
La que fuera becaria de la Casa Blanca entre 1995 y 1996 fue v¨ªctima de acoso medi¨¢tico y?humillaci¨®n p¨²blica tras darse a conocer los detalles de sus encuentros sexuales con el entonces presidente de Estados Unidos Bill Clinton.??Habiendo sido receptora de este tipo de crueldad, puedo decirte que las cicatrices nunca desaparecen?, ha lamentado.???Nuestra opini¨®n sobre este caso nos da derecho a sentirnos tan superiores, o inferiores, que podemos crear un meme, un TikTok o un tweet diciendo algo que haga que otras personas se r¨ªan de alguien que ya est¨¢ sufriendo??.
?Este espect¨¢culo legal ser¨ªa bastante triste si solo afectara la vida personal de Depp, Heard y sus seres queridos. Ser¨ªa lo suficientemente triste incluso si solo consider¨¢ramos c¨®mo ha impactado a los supervivientes de violencia dom¨¦stica o a aquellos que han buscado fuerza en el movimiento #MeToo. Sin embargo, son las implicaciones m¨¢s amplias para nuestra cultura las que m¨¢s me preocupan: las formas en que hemos avivado las llamas de la misoginia y, por separado, el circo de las celebridades?. La activista apunta que ?no se trata solo de los dos individuos y de c¨®mo te sientes acerca de ellos o esta situaci¨®n?, sino del ?da?o colateral cultural? que se ha ocasionado.
Lewinsky termina su columna diciendo que ?estamos contaminados por la suciedad y la agresi¨®n de los enfrentamientos de las redes sociales? y que ?el di¨¢logo obsesivo en torno al juicio Depp-Heard es solo un peque?o ejemplo de la creciente b¨²squeda de Schadenfreude?, t¨¦rmino alem¨¢n que recoge la idea de disfrutar y regodearse de las desgracias ajenas. ?No importa a qui¨¦n favorezca el veredicto del jurado, ya sea a la acusada Heard o al demandante Depp, somos culpables?, concluye.
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