La vida y la muerte de una tendencia

La calle dicta tendencias, aunque internet ha cambiado la manera de captarlas. Los coolhunters ya no han de ir c¨¢mara en mano por los n¨²cleos generadores de tendencia de Tokio como Shibuya o Harajuku. Los tienen a trav¨¦s de webs como ¨¦sta. Las agencias de an¨¢lisis de tendencias tienen que ser capaces de ver lo que marca esa avanzadilla del street style y comunicarlo a la industria. Entonces la maquinaria se pondr¨¢ en marcha. No se enga?en, nada es al azar. De hecho, en este momento ya se sabe qu¨¦ color llevaremos dentro de uno o dos a?os y hasta se puede consultar en Pantone. Esa tendencia primero la llevar¨¢n creadores de tendencias y blogueros. Uno o dos a?os despu¨¦s de que todo empezara, podremos verla en los escaparates y en la calle. Y luego morir¨¢.

¡°Una tendencia muere cuando deja de ser novedosa y pasa a estar en todas partes, cuando deja de ser utilizada por una minor¨ªa de trendsetters y es adoptada por la gran mayor¨ªa o mainstream¡±, explica Anna Mar¨ªa L¨®pez L¨®pez, especialista en dise?o y tendencias, y autora del libro Coolhunting digital.

La llegada al gran p¨²blico marca su muerte. Esto, que parece una contradicci¨®n, tiene su l¨®gica. El fl¨²or es una de las tendencias m¨¢s importantes del momento. Ha llegado al ¨²ltimo sector de los consumidores. Pero los que quieren estar a la ¨²ltima, huir¨¢n de ella a la hora de vestirse. Porque, si ya lo lleva todo el mundo, ya no es moderno.

Hay micro tendencias que pueden ser muy fuertes pero absolutamente pasajeras y morir en un a?o, o incluso mucho menos. ¡°Las tendencias que tienen mucho ¨¦xito mueren r¨¢pido. Se abaratan, nos cansamos de ellas, tanto los dise?adores como el p¨²blico, y la calle las termina matando. Suele pasar con las que son muy poderosas, como el damero, con estampados fuertes o muy evidentes¡±, detalla Juan Duyos, dise?ador y director del Grado de Dise?o de Moda en la Escuela Universitaria de Dise?o e Innovaci¨®n (ESNE).

Los expertos se refieren como fads a las tendencias que solo duran una temporada. ¡°Atraen muy r¨¢pido a un gran n¨²mero de personas espec¨ªficas, pero no incluyen a todos los grupos o? perfiles de edades¡±, precisa Christina Bifano docente del curso de Coolhunting and Fashion Trends en el IED Barcelona Escola Superior de Disseny, e Investigadora y analista de Entrop¨ªa Investigaci¨®n Avanzada.

Tambi¨¦n hay macro tendencias, las que son m¨¢s consolidadas y visibles, que pueden durar entre tres y cinco a?os (pantalones pitillo), y otras que, seg¨²n Duyos, son ¡°casi eternas¡±, como el safari o el marinero que resucitan cada verano en los armarios. Muchas de ellas son c¨ªclicas (el punk), fluyen entre pasado y presente, y vuelven recicladas o reinventadas, eso s¨ª, veinte o treinta a?os despu¨¦s.

La moda va tan r¨¢pido que los fl¨²or, que causaron furor, ya est¨¢n pasados.

Una tendencia como el fl¨²or usualmente se encuentra en todo tipo de productos. ¡°Se mantiene popular y logra llegar a la calle cruzando productos que atraen a todas las edades y grupos socioecon¨®micos, antes de que baje y regrese unos a?os despu¨¦s cuando un influencer, saque de su armario sus zapatillas ne¨®n y las use en un evento popular; o hasta que un dise?ador tenga la oportunidad y reintroduzca el ne¨®n en una forma nueva y excitante. Mientras que algo como tener una cartera especifica de ne¨®n, que imita a una colecci¨®n pret-a-porter y es r¨¢pidamente llevada a tiendas de bajo precio, simplemente desaparece la siguiente temporada, y es considerada un fad¡±, agrega Bifano.

Internet ha revolucionado la moda y ha dejado su impronta en el ciclo vital de las tendencias, desde su detecci¨®n hasta su difusi¨®n final. ¡°Las redes sociales son la fuente de informaci¨®n perfecta para detectar trendsetters e innovadores, o para saber que producto est¨¢ comenzando a llamar la atenci¨®n de los denominados¡±, apunta L¨®pez.

La frecuencia de las colecciones tambi¨¦n ha cambiado. Si antes se resum¨ªan a primavera-verano y oto?o-invierno, ahora hay que sumar las Crucero, Pre-Fall y hasta las llamadas c¨¢psula, consecuencia del fast fashion. ¡°El mundo de la moda le debe a Francia la elegancia, a Italia la industria y a Espa?a la moda r¨¢pida. En las tiendas de Amancio Ortega las colecciones se refrescaban incluso cada semana, y para poder seguirle el juego la industria se invent¨® el pre-fall y el resort¡±, opina Duyos. Esta superabundancia de colecciones ha expandido las tendencias, para aprovecharlas al m¨¢ximo en todo tipo de productos antes de que mueran de ¨¦xito.

?Cu¨¢nto tiempo durar¨¢ el estampado damero?

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