Las modelos ¡®trans¡¯ tambi¨¦n triunfan en la cosm¨¦tica
La ¨²ltima batalla de las modelos transg¨¦nero se libra en la industria de la belleza. Redken acaba de fichar a Lea T como nueva embajadora.
No es la ¨²nica que se rinde a los encantos de la diversidad pero s¨ª una de las pocas que lo hace con una modelo transg¨¦nero. La firma de belleza Redken acaba de fichar a la modelo y activista Lea T como nueva embajadora de su l¨ªnea de coloraci¨®n capilar Chromatics. El gigante estadounidense de productos para el cabello ha posado sus ojos en esta belleza brasile?a acostumbrada a romper barreras. Debut¨® en 2010 en una campa?a para Givenchy, desfil¨® varias temporadas para la firma y pronto se convirti¨® en la musa del director creativo Riccardo Tisci ¨C"una verdadera diosa", seg¨²n sus palabras¨C. Desde entonces, y tras someterse a una cirug¨ªa de reasignaci¨®n de sexo en 2012, Lea T ha protagonizado numerosas portadas de revista y editoriales de moda.
"Me encanta trabajar con Redken porque aprecian la belleza en su totalidad y creen en el car¨¢cter individual y ¨²nico de cada persona", ha asegurado la modelo a la prensa. La industria de la belleza, hist¨®ricamente alejada del esp¨ªritu m¨¢s combativo de la moda, est¨¢ cambiando de parecer. A juzgar por las ¨²ltimas campa?as de publicidad la diversidad vende. Empezaron con modelos, despu¨¦s llegaron las celebridades y ahora es el turno de lo diferente. Como en la moda. Esta obsesi¨®n por descollar a golpe de titular no cuenta con demasiados precedentes m¨¢s all¨¢ de la iniciativa antisida Viva Glam protagonizada por la c¨¦lebre travesti RuPaul para la casa canadiense MAC en 1994.
Imagen de la campa?a Viva Glam de MAC con RuPaul (1994).
MAC
El caso de Lea T para Redken se suma al de la actriz Lupita Nyong'o como nueva imagen de Lanc?me, todo un desaf¨ªo al imperio de los rostros n¨ªveos y virginales de la publicidad. La moda, sin embargo, m¨¢s ducha en estos menesteres, cuenta con una larga experiencia a la hora de apostar por bellezas diferentes. Y las modelos transg¨¦nero pueden dar buena fe de ello. Andreja Pejic ¨Cantes de su operaci¨®n de reasignaci¨®n de sexo el pasado julio se llamaba Andrej Pejic¨C es el caso m¨¢s paradigm¨¢tico de cuantos se conocen. Su trabajo para firmas como Marc Jacobs, Jean Paul Gaultier o Rosa Clar¨¢ le catapult¨® a las portadas de todos los medios. En 2011, la revista The New York Magazine la nombr¨® "el chico m¨¢s guapo del mundo".
La modelo Stav Strashko ¨C"el nuevo Pejic", como se la conoce¨C o la ganadora de Eurovisi¨®n Conchita Wurst son otras de las protagonistas del dulce momento que vive la diversidad en la moda. La cantante austriaca desfil¨® en julio para Jean Paul Gaultier y en agosto fue retratada por Karl Lagerfeld para el ¨²ltimo n¨²mero del CR Fashion Book de Carine Roitfeld. Afortunadamente su caso no es el ¨²nico. En enero de este a?o los grandes almacenes Barneys presentaron una campa?a protagonizada por diecisiete modelos transg¨¦nero. El fot¨®grafo Bruce Weber recibi¨® el encargo de retratarlos como parte de una iniciativa cuyos beneficios fueron destinados al National Center for Transgender Equality de Estados Unidos.
Lea T para Givenchy (o/i 2011), Andreja Pejic para Jean Paul Gaultier (alta costura p/v 2012) y Conchita Wurst para Jean Paul Gaultier (alta costura o/i 2014).
Cordon Press
La sospecha de que este tipo de campa?as se apoyan en el convencimiento de que lo raro vende ¨Cy no digamos el compromiso con las minor¨ªas¨C no empa?a el valor de la apuesta. Por eso quiz¨¢s sorprende que todav¨ªa haya marcas que no se han enterado de qu¨¦ va la fiesta y qu¨¦ es lo que los consumidores reclaman hoy. La ¨²ltima campa?a de la firma de lencer¨ªa Victoria's Secret para Reino Unido, presentada en octubre y que llevaba por t¨ªtulo The perfect body (El cuerpo perfecto), puso a prueba lo que los expertos en marketing llaman el riesgo reputacional ¨Ctoda acci¨®n, evento o situaci¨®n que podr¨ªa impactar negativa o positivamente en la reputaci¨®n de una empresa¨C. Las organizaciones de consumidores y una petici¨®n en la plataforma Change.org pidieron su retirada por mostrar una idea del cuerpo perfecto con diez modelos extremadamente delgadas. Las cr¨ªticas llegaron desde todos los ¨¢mbitos. La firma neoyorquina de lencer¨ªa Dear Kate no se qued¨® callada y respondi¨® con una contracampa?a, am¨¦n de una denuncia p¨²blica en su web y una recogida de firmas. Ayer Victoria's Secret rectific¨® y redise?¨® su campa?a.
Iniciativas como la de Redken con Lea T o la sesi¨®n de fotos de Conchita Wurst para CR Fashion Book demuestran que la creatividad es una excusa brillante para dar cabida a todas las bellezas y, de esa manera, ayudar a que la sociedad cambie su percepci¨®n con relaci¨®n al cuerpo de la mujer. Que lo hagan con fines comerciales no enturbia la intenci¨®n.
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