Joyas con emoci¨®n: c¨®mo Su¨¢rez, la firma de joyer¨ªa nacional, fabrica sus piezas a medida
80 a?os de historia familiar, innovaci¨®n y calidad. Todo comenz¨® en 1943, en una peque?a tienda-taller de Bilbao, y la tercera generaci¨®n lidera ahora la expansi¨®n internacional
La de la joyer¨ªa Suarez es una historia familiar, con giros de guion tr¨¢gicos, ¨¦xitos, epifan¨ªas y, por supuesto, amor. Los inicios de la casa de joyer¨ªa espa?ola se remontan a 1943 a una tienda-taller de 20 metros cuadrados en la zona antigua de Bilbao. ¡°En 1974 sus fundadores, Emiliano Su¨¢rez Faffi¨¢n y esposa, Sara, murieron en un accidente de tr¨¢fico¡±, recuerda Giovanna de Peverelli, joyera de la firma desde 1991. ¡°Sus dos hijos, Emiliano y Benito Su¨¢rez, con menos de 30 a?os y mucha valent¨ªa, impulsaron el crecimiento de la casa primero en Bilbao y luego en Madrid¡±, a?ade De Peverelli. En Madrid abrieron en 1982 la ic¨®nica tienda en el n¨²mero 63 de la calle de Serrano. Hoy, en su tercera generaci¨®n, cuentan con 62 puntos de venta y una pol¨ªtica de expansi¨®n internacional en mercados como M¨¦xico, Portugal o Arabia Saud¨ª. ¡°Todav¨ªa somos muy j¨®venes respecto a otras firmas internacionales¡±, asegura De Peverelli.
Han sabido conectar con nuevos p¨²blicos a trav¨¦s de colecciones especiales: como la inspirada en la artista mexicana Frida Kahlo, la reinterpretaci¨®n de amuletos o la colaboraci¨®n con el artista espa?ol Okuda San Miguel. En 2010, lanzaron la marca Aristocrazy, con un esp¨ªritu m¨¢s desenfadado.
Uno de los pilares de su dise?o es el servicio Sur Mesure, la elaboraci¨®n de piezas a medida. ¡°El resultado m¨¢s que joyas son emociones, encargos para momentos importantes: bodas, nacimientos, autorregalos, regalos para una madre¡¡±. Desde 1992 y hasta 2008 realizaron m¨¢s de 5.000 encargos de este tipo; cuando en el a?o 2018 reanudaron el servicio Sur Mesure lo hicieron con un toque m¨¢s moderno, pero con el mismo esp¨ªritu. Suarez integra las nuevas tecnolog¨ªas en el dise?o sin perder la esencia artesanal. ¡°La inteligencia artificial nos permite, por ejemplo, ganar tiempo a la hora de buscar variantes y posibles modificaciones a los dise?os, pero lo fundamental sigue siendo el savoir faire de las personas¡±, detalla la dise?adora.
Los tiempos han cambiado y el perfil de los clientes tambi¨¦n. ¡°Anta?o primaban los hombres: eran ellos quienes ven¨ªan a elegir la pieza para regalar. La mujer es hoy aut¨®noma y estamos pr¨¢cticamente a la par. Muchas se autorregalan o vienen en grupo para obsequiar una joya a una amiga¡±, cuenta De Peverelli.
Cada joya condensa sentimientos, y para lograr esta labor como orfebres emocionales cuidan todos los detalles. El proceso, en el que se involucran la dise?adora, el gem¨®logo y personal de control de calidad y el equipo 3D, puede durar entre 5 y 12 semanas, dependiendo de la dificultad de la materia prima seleccionada. La familia Su¨¢rez elige y compra personalmente las piedras, asegur¨¢ndose de que los diamantes, gemas o perlas cumplan con sus rigurosos est¨¢ndares de calidad. De hecho, un 99,5% son descartadas. ¡°En los compromisos de boda sigue reinando el diamante; en segundo lugar, el zafiro, en especial el azul, aunque tambi¨¦n gusta el rosa¡±. Entre los modelos de anillo, triunfa el cl¨¢sico en tresillo: con una piedra central y dos laterales. El neovintage y el art d¨¦co atraen a una clientela que asocia estos estilos con Suarez.
La interacci¨®n con el cliente es fundamental. ¡°Los vendedores son especialistas y desde la primera visita se vuelcan para entender los deseos del cliente¡±, afirma. En la primera visita, se recopilan las notas sobre las preferencias del cliente; en la segunda, el cliente elige entre los diferentes los bocetos. ¡°Entonces se crea un modelo a escala real con resina, especialmente ¨²til para pendientes o collares que no pueden representarse adecuadamente en papel. En esta etapa se realizan los ajustes necesarios en colaboraci¨®n con el cliente antes de proceder a la fabricaci¨®n¡±, describe De Peverelli. Si la pieza requiere un diamante o gema espec¨ªfica, el gem¨®logo de la casa busca la materia prima en bolsas internacionales. ¡°En casos complejos, como diamantes fancy de tallas o quilatajes particulares, recurrimos a nuestra red global de proveedores para localizar las mejores¡±. La sostenibilidad es crucial: ¡°Siempre hemos comprado materias naturales, nuestra casa es sostenible¡±.
Aprovecharon la gran recesi¨®n que supuso la crisis del 2008 para reinventarse. En ese momento, la empresa decidi¨® expandirse: abrieron m¨¢s de 20 puntos de venta en El Corte Ingl¨¦s, pasando de esas cinco tiendas en 2008 a m¨¢s de 70 en la actualidad. Un cambio que diversific¨® su oferta: Suarez ha ampliado sus productos. Junto a las joyas de precios elevados, conviven piezas m¨¢s accesibles, como la l¨ªnea de plata. ¡°Hemos atra¨ªdo a un p¨²blico m¨¢s variado: j¨®venes que antes no se atrev¨ªan a entrar en las tiendas¡±, confirma De Peverelli, ¡°al democratizarnos, hemos accedido a un mercado m¨¢s feroz, eso s¨ª. Aunque la piedra empleada en una pieza sea m¨¢s peque?a, los est¨¢ndares de calidad permanecen: la exigencia es la misma¡±.
Durante 2024 la casa ha cumplido 80 a?os, una trayectoria avalada no solo por la clientela, sino tambi¨¦n por los premios: en 2019, la Asociaci¨®n de la Empresa Familiar de Madrid (Adefam) distingui¨® a la familia Su¨¢rez con el reconocimiento de ¡°Familia Empresaria del A?o¡±. Espa?a es sin¨®nimo en la joyer¨ªa europea de calidad y atemporalidad, seg¨²n De Peverelli. ¡°El perfil del consumidor es similar al de mercados como Portugal o M¨¦xico: el cliente busca piezas bien elaboradas, elegantes y perdurables. Un enfoque que ha permitido que las creaciones espa?olas gocen de una gran aceptaci¨®n en mercados internacionales¡±, afirma.