As¨ª cambi¨® mi forma de consumir ropa: 11 personas cuentan su experiencia

M¨¢s ropa, m¨¢s personas consumi¨¦ndola en tiendas o a golpe e clic, pero tambi¨¦n nueva conciencia. Qui¨¦n fabric¨® la prenda que llevo puesta y en qu¨¦ condiciones o c¨®mo afecta al medioambiente lo que hago con ella (desde los micropl¨¢sticos con los que puede contaminar el agua al lavarla, hasta su destino final si quiero deshacerme de ella) son cuestiones que van resonando en la conciencia com¨²n.

Desde WGSN, la agencia que decide lo que llevaremos cada temporada, aseguraban a S Moda que ¡°el volumen de productos online que incluyen en sus descripciones las palabras ¡®sostenible, org¨¢nico, ¨¦tico o reciclado¡¯ aumentaron m¨¢s de un 44% desde julio de 2016 a octubre de 2017 en Reino Unido¡±. Ubup, una plataforma digital alemana que se dedica a la venta de ropa de segunda mano, se?alaba a Fashion United que, desde principios de 2014 a 2018, las ventas han aumentado un 566%. Y el esfuerzo de consumidores y retails por mejorar la realidad del reciclaje de prendas -solo el 1% de ellas pasan por este proceso- es notable. Un cambio al que tambi¨¦n se suma la mayor facilidad y determinaci¨®n para reclamar derechos como consumidores sobre los productos que compramos, facilitada por internet y la posibilidad de comunicarnos directamente con las marcas -?sab¨ªas que las prendas tienen hasta dos a?os de garant¨ªa si se te rompen o estropean?-. Hablamos sobre estas cuestiones con 11 personas para analizar c¨®mo entienden el consumo de ropa en 2019.

1. Vanessa MG, 31, responsable de marketing

Suelo comprar ropa mensualmente, m¨¢s por reponer (debido a uso y/o desgaste) que por ampliar ropero. Por eso opto cada vez m¨¢s por b¨¢sicos y prendas temporales, que pueda usar tanto en el trabajo como en la calle, y esto ha sido por concienciaci¨®n ante el alto nivel de consumo que he ejercido estos a?os. Grupo Inditex y Asos son mis cadenas predilectas, pero siempre ojeo las charities (tiendas de segunda mano destinadas a la beneficencia). Aunque nunca he tenido problemas a la hora de reclamar el reembolso de una prenda ya usada, no ha sido hasta hace un par de a?os cuando he empezado a ejercer ese derecho de reclamar garant¨ªas, antes no lo hac¨ªa por desconocimiento o incluso verg¨¹enza. La ropa que no utilizo la suelo ofrecer a amigas y la dono a alguna ONG, pero reconozco que de algunas prendas me cuesta deshacerme y las almaceno.

2.Miguel, 38, m¨²sico

Nunca he sido un comprador compulsivo de ropa. Antes, por mi trabajo, sol¨ªa comprar m¨¢s. Ahora lo hago un par de veces al a?o, en rebajas de verano y de invierno, y no suelo ir de compras si no tengo un evento. Invierto m¨¢s en camisetas o vaqueros y he comprado habitualmente tambi¨¦n en tiendas de segunda mano. Realmente tengo mucha ropa, la que dejo de usar la reciclo o la regalo a amigos y algunas cosas (las que m¨¢s me gustan) las almaceno. Pienso que alg¨²n otro momento las podr¨¦ utilizar.

Soy consciente de que la ropa tiene garant¨ªa, hace poco quise reclamar una chaqueta con una cremallera que, tras un invierno de uso, se rompi¨®. Pero, ?qui¨¦n guarda el ticket de compra de una chaqueta durante uno o dos a?os? Es casi imposible y las tiendas sin ese recibo no atienden a reclamaciones.

3.Ana, 29, dise?adora de productos y servicios digitales

Lo que m¨¢s ha cambiado en los ¨²ltimos a?os ha sido mi forma de buscar prendas. Miro ropa por internet y me la guardo en Pinterest para que no se me pase, as¨ª cuando tengo tiempo busco en qu¨¦ tienda tienen mi talla y me paso a verla y a prob¨¢rmela. Incluso cuando estoy en las tiendas echo mano de Pinterest para recordar qu¨¦ prenda quer¨ªa. Frecuento Mango, Cos, Zara, &Other Stories¡­ y las prendas en las que m¨¢s dinero suelo gastar son chaquetas y zapatos, porque adem¨¢s de ser prendas m¨¢s caras de por s¨ª, pienso que les voy a dar un uso m¨¢s largo en el tiempo y no me importa que cuesten m¨¢s y que sean de m¨¢s calidad. Con el resto igual, de algo que s¨¦ que se lleva pero en poco tiempo va a pasar de moda prefiero comprarme una versi¨®n m¨¢s barata. Con esa ropa que guardo durante tiempo sin usar y no s¨¦ que hacer, la llevo a un contenedor de ropa y tambi¨¦n se la ofrezco a amigas a las que creo que esa prenda en concreto le puede gustar.

4.Iratxe, 31, content strategist

He adaptado mi consumo de ropa a mi presupuesto actual porque la realidad es que los sueldos no suben demasiado y los precios s¨ª. Por otro lado, intento combatir ese ansia de tener de todo que nos han inculcado desde esta cultura del consumismo desmedido. Y no es f¨¢cil. Sobre todo en el caso de las mujeres, que tenemos mayor presi¨®n sobre la necesidad de estar guapas, ideales y a la moda. Ahora compro menos y mejor, dentro de mis posibilidades. Hay que comprar ropa que dure. La obsolescencia es el enemigo de lo sostenible. He ganado mayor conciencia del valor de las cosas, de lo que supone que a m¨ª una prenda me salga tan barata, sobre todo si en la etiqueta leo ¡®made in Bangladesh¡¯ o similares y de que una de las formas que tenemos de luchar contra el desastre ecol¨®gico en que vivimos es nuestro propio consumo. Obviamente tienen mayor responsabilidad las instituciones y empresas, pero es una de nuestras formas de activismo como ciudadanos/as, y tenemos que ser m¨¢s conscientes y responsables. Yo almaceno, reciclo, regalo, dono y revendo por Wallapop o mercadillos -este domingo hago uno en Madrid-.

Sobre nuestros derechos como?consumidores/as no estamos nada informados/as. Y parece que est¨¢ hasta mal visto reclamar. Soy partidaria de hacerlo y de insistir. El otro d¨ªa publiqu¨¦ un post en mi Facebook explicando que la ropa tambi¨¦n tiene dos a?os de garant¨ªa para que la gente que tengo lo sepa y lo difunda. Me lo coment¨® una amiga hace poco y ya lo he puesto en pr¨¢ctica y recibido una devoluci¨®n por parte de Inditex.

5.Alexandra, 25, profesora de ingl¨¦s

Cambiar de pa¨ªs ha cambiado tambi¨¦n mis h¨¢bitos de compra. Cuando viv¨ªa en Inglaterra iba m¨¢s a charities y tiendas de ropa vintage, aqu¨ª no es tan com¨²n. Al no hacerlo, gasto m¨¢s dinero porque la ropa es m¨¢s cara que en estas tiendas y porque all¨ª era estudiante y en Espa?a he empezado a trabajar, tengo m¨¢s para gastar y as¨ª lo hago. Voy de compras entre dos y tres veces al mes, pero esto var¨ªa de si, por ejemplo, es cambio de temporada. Zara, Mango, H&M, Pull&Bear, Bershka y Lefties son mis habituales y suelo ir presencialmente, rara vez hago compras online. En parte, porque lo hago como algo no planeado, simplemente estoy en la calle? y entro a tiendas. Una vez al a?o intento vender esa ropa que no me pongo en apps como Wallapop, pero a menudo sin ¨¦xito, as¨ª que al final acabo d¨¢ndosela a amigas y tambi¨¦n les doy una segunda vida llev¨¢ndola a charities o a contenedores de reciclaje de ropa.

6. Alicia, 60, realizadora de televisi¨®n

Mi relaci¨®n con la adquisici¨®n de ropa es compulsiva selectiva, compro todas las semanas. Me muevo por Cos, &Other Stories, Zara tambi¨¦n¡­ Gasto m¨¢s en abrigos, pantalones (me gusta un buen pantal¨®n), pero, sobre todo, en chaquetas y zapatos. Lo hago tanto presencial como online. A lo largo de los a?os he cambiado, ahora compro cosas de m¨¢s calidad y de m¨¢s dise?o y el proceso dir¨ªa que ha sido a trav¨¦s de la edad. La suelo almacenar, a veces reciclo, pero son contadas ocasiones, le tengo mucho cari?o a las prendas.

7.?Adriana, 41, ayudante de direcci¨®n de cine y bloguera de belleza

Ya no compro de manera compulsiva como hac¨ªa hace unos a?os. Me par¨¦ a pensar por qu¨¦ ten¨ªa tanta ropa que no me daba tiempo a usar y que, adem¨¢s, no me cab¨ªa en el armario (ten¨ªa dos armarios empotrados gigantes llenos: he llegado a tener 10 abrigos y unos 40 pares de zapatos). Ahora veo todo de una manera m¨¢s consciente y respetuosa con el medioambiente. No necesitamos tanta ropa. A la hora de invertir lo hago por igual en todo tipo de prendas porque prefiero calidad a cantidad. Aunque si tengo que elegir, dir¨ªa que en los zapatos es en lo que m¨¢s gasto, que intento adem¨¢s que sean hechos en Espa?a. Cuando voy de compras es, por lo general, algo premeditado. Hago armario c¨¢psula por lo que todo lo que compro est¨¢ muy pensado. Mi regla b¨¢sica es que todo en mi armario combine entre s¨ª. No almaceno nada que no me ponga.

8.?Daniel, 28, publicista

Dir¨ªa que mi forma de consumir ropa es algo as¨ª como compulsiva. Compro cada mes y si quiero algo en pocos d¨ªas lo tengo (en alg¨²n caso, con algo muy concreto, me echa para atr¨¢s el precio).? Suelo acudir a Asos, Pull and Bear, Zara, H&M y tiendas de segunda mano o vintage. Mi forma de comprar ha variado mucho en estos ¨²ltimos a?os. Sobre todo con las tiendas online, soy premium en Asos, la amplia variedad de precios y prendas, junto con la rapidez de tenerlo (al d¨ªa siguiente) y de devoluci¨®n econ¨®mica (con reembolso a los 10 d¨ªas tope), hacen que en muchas ocasiones mirar la app o la web de Asos sea como hacer scroll en mis redes sociales, miro a ver qu¨¦ hay, qu¨¦ se mueve.

9. Luc¨ªa, 29, dise?adora de moda

Ya no suelo ir de compras, estoy dej¨¢ndolo a un lado. Aunque ahora mismo, que estoy perdiendo peso, compro m¨¢s frecuentemente, normalmente lo hago cada 3 o 4 meses y casi todo online. No compro en tienda a no ser que sea muy espec¨ªfico, que lo quiera para ese d¨ªa o si, por ejemplo, necesito unas zapatillas de deporte y quiero que alguien me cuente algo m¨¢s t¨¦cnico sobre ellas. El cambio ha sido grande (antes bajaba al centro o iba de tiendas casi todos los s¨¢bados) y lo ha motivado todo lo que tiene que ver con el cambio clim¨¢tico. Se est¨¢ haciendo un derroche muy fuerte del consumo de ropa, no nos damos cuenta de que cada vez que haces una camiseta se derrocha much¨ªsimo y es muy malo para el medioambiente. Estoy aplic¨¢ndome un consumo m¨¢s consciente y eligiendo prendas m¨¢s duraderas en vez de comprar tanto ready to wear. En vez de una camiseta de cinco euros que antes compraba y me duraba una temporada, ahora prefiero gastarme 50 en una y que me dure siete. Tambi¨¦n lo hago por mi bolsillo.

10. Bel¨¦n, 44, profesora de yoga

Ha cambiado la sociedad, he cambiado yo y, en consecuencia, mi forma de relacionarme y consumir ropa. Antes trabajaba en el mundo de la moda, como escaparatista y en tiendas, y mi forma de consumo estaba muy supeditada al contacto que yo ten¨ªa con esas prendas y acababa consumiendo mucho en ellas. Cuando sal¨ª de ese entorno tuve una ¨¦poca de crisis econ¨®mica en la que me centr¨¦ m¨¢s en la ropa de segunda mano, mercadillos, rastros, etc, e incluso me dio por el no consumo en multinacionales. Actualmente lo que hago es usar internet para buscar ideas pero no suelo comprar online. Algo que tambi¨¦n ha influido es que mi pareja tiene una tienda de ropa y casi el 90% de la ropa que me pongo me la compra ¨¦l, sobre todo lo que es m¨¢s tendencia. Para b¨¢sicos y alguna cosa suelta, compro en rebajas.

11. Alberto, 37, investigador universitario

Compro ropa cuando tengo algo que est¨¢ completamente roto, por necesidad de una prenda o de cara a un evento (congreso, boda¡­) y m¨¢s por temporadas y ofertas. Suelo acudir a cadenas tipo Zara y Pull&Bear y para b¨¢sicos, H&M. Ahora que tengo m¨¢s poder adquisitivo, intento hacer un consumo m¨¢s responsable comprando m¨¢s en firmas peque?as como la de camisas Brava Fabrics, que apuestan por un comercio justo. Suelo hacerlo online desde que empez¨® a ser posible porque no me gusta ir a las tiendas, pero para cosas espec¨ªficas como zapatos o jers¨¦is s¨ª prefiero ir in situ y prob¨¢rmelos, comprobar el tejido.