?D¨®nde est¨¢ el bolso Birkin de Jane Birkin? Una subasta, una coleccionista y un precio secreto, las claves del misterio

?No es un bolso. ?Es un Birkin!?. Esta frase forma ya parte de la cultura popular al ser la que en Sexo en Nueva York le espeta una dependienta de Herm¨¨s al personaje al que daba vida Kim Cattrall, que no comprend¨ªa lo complicado que es hacerse con el que posiblemente es el modelo m¨¢s codiciado y miserioso de la moda. El uso del adjetivo ¡°misterioso¡± no es casualidad: en su historia hay tantos rumores como mitos. Su comentad¨ªsima lista de espera, un tema del que la marca se niega a hablar (consciente, posiblemente, del poder de una rumorolog¨ªa tan fantasiosa), se debe a que el ritmo de producci¨®n no alcanza la demanda. Quien s¨ª se esforz¨® en aclarar la realidad fue Michael Tonello, que en 2009 escribi¨® Bringing home the Birkin, un libro en el que asegura que tan s¨®lo necesit¨® tres meses para hacerse con 130 piezas del modelo.

Pese a las palabras de Tonello, la fascinaci¨®n por los Birkin no ha hecho m¨¢s que crecer, especialmente gracias a las plataformas de reventa. Vestiaire Collective se?ala que las b¨²squedas del Birkin de Herm¨¨s crecieron el a?o pasado un 20% de media en comparaci¨®n con las que datan de 2021. ¡°Desde principios de 2022, las ventas de bolsos de Herm¨¨s han registrado un incremento del 15% respecto al mismo periodo del a?o pasado. En enero de 2022, se registr¨® la m¨¢xima subida, que alcanz¨® un 40% en comparaci¨®n con el a?o anterior¡±, se?alan.

¡°Por un lado, nos encontramos con la leyenda de inaccesibilidad que hay alrededor de ellos, y lo cierto es que cada vez es m¨¢s dif¨ªcil conseguirlos. Eso hace que la gente los desee m¨¢s. Cuando vas a una tienda de Herm¨¦s a comprar un bolso, la firma quiere que conozcas su tradici¨®n, su historia, su calidad y todo lo que hay detr¨¢s de la marca. Su deseo es que tengas una experiencia con la firma y que conozcas sus productos. De hecho, si compras otras cosas, a lo mejor puedes tener m¨¢s posibilidades de comprar un Birkin¡­ Por eso quieren que la gente se acerque a la marca, pues son quienes deciden si eres ¡°digno de tener un bolso Herm¨¨s¡±. Quiz¨¢s tengas que ir entre tres y cuatro veces para lograr uno. Sin duda, es un s¨ªmbolo de estatus¡±, asegura Virginia Iba?ez Dionisio, fundadora de La Agencia Secreta, que naci¨® para buscar, encontrar y comprar objetos de marcas de lujo.

Aunque todos saben la historia del nacimiento del popular bolso, creado en honor de Jane Birkin, que cuando coincidi¨® en un vuelo de Par¨ªs a Londres con el que entonces era due?o de Herm¨¨s, Jean-Louis Dumas, le asegur¨® que jam¨¢s hab¨ªa encontrado su bolso so?ado. En 1937, tres a?os despu¨¦s de la informal charla, naci¨® el dise?o m¨¢s popular de la moda. Lo que muchos menos saben es qui¨¦n tiene ese bolso. Se trata de Catherine Benier, reconocida coleccionista y amante de dise?os vintage de Herm¨¨s y Chanel y propietaria de codiciadas piezas de colecci¨®n y de parte de los archivos de las anteriormente mencionadas firmas de moda francesas. Catherine B (as¨ª se la conoce) es la due?a de Les 3 Marches, una peque?a boutique parisina que las expertas en moda visitan como si fuera un aut¨¦ntico templo fashionista y al que celebridades de la talla de Cameron Diaz acuden para saciar sus deseos m¨¢s sibaritas.

Hace 23 a?os que posee el Birkin y se niega categ¨®ricamente a decir cu¨¢nto pag¨® por ¨¦l en la que fue la segunda subasta que el dise?o ha vivido, pues en 1994 fue la propia Jane Birkin la que lo subast¨® para recaudar dinero para una organizaci¨®n ben¨¦fica contra el SIDA. ¡°Nadie supo ad¨®nde hab¨ªa ido desde entonces y nunca imagin¨¦ que volver¨ªa a salir a subasta¡±, explica en una entrevista publicada en la web de subastas Christie¡¯s. ¡°En el a?o 2000, una amiga de una casa de subastas de Par¨ªs me dijo que ten¨ªa algo que necesitaba ver. Cuando fui, sac¨® un bolso de una caja fuerte. Era el que hab¨ªa visto mil veces en fotograf¨ªas en el brazo de Jane Birkin. Supe que ten¨ªa que ser m¨ªo¡±, confiesa. ¡°Cuando lo consegu¨ª, lo primero que me pregunt¨¦ fue c¨®mo iba a pagarlo¡­ Pero ya hab¨ªa vendido algunas otras piezas para poder comprarlo¡±, dijo con orgullo. ?Siempre me han gustado las cosas viejas que cuenten una historia?, a?adi¨®.

Entonces asegur¨® que jam¨¢s lo vender¨ªa, pero, ante la pregunta de si alguna vez lo har¨ªa, ha respondido recientemente a la cuenta de Instagram STYLE NOT COM un enigm¨¢tico ¡°?Qui¨¦n sabe?¡±. En alguna ocasi¨®n se ha esforzado en se?alar que cuando consigui¨® el bolso, su intenci¨®n jam¨¢s fue lucrarse con su reventa al ser ¡°parte de la historia de la moda y el dise?o¡±. De hecho, le entristece sobremanera que tanta gente adquiera piezas de lujo teniendo en mente la reinventa, pues cree que una inversi¨®n de cualquier tipo, sin pasi¨®n, carece de futuro. En su propia tienda se asegura de que sus adquisiciones y ventas se gu¨ªen por lo que su coraz¨®n dicta, y no por el bolsillo, llegando incluso a haber rechazado piezas que sab¨ªa que se vender¨ªan, pero en las que no cre¨ªa.

Su ¡°?Qui¨¦n sabe¡±? nos hace preguntarnos qu¨¦ precio podr¨ªa alcanzar el bolso. La revista Time asegur¨® hace a?os que el bolso Birkin era una mejor inversi¨®n que el oro. Si tenemos en cuenta que uno de los tres bolsos originales se vendi¨® por m¨¢s de 110.000 euros en 2013, ?imaginad su precio 10 a?os despu¨¦s! Par¨¢metros a tener en cuenta: Herm¨¨s es un s¨ªmbolo del lujo, y su due?a, un icono. Por si fuera poco, sumamos su historia y la rareza. La fama del bolso Birkin ha superado a la de la actriz, Jane¡±, explica Arnaud Maillard, experto en ropa vintage.

La gente de a pie ha podido ver de cerca el Birkin original en 2020 en el londinense Victoria and Albert Museum, en el que la pieza fue el epicentro de la exposici¨®n? Bags: Inside Out. Anteriormente, estuvo expuesto en el MoMA. La propia Catherine ha explicado a STYLE NOT COM cu¨¢l es el estado del bolso. ¡°Cuando me hice con ¨¦l, estaba en unas condiciones muy aceptables, teniendo en cuenta la forma en la que Jane usaba sus bolsos. El dise?o fue creado para vivir y viajar con ella, y eso es lo que ha hecho. Ni lo he tocado, ni lo he modificado en absoluto. Incluso he dejado su cortau?as dentro¡±, ha asegurado Catherine B, que se?ala que al ser considerado una pieza de museo, ha sido tratado y guardado como tal.

En su perfil de Instagram, no dud¨® en colgar una imagen del bolso, cansada de que llegaran a sus o¨ªdos tantas historias, ¡°cada una m¨¢s exc¨¦ntrica que la anterior¡±, sobre el bolso. ¡°Me limito a poner aqu¨ª el Birkin original en una caja negra, las iniciales J.B. y el cifrado con la letra O que data del a?o 1985¡±, escribi¨® junto a la fotograf¨ªa.

?Sabremos alg¨²n d¨ªa d¨®nde se encuentra el primer Birkin? ?Terminar¨¢ por subastarlo? ?Maillard no lo cree as¨ª. ¡°Conoci¨¦ndola, s¨¦ que ella no querr¨¢ desprenderse del modelo original. Pienso que su hija heredar¨¢ este tesoro lleno de historias y emociones¡±, asegura. Algo que de ser cierto, habr¨ªa horrorizado a la propia Birkin, que asegur¨® que tener un Birkin de su madre le parecer¨ªa algo horrible, motivo por el cual su hija Lou nunca tuvo uno.