Miranda July, el feminismo en tiempos de Internet

Sus ojos, azul¨ªsimos, parecen radiografiar todo lo que observa. Esa curiosidad casi infantil aunque para nada ingenua ha llevado a Miranda July a hacer discos, relatos breves, performances y pel¨ªculas con la misma naturalidad con la que en su novela de debut, El primer hombre malo (Literatura Random House), habla de fantas¨ªas sexuales, maternidad y soledad. La Riot Grrrl (movimiento de punk underground feminista de los 90) dejo? Portland hace tiempo y vive en Los ?ngeles con su marido, el cineasta indie Mike Mills, y su hijo Hopper, de tres a?os. Pero, asegura, sigue en la lucha.

?Escribir una novela era lo que le quedaba por hacer?

Se? que desde fuera mi carrera puede parecer compleja, porque trabajo en diferentes medios, pero en cada uno de ellos hago lo t¨ªpico: empec¨¦ con los cortos, luego rod¨¦ un largometraje; escrib¨ªa relatos y eso me ha llevado a una novela. Me lo tome? como un desaf¨ªo.

?El proceso fue muy diferente al de crear relatos?

Con las historias cortas soy muy r¨¢pida. Las hago en dos d¨ªas, no reescribo. Pens¨¦ que iba a ser igual con la novela. Y no. He perdido la cuenta de los borradores¡­ Empec¨¦ a trabajar en ella durante el embarazo y escrib¨ªa como un robot. La gente te dice que te hace sentir m¨¢s creativa, pero para mi? no fue as¨ª; era como si toda la sangre se concentrara en mi ¨²tero. El nacimiento de Hopper fue la experiencia m¨¢s intensa que he vivido. La inspiraci¨®n vino despu¨¦s de tener a mi hijo.

El libro no es nada c¨¢ndido. Habla de fantas¨ªas sexuales, violencia ¨Cconsentida¨C entre mujeres¡­

No estoy interesada en la violencia, pero Cheryl es un personaje introvertido, y necesitaba que algo la removiera. La parte de las fantas¨ªas sexuales si? es uno de mis intereses, fue una delicia desarrollarla. Cheryl se mete en el cuerpo de un hombre cuando se imagina teniendo sexo, pero no es un libro sobre ser transexual.

?Y sobre el concepto de g¨¦nero fluido?

Yo no soy qui¨¦n para decir que? esta? bien o mal, pero personalmente me siento muy pro g¨¦nero fluido. El libro es m¨¢s un descubrimiento de la sexualidad que te puede llevar hasta ah¨ª.

La soledad es un tema recurrente en sus trabajos.

Siento que tengo un gusto por ella que es previo a Internet, pero que ha encontrado una especie de hogar en la Red. La web hace peor la soledad y a la vez es un ant¨ªdoto.

?A que? ha dado paso la novela?

Preparo un proyecto para que las mujeres no se sientan mal por hacerse mayores. Tengo 41 a?os y quiero contribuir a que se hable de ello. Tambi¨¦n voy a desarrollar algo con Art Angel en Londres. Y quiero hacer otra pel¨ªcula. Me interesan muchas cosas.

Ha colaborado con Miu Miu para crear una aplicaci¨®n, Somebody, y Welcome Companions creo? un bolso con su nombre. ?C¨®mo es su relaci¨®n con la moda?

Siempre he amado la ropa. Me encanta acabar con los dedos sucios de rebuscar en tiendas vintage o admirar esos trajes car¨ªsimos que no puedo comprar. Es como ver arte; te puede influir aunque no lo tengas en casa. Soy amiga de muchos dise?adores, como Rodarte, y mantenemos una relaci¨®n de apoyo mutuo. Me gusta porque es una forma de expresi¨®n que no oculta que es comercial.

Entre sus amistades tambi¨¦n figuran j¨®venes feministas, como Lena Dunham y Tavi Gevinson, que reivindican su influencia.

Son fant¨¢sticas. Internet es una herramienta incre¨ªble para el feminismo. Todas esas mujeres que antes se sent¨ªan aisladas ahora pueden encontrarse. Lo bonito es que si influyes en otra persona tambi¨¦n aprendes de ella.

Dunham acaba de lanzar Lenny Letter, con una entrevista a Hillary Clinton. ?Es una mujer presidenta de los EE UU el siguiente paso para el feminismo?

Lena apoya a Hillary. Yo soy un poco m¨¢s esc¨¦ptica, pero ella es convincente. Ser¨ªa muy interesante tener una presidenta.

?Sigue siendo una Riot Grrrl?

Carrie Brownstein, de Sleater-Kinney, es una de las pocas personas con las que puedo hablar de esa ¨¦poca. El otro d¨ªa ¨ªbamos a los Emmy [Brownstein hace Portlandia] y nos re¨ªamos al vernos maquilladas, con taconazos¡­ Siempre hablamos de qui¨¦nes somos, c¨®mo hemos evolucionado y c¨®mo seguimos luchando.

?Cu¨¢les son los logros pendientes para la mujer?

En mi pa¨ªs es b¨¢sico que podamos decidir sobre nuestros derechos reproductivos. Tambi¨¦n me preocupa la brecha salarial, que no permite a las mujeres acceder a los puestos de poder. Los hombres tienen que involucrarse con un papel protagonista en la crianza.

?En su casa lo han conseguido?

La mayor parte del tiempo nos arreglamos bien. La familia ayuda. Para mi? lo m¨¢s duro es que cuando mi marido hace una pel¨ªcula nadie le pregunta qui¨¦n se esta? ocupando del ni?o. Pero cuando yo hablo de rodar lo primero que me dicen es: ??Que? vas a hacer con Hopper??. No es que no me guste; lo que quiero es que se lo digan a ¨¦l tambi¨¦n.