?Qui¨¦n se queda con la custodia de Balenciaga? La fascinante tensi¨®n entre Kanye y Kim por el favor de una marca
Parece claro que, por el momento, ninguno de ellos quieren estar el mismo lugar a la vez, lo que complica el negocio (y la imagen) de ambos.
Chaney Jones, la actual pareja de Ye, el artista antes conocido como Kanye West, solo tiene dos im¨¢genes en su Instagram. En la primera, de hace cinco semanas, luce un ba?ador color nude, el color favorito del rapero, que bien podr¨ªa pertenecer a Skims, la marca de su ex mujer, Kim Kardashian. En la segunda, la modelo lleva, aunque no est¨¢n etiquetadas, las ya virales gafas pantalla de Balenciaga. ?The Kanye Effect¡±, reza uno de los comentarios a la publicaci¨®n, refiri¨¦ndose, por un lado, a la obsesi¨®n del rapero por vestir a sus parejas y convertirlas en clones, como ya ocurri¨® con Julia Fox y, antes que con Kardashian, con Amber Rose; y, por el otro, aludiendo a la otra gran obsesi¨®n del rapero: vestirlas de Balenciaga.
De hecho, la primera imagen p¨²blica de Jones y West, el pasado febrero, muestra a ambos yendo a una tienda de la marca. Quiz¨¢ para crearle un nuevo fondo de armario como primer paso en su relaci¨®n. Algo que ya hizo con Kim en aquel m¨ªtico cap¨ªtulo del reality familiar, Keeping up with the Kardashians cuando fue tirando, uno a uno y en prime time, los ¡®modelitos¡¯ de la celebrity, aunque por aquel entonces, en 2012, Demna, el dise?ador antes conocido como Demna Gvasalia, no hab¨ªa entrado en sus vidas. S¨ª, y hasta la cocina, hab¨ªa entrado Riccardo Tisci. El dise?ador le cre¨® en 2011 toda la est¨¦tica para el ¨¢lbum que sac¨® junto a Jay Z en 2011, Watch the throne, y fue el primero en sentar a la pareja en el front row de sus desfiles en Givenchy. De aquellas, muchas firmas consideraban que ambos no representaban la est¨¦tica lujosa y exclusiva que quer¨ªan comunicar, as¨ª que ellos, mundialmente famosos, se dedicaban a publicitar, casi en exclusiva, las creaciones del modista italiano.
Hasta que lleg¨® Demna. Todav¨ªa no hab¨ªa cogido las riendas de Balenciaga, pero ya era famoso en c¨ªrculos minoritarios por la irreverencia que mostraba con su marca, Vetements, que mont¨® junto a su hermano Guram. Fue Kanye el que se acerc¨® al georgiano para mostrarle su admiraci¨®n, que aireaba en sus apariciones p¨²blicas, siempre con ropa de la marca, o?entrevistas como la que concedi¨® a Vanity Fair en 2014, en la que lo defin¨ªa como el?¡°n¨²mero 1¡±. Pocos meses antes de que Balenciaga apostara por ¨¦l, Kanye ya lo hab¨ªa hecho: Demna fue el encargado de dise?ar las primeras Yeezy, las famos¨ªsimas zapatillas que el rapero dise?a junto a Adidas desde 2015. ?Justo ayer, 25 de mayo, lanzaban su segunda colaboraci¨®n conjunta junto a GAP, Yeezy x Gap Engineered by Balenciaga; la ¨²nica concesi¨®n que Demna ha hecho a la moda ¡®accesible¡¯ (las prendas no superan los 400 d¨®lares). ¡°Poca gente entiende tan bien mi trabajo. Ye me hace ser mejor dise?ador. No hay problemas de ego cuando trabajamos juntos¡±, contaba el dise?ador en una entrevista reciente a prop¨®sito de otra de sus muchas colaboraciones: Donda, el ¨²ltimo trabajo del rapero, en el que Demna se encarg¨® de toda la est¨¦tica.
Fue precisamente en uno de los tres eventos de presentaci¨®n de Donda en Atlanta donde Kim Kardashian, ya separada de West, apareci¨® con el vestido de novia de la primera (y hasta ahora ¨²nica) colecci¨®n de alta costura de Balenciaga. Un mes despu¨¦s, aparec¨ªa en la gala del MET luciendo un vestido de la marca, pasamonta?as incluido, que funcionaba como una met¨¢fora del falso anonimato en tiempos de Instagram, y que West ya llevaba tiempo utilizando como nueva prenda viral favorita: de hecho, se sent¨® en el front row de aquel exclusivo desfile de costura con la cara absolutamente tapada.
En febrero de este a?o, se desvelaba el que ya era un secreto a voces: Kim es la imagen de la nueva campa?a de Balenciaga. En las im¨¢genes, luce uno de los ajustad¨ªsimos monos de colores que la celebrity no se ha quitado en todo el invierno. Porque la estrategia que una a la firma francesa con?Kardashian va mucho m¨¢s all¨¢ de la de ser mera embajadora: En los ¨²ltimos meses, el Instagram de la marca se ha borrado varias veces para publicitar, ¨²nicamente, productos que ha llevado Kim en sus distintas apariciones p¨²blicas, de los monos ajustados a las gafas de pantalla extragrande o los leggings-bota. Productos que, adem¨¢s, no suelen estar a la venta en la tienda online de la firma y solo se pueden adquirir por encargo. Se podr¨ªa decir, incluso, que Balenciaga ha reinventado las din¨¢micas habituales que unen a la moda con el entretenimiento y lo ha hecho, en este ¨²ltimo a?o, utilizando a Kardashian como mediadiora entre la viralidad y el negocio. Esa estrategia, la de moldear, literalmente, a la celebrity con una est¨¦tica pensada ¨²nicamente para redes sociales, culmin¨® el pasado febrero, cuando Kim apareci¨® en el desfile de la marca ataviada con un mono hecho a base de cinta aislante. Por supuesto, tanto ella como la firma compartieron el doloroso making of; tard¨® dos horas en enroll¨¢rsela al cuerpo y otras tantas en desenroll¨¢rsela.
Pero la separaci¨®n m¨¢s medi¨¢tica de los ¨²ltimos tiempos comenz¨® a enturbiarse en los ¨²ltimos meses, con Ye aireando trapos sucios a trav¨¦s de su cuenta de Instagram y Pete Davidson, actual pareja de Kardashian, contestando al rapero en prime time. Trat¨¢ndose de ambos, la cuesti¨®n no solo pasa por repartirse ganancias y propiedades, tambi¨¦n por ver qui¨¦n se queda con los patrocinios en un d¨²o donde ¨¦l era el gestor y ella la imagen.
En el paseo por las pasarelas que protagoniz¨® Ye el pasado enero junto a su entonces pareja, la actriz Julia Fox, apenas vistieron Balenciaga. Parec¨ªa que el rapero ten¨ªa una nueva obsesi¨®n: Glenn Martens, director creativo de Diesel. Es m¨¢s, ambos protagonizaron un reportaje en la revista Interview, ¡®date night¡¯, que escenificada su primera cita, vistiendo casi ¨²nicamente prendas de la marca. El domingo, sin embargo, volv¨ªa a sentarse en front row del desfile que Balenciaga organiz¨® en Nueva York llevando las prendas de su nueva colecci¨®n junto a Gap y Demna.
Quiz¨¢ Ye aprovech¨® el hecho de que su ex se encontraba en Portofino asistiendo a la boda de su hermana Kourtney y Travis Barker, un enlace que, como cuenta Business of fashion, estuvo pr¨¢cticamente sponsorizado por Dolce & Gabbana. Toda la familia visti¨® en los distintos d¨ªas trajes del d¨²o italiano y hasta los barcos que llevaban a los invitados a la ceremonia estaban ¡®vestidos¡¯ con la l¨ªnea de hogar de la firma. Curiosamente, Kim, que tambi¨¦n visti¨® de la marca, no ha subido nada a sus redes sociales. Quiz¨¢ porque, adem¨¢s de a Skims, su marca propia, su muro se debe a Balenciaga. De hecho, los looks que se han podido ver de la celebrity tienen m¨¢s que ver con la identidad est¨¦tica de esta que con la de Dolce & Gabbana: un mono ajustado negro bajo un cors¨¦ de pedrer¨ªa y un ?top con una mallas con bota incluida, una de las prendas m¨¢s reconocibles de la firma francesa. Kim no hab¨ªa sido imagen de una marca de lujo desde 2014, cuando protagoniz¨® la de Balmain junto a Kanye. De hecho, la de Balenciaga es la ¨²nica gran publicidad de moda que protagoniza ella sola (la de Calvin Klein la hizo junto a sus hermanas y la de Alexander Wang tambi¨¦n junto a su exmarido). Teniendo en cuenta, adem¨¢s, que en ¨²ltimo a?o su imagen ha estado ligada a las mallas, tops y prendas ajustadas de su marca, Skims, y de la firma comandada por Demna, es complicado que d¨¦ un giro a su estilo buscando apoyo en otra firma. Kanye por su parte, sigue trabajando con Demna en colaboraciones que abarcan desde videoclips hasta colecciones c¨¢psula. Pero parece que, por el momento, ellos no quieren estar el mismo lugar a la vez, lo que complica el negocio (y la imagen) de ambos.
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