¡®Raffles¡¯: lo ¨²ltimo en moda son t¨®mbolas sin premio (si ganas puedes comprar)
Nike o Adidas se colocan a la avanzadilla de nuevas t¨¦cnicas de marketing para generar deseo: la exclusividad de la edici¨®n limitada ya no basta con poder pagarla, el azar determinar¨¢ si tienes acceso (o no) al producto.
Hasta el momento, la din¨¢mica imperante en el mundo de la moda a prop¨®sito de las prendas y accesorios m¨¢s buscados tiene forma de lista de espera. La marca de b¨¢sicos Everlane es experta en generar inter¨¦s sin propon¨¦rselo siquiera. A principios de a?o m¨¢s de 12.000 fieles clientas aguardaron pacientemente a que repusieran sus ¨²ltimos pantalones superventas y m¨¢s de 30.000 se alistaron para hacerse con uno de sus conjuntos de sencilla lencer¨ªa de algod¨®n org¨¢nico adaptable a todas las siluetas. El ¨²ltimo antojo en este sentido lo firma, sin embargo, la inglesa Kitri, cuyo modelo m¨¢s buscado, un sencillo vestido camisero en color verde, gener¨® recientemente una demanda de ochocientas personas en menos de una semana. Tambi¨¦n Reformation, cuya propuesta estrella de su segunda l¨ªnea de jeans presentada este 2018 lleg¨® a acumular m¨¢s de tres mil peticiones nada m¨¢s salir a la venta. Piezas, todas ellas asequibles, pero tan ansiadas como las zapatillas m¨¢s virales y raras de encontrar del momento. En este caso, y sirvan como ejemplo, las codiciad¨ªsimas Triple S de Balenciaga, para las que tambi¨¦n viene sirviendo esta metodolog¨ªa (apuntarte a un lista de correo electr¨®nico y que te avisen cuando el producto vuelve a estar disponible o llamar como un loco a todas las tiendas que puedas e intentar hacer una reserva).
Hace unos d¨ªas se anunciaba la pr¨®xima colaboraci¨®n de H&M y la imperante necesidad de hacerse con una de las propuestas de Moschino para la ic¨®nica casa italiana en versi¨®n barata ya se palpa en el ambiente. Las dos ¨²ltimas colecciones de la marca no suscitaron seguramente la expectaci¨®n de aquellas primeras contribuciones a democratizar la moda de lujo que ten¨ªan a la gente haciendo noche en la calle y requer¨ªan organizarse a base de accesos controlados y por turnos ¨Cpas¨® con Jimmy Choo o con Versace¨C, a pesar de no existir garant¨ªa ninguna de poder conseguir nada de lo deseado, pero lo de Jeremy Scott podr¨ªa hacer que volvamos a las andadas. Algo que ve¨ªamos recientemente a prop¨®sito de colaboraciones como la de Louis Vuitton y Supreme, esa marca cuyo ¨¦xito se basa en incubar colecciones c¨¢psula de tirada limitad¨ªsima y cuya filosof¨ªa aboga por hacer que quieras algo que los dem¨¢s no tienen, independientemente de lo que sea, solamente porque es casi imposible de conseguir. En su tienda insignia de Singapur, por ejemplo, la gente hizo cola durante d¨ªas solo para hacerse aleatoriamente con un n¨²mero que les permitiera entrar en el establecimiento y optar as¨ª a adquirir cualquier cosa de la colecci¨®n (una escena que se repiti¨® en las contadas tiendas itinerantes que la firma reparti¨® por el globo). Un sistema, el de los raffles, o lo que es lo mismo: sorteos f¨ªsicos o virtuales en los que ganas la posibilidad de tener opci¨®n a comprar un producto determinado, que actualmente domina la divisi¨®n m¨¢s caprichosa de la moda ¨Cla de las zapatillas deportivas¨C aunque tiene pinta de imponerse a la larga en todos los frentes. Y eso es algo que vio enseguida un reducto del dise?o como la recientemente desaparecida Colette (sin ir m¨¢s lejos, al tiempo de sacar la colecci¨®n de Pharrell Williams para Chanel).
En este sentido, tanto Adidas como Nike van un paso por delante y cuentan con una aplicaci¨®n propia con la que estar permanentemente al d¨ªa de sus lanzamientos m¨¢s esperados ¨Cde las ¨²ltimas reinterpretaciones de modelos cl¨¢sicos por parte de Off-White a las nuevas Yeezy¨C. Una din¨¢mica que funciona en forma de calendario a base de recordatorios y notificaciones para darle m¨¢xima emoci¨®n al asunto. La mayor¨ªa de estas tiradas, o por lo menos las m¨¢s exclusivas, te obligan a inscribirte en una suerte de t¨®mbola que dura un tiempo superlimitado y de la que sales victorioso o no en funci¨®n de la suerte, una mec¨¢nica pensada para soportar la alt¨ªsima demanda que existe en estos casos y que no hace sino contribuir a poner el evidencia lo restrictivo y excepcional de cada adquisici¨®n. Igual que en el resto de puntos de venta offline y online entregados a negocios de este tipo. En Espa?a operan as¨ª tiendas como Si vas Descalzo o Nigra Mercato. Ambas tienen perfectamente integrado este sistema de registro y rifa -acotada normalmente a una participaci¨®n por persona, con derecho a un solo par cada vez- que multiplica por mil cualquier aspiraci¨®n de tener lo que solo los m¨¢s afortunados son capaces de alcanzar.
Ser¨¢ que si la industria va hacia un modelo de colecciones cada vez menos accesibles para todo el mundo una buena manera de crear el m¨¢ximo deseo posible es hacer que el proceso de compra -de entrada, cu¨¢nto m¨¢s incierto m¨¢s excitante- importe tanto o m¨¢s que lo que se est¨¢ comprando.
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