Vuelven las merceditas y en esta zapater¨ªa espa?ola de toda la vida cuestan 13 euros

Cuando la influencer alemana Veronika Heilbrunner se plant¨® en el ¨²ltimo desfile de Miu Miu luciendo unas merceditas rojas de terciopelo con tiras cruzadas qued¨® claro que, una primavera m¨¢s, el calzado m¨¢s infantil del zapatero volver¨ªa a estar de moda. No solo lo confirmaron otras asistentes a las fashion weeks, tambi¨¦n las versiones que las firmas del momento han hecho de este tipo de zapato. La marca angelina D?en combina las suyas, tambi¨¦n de terciopelo, con sus famosos vestidos a lo La Casa de la pradera;?la parisina Carel ha hecho de los modelos con m¨²ltiples tiras su se?a de identidad; y la neoyorquina P¨ºche, que no deja de ganar protagonismo en las cuentas de prescriptoras como Blanca Mir¨®, ha convertido las cl¨¢sicas negras en ep¨ªtome de lo cool.

En nuestro pa¨ªs es una firma de toda la vida la que lleva d¨¦cadas defendiendo este modelo bautizado as¨ª en honor al diminutivo con el que era conocida Mar¨ªa de las Mercedes de Orleans, reina consorte de Espa?a al casarse con su primo Alfondo XII. La zapater¨ªa Calzados Lobo, que tiene tienda f¨ªsica en la castiza Calle Toledo de Madrid y tambi¨¦n en Valladolid, A Coru?a y Tenerife, adem¨¢s de por sus alpargatas y zapatos tradicionales hechos en Espa?a, se ha hecho famosa por sus merceditas de terciopelo con punta redonda y hebilla. Tambi¨¦n a la venta online, esta versi¨®n resulta ganadora por varios motivos: es Made in Spain, est¨¢ disponible en catorce colores y en una amplia variedad de n¨²meros ¨Cincluso en tallaje infantil¨C y tiene un precio muy econ¨®mico. Mientras los modelos de las firmas de culto citadas unas l¨ªneas m¨¢s arriba se mueven en una horquilla que va de los 80 a los 300 euros, las merceditas de Calzados Lobo cuestan entre 13 y 14 euros dependiendo del n¨²mero. ?Un motivo m¨¢s? Fundada en 1897 por Timoteo Lobo, esta zapater¨ªa a¨²n mantiene su decoraci¨®n intacta convirti¨¦ndose en uno de esos comercios de toda la vida que merece la pena apoyar, m¨¢s a¨²n en estos tiempos de incertidumbre econ¨®mica para los peque?os negocios dedicados a la moda.

Asociadas a la infancia y los uniformes escolares, estos zapatos tambi¨¦n son conocidos en ingl¨¦s como Mary Jane, gracias a las merceditas de charol negro popularizadas por la protagonista hom¨®nima de la tira c¨®mica Buster Brown, publicada en 1902 por The New York Herald. El ¨¦xito de la publicaci¨®n hizo que su autor, Richard Felton Outcault, acabara vendiendo una licencia a la Brown Shoe Company para comercializar zapatos con el nombre de su personaje y as¨ª fue como se convirtieron en uno de los calzados predilectos de los ni?os a principios del siglo XX. Sin embargo, a lo largo de su historia han ido estrechando su relaci¨®n con la m¨²sica descontextualiz¨¢ndose del ¨¢mbito infantil que marc¨® sus or¨ªgenes.

Hace ahora un siglo, en las animadas pistas de baile de los clubes nocturnos de los locos a?os 20, las mujeres se mov¨ªan durante toda la noche al ritmo de foxtrot, charlest¨®n o claqu¨¦ gracias a la sujeci¨®n que la tira central que caracteriza a estos zapatos aportaba a sus pies. De aquella versi¨®n festiva que inclu¨ªa tac¨®n, se volvi¨® otra vez a los modelos planos de aires ani?ados en los a?os 60. Mary Quant, creadora de la minifalda, rebaj¨® la sensualidad de esta prenda combin¨¢ndola con Mary Janes (?qui¨¦n no recuerda a la modelo Twiggy luciendo el conjunto?). Otros dise?adores como Andr¨¦ Courr¨¨ges, Yves Saint Laurent o Betsey Johnson tambi¨¦n se dejaron llevar por la versatilidad, inocencia y elegancia del calzado, que a?os despu¨¦s representar¨ªa un esp¨ªritu totalmente contrario.

El grunge de los 90 personificado en Courtney Love hizo bailar a las merceditas a ritmo de rock combinadas con la versi¨®n m¨¢s hardcore del vestido baby doll. Ya no eran tan ani?adas como en los pies de Mafalda, otro personaje que ha contribuido a su popularidad, ni tampoco tan sofisticadas como la versi¨®n con tac¨®n firmada por Manolo Blahnik que tantos suspiros despert¨® en los 2000 despu¨¦s de que Carrie Bradshaw se enamorara de ella en Sexo en Nueva York.

Convertidas en objeto de deseo por derecho propio, las merceditas han ido saltando de d¨¦cada manteniendo su popularidad y logrando ser se?a y santo de firmas como Tabitha Simmons, que ha hecho de sus Mary Jane Hermione uno de sus dise?os m¨¢s reconocibles. Ahora vuelven a ser tendencia ¨Csi alguna vez dejaron de serlo¨C como calzado perfecto de cara al entretiempo y prometen copar los estilismos de las fashionistas de pro. Si hasta Zara ya tiene su propia versi¨®n en charol, ser¨¢ cuesti¨®n de d¨ªas que se conviertan en los zapatos favoritos para dar el paseo de rigor durante la desescalada.