Nick Youngquest: ¡°No entiendo por qu¨¦ todav¨ªa cuesta salir del armario en el deporte¡±
El australiano dej¨® el rugby profesional para convertirse en la televisiva imagen del perfume Invictus de Paco Rabanne. Charlamos con ¨¦l en Par¨ªs sobre la fama, los tatuajes y las diferencias salariales entre mujeres y hombres.
Probablemente no sepan su nombre. Lo que a buen seguro s¨ª reconocer¨¢n es su herc¨²leo torso abri¨¦ndose paso ante un aluvi¨®n de flashes al ritmo de Power de Kanye West. Nick Youngquest (S¨ªdney, 1983) es el flamante protagonista de uno de los anuncios de perfume m¨¢s recordados de los ¨²ltimos tiempos. El australiano dej¨® el rugby profesional para convertirse, all¨¢ por 2013, en imagen de la fragancia Invictus de Paco Rabanne. Su aparici¨®n en uno de los spots m¨¢s emitidos ¨Cy contemplados¨C de los ¨²ltimos a?os situ¨® su nombre en el mapa de la moda y le vali¨® la comparaci¨®n con David Beckham. Puede que la repercusi¨®n medi¨¢tica de Youngquest a¨²n se sit¨²e a a?os luz de la del deportista reconvertido a modelo m¨¢s famoso del mundo pero, por odiosas que resulten las comparaciones, su actitud seductora y su f¨ªsico cuajado de tatuajes resultan tanto o m¨¢s magn¨¦ticos que los del exfutbolista ingl¨¦s.
Lo comprobamos en Par¨ªs, ciudad que acogi¨® al australiano afincado en Nueva York en la presentaci¨®n de los nuevos perfumes de Paco Rabanne. La marca vuelve a confiar en ¨¦l como rostro visible de Invictus Intense, la fragancia que ver¨¢ la luz este mes de febrero junto a Olympea Intense, la versi¨®n femenina personificada por la modelo brasile?a Luma Grothe. Horas antes de la presentaci¨®n de los nuevos aromas en el Museo Gr¨¦vin ¨Cmuseo de cera¨C de la capital francesa, nos citamos con Youngquest en una suite Louis XVI del Hotel Meurice. A pesar de la discreci¨®n de su riguroso estilismo negro, no consigue pasar desapercibido. ¡°La verdad es que pensaba que nadie me reconocer¨ªa en Par¨ªs pero ayer mismo uno de los conserjes del hotel me par¨® para preguntarme si era ¡®el t¨ªo del anuncio¡¯. Se me acerc¨® porque quer¨ªa saber si mis tatuajes eran de verdad o falsos. Cuando le dije que eran reales se quit¨® sus guantes blancos para ense?arme los suyos. Fue muy divertido¡±, nos cuenta entre risas.
Cuando el mism¨ªsimo Bruce Weber lo fotografi¨® a principios de la d¨¦cada para una campa?a de ropa interior, el trabajado six pack del australiano apareci¨® como un lienzo en blanco por obra y gracia del photoshop. Ni rastro de sus tatuajes. ¡°Es verdad que hacerte tantos tattoos puede limitar tu carrera como modelo pero no me importa. Forman parte de m¨ª y todos tienen un significado especial¡±, aclara. ¡°Mi favorito es este ¨Cafirma se?alando la sirena que luce en el antebrazo¨C. Me gusta porque personifica la belleza del mar, todo aquello que se esconde debajo de las aguas y se escapa a nuestra vista¡±. Esta respuesta resume muy bien nuestro encuentro: Youngquest se esfuerza en dejar claro que debajo de su evidente atractivo, hay algo m¨¢s. Ya saben, romper con el estereotipo. Reitera en sus respuestas lo afortunado que es por estar en una posici¨®n que le permite hacer las cosas que le interesan: desde posar desnudo para recaudar fondos contra el c¨¢ncer de test¨ªculos hasta correr una marat¨®n para la ONG Team for Kids, como hizo el a?o pasado. ¡°No me veo a m¨ª mismo como una celebridad pero, gracias a las redes sociales, puedo tener cierta influencia e interactuar con la gente. Quiero aprovechar eso como plataforma para apoyar causas solidarias que me importan¡±, insiste.
Una de esas causas es su activismo por los derechos LGTB. No es homosexual ¨Cest¨¢ casado con una joven llamada Mira Jones que tambi¨¦n le acompa?a en su viaje a la ciudad de la luz¨C pero se ha posicionado en numerosas ocasiones a favor de la libertad sexual. Cuando su compa?ero, el jugador de rugby Gareth Thomas sali¨® del armario, Youngquest le mostr¨® su apoyo p¨²blicamente. ¡°La verdad es que todos recibimos muy bien la noticia y no afect¨® para nada al equipo¡±, recuerda. ¡°No entiendo por qu¨¦ a¨²n resulta dif¨ªcil salir del armario en el ¨¢mbito del deporte. Puede que sea por el estereotipo de que los deportistas tienen que ser masculinos y ¡®fuertes¡¯ pero esa creencia est¨¢ totalmente desfasada. Estamos en 2017 y es una locura que tant¨ªsima gente que practica deporte no hable de su verdadera orientaci¨®n sexual. Pero estoy seguro de que cambiar¨¢¡±, afirma agravando el gesto.
A pesar de que abandon¨® el rugby profesional para entregarse por completo a su carrera como modelo, no ha dejado el deporte. Es profesor de yoga y lo practica todos los d¨ªas: ¡°Cuando viajo es m¨¢s dif¨ªcil pero por lo menos le dedico veinte minutos diarios¡±. En Instagram, red social en la que es bastante activo, suele colgar v¨ªdeos haciendo gala de sus proezas en esta disciplina. ¡°Lo llevo practicando desde que me retir¨¦ del deporte y me ayuda a encontrar el equilibrio. A estar tranquilo y tener la mente clara¡±, explica. La constancia entrenando y su afici¨®n por cuidarse la piel son las claves de su rutina de belleza. ¡°Desde que ten¨ªa 16 a?os mi madre me ense?¨® la importancia de utilizar limpiadores y cremas. Y se lo agradezco. No me obsesiono con ello pero s¨ª me gusta aplicarme un par de productos ma?ana y noche. Y no me lleva m¨¢s de cinco minutos. Para algunos hombres esto ser¨¢ mucho tiempo porque salen de la ducha y listo pero es verdad que las cosas est¨¢n cambiando. Es bonito cuidarse a uno mismo¡±, nos cuenta.
Youngquest se expresa con una naturalidad bastante alejada de esa imagen arrogante que proyectan algunos modelos. Lleva horas hablando con prensa de todo el mundo y no parece cansado. Se nota que le gusta su trabajo o que, al menos, sabe c¨®mo aparentarlo. ¡°?De verdad no hay nada malo en esto de ser modelo?¡±, le preguntamos. ¡°Si tuviera que elegir qu¨¦ es lo que menos me gusta dir¨ªa que esperar en el set. Soy una persona con mucha energ¨ªa y disparar una campa?a requiere de muchas esperas. Nunca terminan de preparar las cosas y yo digo todo el rato: ¡®Estoy listo, estoy listo¡¯. Pero si esto es lo peor que tiene ser modelo me parece bien, compro¡±, contesta entre risas.
La industria del modelaje es una de las pocas, tal vez la ¨²nica, en la que las mujeres est¨¢n mucho mejor pagadas que los hombres (en muchos casos ellos cobran un 75% menos, seg¨²n la BBC). Tampoco este dato consigue perturbar ni ofender el ego del australiano: ¡°Me parece muy bien¡±, espeta sin pens¨¢rselo dos veces. ¡°Ser¨ªa genial que ocurriese en otros sectores. Las mujeres est¨¢n peor pagadas en cualquier otra profesi¨®n, as¨ª que creo que es genial que cobren m¨¢s en esta. Hay mujeres incre¨ªbles ah¨ª fuera modelando que no solo utilizan esta plataforma para ganar dinero, sino para ser activistas y poder mejorar el mundo: ayudando a los ni?os en sus pa¨ªses de procedencia o luchando por los derechos femeninos¡±. Y tampoco titubea ¨Ccomo siguen haciendo multitud de celebrities¨C cuando le preguntamos si se considera feminista: ¡°Por supuesto. Creo que las marchas de hace unos d¨ªas en las que mujeres, hombres y ni?os de todo el mundo salieron a la calle para protestar son muy poderosas?. Y termina con convicci¨®n: ?Las mujeres han estado tapadas durante mucho tiempo y ya es hora de cambiar¡±.
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