Aura Garc¨ªa-Junco sobre las relaciones abiertas: ?Quer¨ªa entender por qu¨¦ generan tanto rechazo?

Aura Garc¨ªa-Junco (Ciudad de M¨¦xico 1988) estudi¨® letras cl¨¢sicas, conoce los textos antiguos, pero tambi¨¦n los contempor¨¢neos. As¨ª que se le ocurri¨® la idea de utilizar a Ovidio para enfrentarlo a las nuevas teor¨ªas feministas. Todo surgi¨® una noche en la que ten¨ªa una cita y, tras explicitar que estaba en una relaci¨®n abierta, la persona en cuesti¨®n reaccion¨® dici¨¦ndole: ¡°Lo que pasa es que t¨² nunca te has enamorado¡±. Esa an¨¦cdota personal es la que precisamente abre ¡®El d¨ªa que aprend¨ª que no s¨¦ amar¡¯ (Seix Barral) un libro a medio camino entre el ensayo y la experiencia propia absolutamente revelador que intenta a golpe de investigaci¨®n romper con el mito del amor rom¨¢ntico al mismo tiempo que se trata toda una serie de temas que impactan de manera directa en c¨®mo abordamos las relaciones las mujeres en la actualidad.

?C¨®mo empez¨® tu proceso de investigaci¨®n para escribir el libro?

Estaba pasando por un periodo confuso en mi vida y mucha gente a mi alrededor estaba en la misma situaci¨®n. Empec¨¦ a plantearme la pregunta, ?qu¨¦ est¨¢ pasando con las relaciones en mi generaci¨®n? Me di cuenta de que hab¨ªa una incertidumbre muy grande al respecto y pens¨¦ que era una buena l¨ªnea de investigaci¨®n. ?Por qu¨¦ nos sentimos tan perdidos, por qu¨¦ estamos naufragando? Me puse a bucear en libros que hablaban sobre el amor, pero hab¨ªa tantos que decid¨ª delimitar mi estudio y los temas que quer¨ªa tratar. Tambi¨¦n quer¨ªa introducir de qu¨¦ forma impacta la cultura popular en nuestro modo de concebir las relaciones a trav¨¦s de las canciones, las pel¨ªculas.

Ser¨ªa un trabajo arduo, hay montones de citas en el libro que nos remiten a otras tantas lecturas fundamentales

Pas¨¦ alrededor de cuatro a?os de escritura, reescritura, lectura e investigaci¨®n. Al final tambi¨¦n le ped¨ª a un amigo sex¨®logo que lo leyera por si estaba diciendo alguna tremenda barrabasada. Quer¨ªa que fuera muy completo en el tema de la bibliograf¨ªa para no reducir los temas a mis propios prejuicios y ofrecer todos los ¨¢ngulos posibles.

De entre todas esas lecturas, ?hubo alguna que te resultara m¨¢s reveladora?

Fueron varias, siempre en el lado m¨¢s radical de la balanza. Por supuesto, Brigitte Vasallo y su Pensamiento mon¨®gamo. Terror poliamoroso. Tambi¨¦n muchos libros de sociolog¨ªa, los de Eva Illouz, que tienen un sustrato hist¨®rico muy importante que ayuda a generar perspectiva.

Durante el tiempo que estuviste escribi¨¦ndolo supongo que se colar¨ªa no solo la actualidad, sino tambi¨¦n los cambios en tu propia vida. ?C¨®mo combinaste esa parte m¨¢s ensay¨ªstica con la personal?

Ha sido una ¨¦poca muy convulsa al respecto y hemos tenido que reformular los t¨¦rminos constantemente. Es una materia muy viva y lo interesante es que se trata de temas que no se pueden separar de tu propia existencia. As¨ª que, conforme vives, tienes que repensarte. En ese sentido, se trata de un libro bastante impermanente, porque todo est¨¢ cambiando constantemente. Por eso decid¨ª incluir algunas de mis experiencias para introducir asuntos que me interesaba explorar.

No s¨¦ c¨®mo estructuraste el libro, porque se hablan de muchos temas, algunos que est¨¢n desde siempre, otros son muy nuevos y los estamos viviendo en tiempo presente

Totalmente, creo que es algo que est¨¢ en movimiento y es muy dif¨ªcil de asir. Si escribiera el libro ahora, tendr¨ªa que agregar unas cuantas cosas. Por ejemplo, hay algo que me obsesiona ¨²ltimamente: El balance tan delicado entre la vida p¨²blica y la privada. Parece que tenemos que retransmitir todo lo que nos ocurre como si fuera un espect¨¢culo y solo compartimos aquello que es bueno. Hay mucha mentira y vac¨ªo. Todo parece como parte de un experimento, as¨ª que nos va a tomar un rato entender las consecuencias y el an¨¢lisis de estos fen¨®menos. Por eso creo que nos encontramos en una ¨¦poca bisagra tras el estallido de las redes sociales. No sabemos ahora d¨®nde nos puede llevar.

Tambi¨¦n abordas de qu¨¦ forma ha cambiado nuestra forma de buscar el amor (o el sexo) a trav¨¦s de las Apps de contactos

Me parec¨ªa muy importante escribir de eso, porque es f¨¢cil perder la perspectiva cuando estamos rodeados de tanta tecnolog¨ªa que acaba impactando en la forma en la que nos relacionamos sin que nos demos cuenta. Hay cosas que son muy evidentes, est¨¢s viendo una pantalla, no a una persona, por lo que la deshumanizaci¨®n est¨¢ muy presente. La tecnolog¨ªa se presta a crear una especie de aparador, una vitrina donde hay muchas caras que m¨¢s bien parecen maniqu¨ªes con cierto grado de capacidad para contestar algunas preguntas est¨¢ndar. Y con las redes sociales es muy f¨¢cil perder la perspectiva. Lo que m¨¢s me incomoda es la propensi¨®n tan grande para agredir a otras personas, porque la lejan¨ªa que proporciona la tecnolog¨ªa te lo permite. Hay una enorme diseminaci¨®n de los afectos y me parece muy duro ver c¨®mo se pierde la capacidad de ver a las personas tal y como son, no solo como portadoras de ideas.

?Qu¨¦ aspectos fundamentales quer¨ªas desmitificar a trav¨¦s de este libro?

Al principio no lo ten¨ªa claro, as¨ª que empec¨¦ con intuiciones y termin¨¦ con otras impresiones y muchas preguntas. Lo que s¨ª me interesaba entender era por qu¨¦ hab¨ªa personas que reaccionaban de una manera tan dr¨¢stica e intensa al hecho de que yo tuviera una relaci¨®n abierta, y para llegar a ese punto ten¨ªa que ver por qu¨¦ era tan importante la idea de la monogamia y el concepto del amor rom¨¢ntico. Son fundamentos medulares no dichos, pero s¨ª expl¨ªcitos que condicionan todo lo dem¨¢s. Por ejemplo, la idea del matrimonio, a la que yo tengo tanto rechazo. Ten¨ªa que desmitificarme a m¨ª misma para hablar sobre eso, porque si no, hubiera sido un panfleto, y era algo de lo que quer¨ªa huir. As¨ª que para m¨ª ha sido una especie de terapia enfrentarme a ciertos temas.

En el libro dices que el amor es un aspecto ideol¨®gico, social y econ¨®mico. Por lo que ir en contra de la monogamia es hacerlo contra los constructos sociales que parecen inamovibles

Estamos rodeados de estos valores y hay gente a la que le va la vida en defenderlos, porque para ellos es la base de nuestra sociedad, y eso implica la moral. Solo hace falta que hurgues un tantito para darte cuenta de que esto no es as¨ª. Las relaciones homosexuales est¨¢n ah¨ª desde el principio de los tiempos, as¨ª que es como tapar el sol con un dedo, y as¨ª muchas otras cosas. En el cap¨ªtulo sobre la monogamia me interesaba hablar de que la no monogamia tambi¨¦n ha existido siempre y desde otros lugares que no tienen que ver con el poliamor o las relaciones abiertas occidentales. As¨ª que esos mitos est¨¢n destinados a chocar con una pared. Para m¨ª el libro es una invitaci¨®n a pensar, a dar cabida a otras realidades que existen.

?Por qu¨¦ crees que las mujeres seguimos acumulando tantos traumas en torno a esa idealizaci¨®n del amor rom¨¢ntico? ?Por qu¨¦ a pesar de que seamos m¨¢s conscientes que antes, sigue ocurriendo?

Efectivamente, sigue pasando. Yo creo que ah¨ª es donde est¨¢ el entramado m¨¢s complejo. Porque, por un lado, nuestro primer aprendizaje sobre el amor nos lo dan nuestros padres. ?Por qu¨¦ eso se nos queda grabado a pesar de la cantidad de libros que hayamos le¨ªdo? Por supuesto, ayuda leer, tambi¨¦n la terapia para reflexionar, tener buenos amigues con los que hablar. Pero hay un sustrato del cual partimos. No surgimos de la nada, y en parte tenemos asumido ese discurso patriarcal tan nocivo. Es dif¨ªcil desprenderse de todo eso. Por eso para m¨ª es s¨²per importante el llamado a la paciencia con nosotras mismas, porque al final, cambiar es dif¨ªcil e implica muchas cosas, no solamente querer hacerlo.

?Crees que se puede educar de alguna manera a las nuevas generaciones para que esa cadena heteropatriarcal se vaya rompiendo?

Creo que s¨ª. De hecho, est¨¢ ocurriendo, sobre todo porque tienen m¨¢s referentes y referentes m¨¢s diversos. Creo que antes, en anteriores generaciones no se hablaba lo suficiente de sentimientos. En la medida que tengamos una educaci¨®n emocional sana, van a cambiar muchas cosas. Las emociones estaban relegadas al campo de lo que no se pod¨ªa hablar, convirti¨¦ndolas en algo estrictamente femenino y, por tanto, minusvalorado. Se ha intentado ense?ar a trav¨¦s de la imposici¨®n de lo racional, aplastando lo emocional y eso es un error.

Ovidio y su Ars Amatoria se convierten en un eje estructurador del libro. Cada cap¨ªtulo comienza con una de sus citas en las que borras aquello que debemos desterrar

Ha sido muy divertido hacer eso. Eran tres libros, en realidad, dos para los hombres, uno para las damitas de la ¨¦poca que se consideraban cortesanas, no mujeres de bien, como se dec¨ªa. En su momento, se le tach¨® de libertino y revolucionario, porque explicitaba lo que se hac¨ªa y no se dec¨ªa. Pero luego, corte a 2000 a?os despu¨¦s y, yo que estudi¨¦ letras cl¨¢sicas, me encuentro con que se habla de ¨¦l en foros de Internet en el que los pick up artists lo utilizaban como modelo, porque, en el fondo, ah¨ª hay ideas encapsuladas de muchos supuestos del amor rom¨¢ntico, incluyendo los m¨¢s fieros y desagradables, como las incitaciones a la violaci¨®n, expl¨ªcito en el Rapto de las Sabinas, que ¨¦l dice que fue por el bien de la comunidad, de la patria. Incre¨ªble, ?no? Y a lo largo de los libros hay un mont¨®n de cosas que ahora son absolutamente inaceptables, pero¡­ que siguen vigentes en muchos sectores de la sociedad, como la idea de poseer a la pareja y dem¨¢s. Y claro, hay una movida con todo eso, porque es un recept¨¢culo de valores s¨²per occidentales y s¨²per patriarcales, s¨²per machistas que les encantan a los hombres. Ellos piensan: es lo que merezco, esto es lo que voy a obtener y lo voy a hacer de esta manera, porque estoy en mi derecho, porque soy hombre. As¨ª que yo tengo una relaci¨®n bipolar con Ovidio, porque es uno de mis poetas favoritos de la antig¨¹edad por la belleza de sus textos, pero es cierto que hay que leerlo desde una perspectiva cr¨ªtica.

?C¨®mo quer¨ªas tratar el cuerpo femenino en el libro?

Me interesaba tratarlo desde dos lados, desde la manera en la que la mirada de los dem¨¢s conforma nuestra mirada sobre nosotras mismas, pero tambi¨¦n sobre las otras personas. No se trata ya de que te guste m¨¢s alguien o no, no es cuesti¨®n de autocensurarse, pero a las mujeres nos han jodido mucho hist¨®ricamente con eso y ha constituido un arma para desvalorizarnos. Me gusta hablar tambi¨¦n del cuerpo que envejece. ?Por qu¨¦ a los hombres se les permite envejecer y a las mujeres no? ?No estamos yendo todos al mismo lado? Tambi¨¦n me interesaba mucho la manera en que nos ven desde fuera como objetos, y ah¨ª entra en juego la cultura de la violaci¨®n. ?C¨®mo encajan en nuestro cuerpo esos supuestos, c¨®mo nos sentimos, c¨®mo tenemos que actuar, por qu¨¦ tenemos que continuar tragando? Muchas veces siento que tendemos a hacer esa diferenciaci¨®n tajante entre alma y cuerpo, o mente y cuerpo. Y no es as¨ª, porque una cosa impacta en la otra.

Todo esto entronca con lo que t¨² llamas ¡°esa peque?a o gran red de abusos a los que toda mujer, incluso sin darse cuenta, ha estado sometida a lo largo de su vida¡±

Nadie se salva de eso, siempre hay fisuras entre las fichas del rompecabezas. Pero en el caso particular de las mujeres, se incrementan esas fisuras desafortunadamente, porque hay acoso, menosprecio sexual, presi¨®n social. Y todo eso se vuelve tan cotidiano que es dif¨ªcil de desarraigar. As¨ª que muchas mujeres optan por una supervivencia reptiliana, especialmente si han estado sometidas a alg¨²n tipo de violencia. Afortunadamente tenemos recursos que los hombres no tienen, la capacidad de poder hablar y tener amigas que nos escuchen. Creo que es algo que tenemos que sanar colectivamente, no hay nada peor que el dolor individual.

En el libro hablas de La princesa prometida como una pel¨ªcula que te marc¨® negativamente a la hora de hacer frente a la idea del amor rom¨¢ntico. ?Crees que est¨¢n surgiendo nuevas ficciones que ayudan a romper los tab¨²es y los clich¨¦s?

Ahora hay muchas, ninguna abarca todo, pero pienso en Sex Education, que adem¨¢s de ser una serie juvenil, tiene la capacidad de hablar de muchos temas profundos de una manera muy amena. Es la clase de series que pueden romper los estereotipos en los adolescentes. Hay otras que se enfocan en cosas muy concretas, acabo de ver Heartstopper, sobre el despertar homosexual de dos personajes y otros que se abren a la diversidad sexual. Si hubiera tenido ese referente cuando era adolescente hubiera sido como una caricia a mi alma. Me gusta que exista y que se pueda ver de una manera tan masiva. Tambi¨¦n es muy interesante Todo va a estar bien, de Diego Luna, porque rompe con muchos paradigmas, qu¨¦ pasa cuando un matrimonio se acaba y hay hijes, c¨®mo se reconfiguran las familias. Todas esas cuestiones empiezan a plantearse en la pantalla tratando se saltarse las reglas no dichas, los prejuicios naturales, me parecen s¨²per imprescindibles.