Los nuevos galeristas de arte venden por Instagram y crean comunidad
Estos galeristas han lanzado sus proyectos en los ¨²ltimos a?os. Desde Valencia, Santander, Marbella o Palma de Mallorca buscan impulsar nuevos focos creativos a trav¨¦s de una visi¨®n muy personal. Combinan lo local y lo internacional, ofrecen residencias a sus artistas, venden por Instagram o apuestan por dar voz a creadores que desaf¨ªan el canon.
Isma?l Chappaz?(House of Chappaz, Valencia):?¡°Me inspiro en las cosas de ¡®voguing¡¯, quiero crear comunidad, familia¡±.?
Cada d¨ªa, al levantarse, Isma?l Chappaz (Valencia, 40 a?os) ve en su habitaci¨®n una pieza de Carles Congost que le dio su hermano y un grabado de Jean Cocteau regalo de su madre. En su caso, el arte es cuesti¨®n de familia. En junio de 2019 inaugur¨® su nueva galer¨ªa, House of Chappaz, con una exposici¨®n comisariada por Eduardo Garc¨ªa Nieto y titulada Les Enfants Terribles, precisamente un gui?o a Cocteau. ¡°Presentamos a todos los artistas en el interior, en mi casa, quer¨ªamos mostrar el di¨¢logo de los artistas de la galer¨ªa con la colecci¨®n de mi familia¡±, explica. No se trataba de la primera experiencia como galerista de Chappaz, pero este proyecto s¨ª es el primero que lleva su apellido, el mismo de su t¨ªo abuelo, el escritor suizo Maurice Chappaz, que en 1997 mereci¨® el Premio Goncourt de Poes¨ªa. Junto a su exmarido, Isma?l hab¨ªa creado en 2011 Espai Tactel, y en 2019 inici¨® esta nueva etapa que desde el nombre era una declaraci¨®n de principios: ¡°Me inspiro en las casas de voguing, quiero crear comunidad, familia, que los artistas definan la galer¨ªa y la galer¨ªa defina a los artistas y todos nos sintamos identificados¡±.
Dej¨® Ruzafa por el barrio del Carmen y su galer¨ªa cuenta con otro espacio en Barcelona, junto al estudio de dise?o Toormix. Lleva a 19 artistas, realiza ocho exposiciones al a?o y en 2023 estar¨¢ presente en ARCOmadrid o Art Brussels, recalca que ¡°las ferias son important¨ªsimas¡±. En ese escaparate internacional muestra su visi¨®n personal del arte, que pasa por hablar de teor¨ªa queer o de feminismo. ¡°En el mundo en general, y en el arte, sigue habiendo un enorme peso heteropatriarcal, pero hay una tendencia a rescatar sobre todo a mujeres olvidadas, era necesario¡±. El cambio, para ¨¦l, puede iniciarse desde la concepci¨®n de la obra, como demuestran dos de sus artistas, Vicky Usl¨¦ y Carmen Ortiz: ¡°El simple hecho de que produzcan obras dentro de las l¨ªneas m¨¢s abstractas y minimalistas para m¨ª es activismo, una acci¨®n pol¨ªtica¡±. Uno de sus empe?os es contribuir a formar nuevos coleccionistas porque, lamenta, ¡°el coleccionismo est¨¢ mayor en Espa?a, es preocupante, a la gente le cuesta acercarse al arte contempor¨¢neo, cree que es superelitista¡±.
M¨®nica ?lvarez Careaga (Exhibit, Santander): ¡°La mayor parte de las ventas las hacemos por Instagram, el 60% o 70%¡±.
La carrera de galerista de M¨®nica ?lvarez Careaga (Torrelavega, 58 a?os) comenz¨® despu¨¦s de dedicarse a la gesti¨®n cultural, al comisariado y de crear y dirigir una feria, Drawing Room, que este a?o no se celebrar¨¢ en Madrid paralela a ARCO pero s¨ª mantiene su cita en Lisboa. ¡°Tengo una empresa de gesti¨®n cultural. A principios de 2021 empezamos a hacer exposiciones all¨ª y en diciembre de ese a?o ya cogimos un local propio para Exhibit en el paseo mar¨ªtimo de Santander porque hab¨ªamos visto que ¨¦ramos capaces de vender obras¡±. Aunque vive entre Madrid y Santander se decidi¨® por establecer la sede en su tierra natal porque ¡°la ciudad vive un gran momento cultural; el Centro Bot¨ªn tiene que ver en ello, y entre 2023 y 2024 se prev¨¦ que abran otros tres museos, y adem¨¢s Arte Santander es la segunda feria de arte m¨¢s antigua de Espa?a, todo suma¡±.
Ya cuando en 2014 se encarg¨® del Festival Miradas de Mujeres apost¨® por potenciar otros centros creativos lejos de los habituales: ¡°El objetivo fue descentralizar el proyecto y llevarlo a todas las regiones, y ahora tener la galer¨ªa en Santander tambi¨¦n tiene que ver con que la mayor parte de las ventas las hacemos por Instagram, igual el 60% o el 70%, a clientes de todo el planeta que no conocemos¡±. Muchos de esos compradores proceden de Corea, Reino Unido, Taiw¨¢n, Jap¨®n, Estados Unidos o M¨¦xico. ¡°?Estar en Madrid es importante? Pues s¨ª, es importante, pero los alquileres son car¨ªsimos¡±, reflexiona ?lvarez Careaga, para quien la presencia online ha supuesto un cambio en el concepto de galer¨ªa. ¡°La pandemia hizo que curiosamente durante los meses en los que todo el mundo estaba paralizado se vendiera bastante arte a trav¨¦s de internet¡±, se?ala, y adem¨¢s destaca que ¡°se vive un momento muy interesante en el que una docena de artistas espa?oles han conseguido tener una audiencia global, como Ana Barriga, Javier Calleja y Okuda San Miguel, y eso supone un tir¨®n impresionante para el arte espa?ol¡±.
Este ¨²ltimo es uno de los creadores que tiene en su galer¨ªa, donde en 2022 realiz¨® 12 exposiciones y con la que esta primavera debutar¨¢ en la feria de Bus¨¢n (Corea del Sur). ?lvarez Careaga recalca que ¡°el mercado del arte est¨¢ completamente globalizado¡± y destaca la importancia de experimentar nuevas formas y combinar lo local con lo internacional: ¡°Con Aitor Saraiba, que llevaba unos meses viviendo en una caba?a en los Valles Pasiegos, realizamos una venta pop-up, pero nuestras pr¨®ximas exposiciones van a ser de unas artistas de Hong Kong y Portugal¡±.
Flor Reiners?(Reiners Contemporary Art, Marbella): ¡°Es importante que no todo se concrete en un ¨²nico mes¡±.
Se form¨® como economista, pero un viaje a Berl¨ªn cuando ten¨ªa 21 a?os dio el primer vuelco a su vida. Flor Reiners (Salvador de Bah¨ªa, 37 a?os) decidi¨® entonces quedarse a vivir en Alemania, estudi¨® Literatura e Historia del Arte en Colonia y cre¨® ¡°una empresa de consultor¨ªa para museos, para compras y adquisici¨®n¡±. Permaneci¨® all¨ª una d¨¦cada, organiz¨® un festival de cine y m¨²sica ¡°para fomentar el intercambio art¨ªstico y presentar la cultura brasileira en Alemania, donde solo se ve¨ªa la parte m¨¢s folcl¨®rica y no la m¨¢s profunda e intelectual¡± y apost¨® por la acci¨®n social del arte contempor¨¢neo asesorando a museos brasile?os sobre ¡°c¨®mo el arte puede ayudar a ni?os y adolescentes que crecen en un sistema de violencia¡±.
Pero en 2015 su vida dio un nuevo giro: se mud¨® a Marbella con su marido y busc¨® nuevos horizontes. As¨ª naci¨® Reiners Contemporary Art a finales de 2019. ¡°Estos tres primeros a?os ha sido un espacio de experimentaci¨®n, cre¨¦ un sistema de recibir a artistas alemanes y brasile?os en Marbella, ha sido un espacio de intercambio¡±, apunta Reiners, que esta primavera prev¨¦ realizar la presentaci¨®n de sus nuevas instalaciones, dentro de una finca en la que tambi¨¦n organizar¨¢ un sistema de residencias creativas para sus artistas. ¡°No quiero que sea una galer¨ªa para ir a ver una exposici¨®n r¨¢pido, sino un lugar de encuentro, para conocer la obra y vivirla¡±, reflexiona, ¡°quiero crear un programa m¨¢s contempor¨¢neo, m¨¢s pol¨ªtico; hablar de d¨®nde estoy y de qu¨¦ tipo de galerista quiero ser¡±.
Para ello, ultima una exposici¨®n con la malague?a Carla Hayes. ¡°Ella habla de la di¨¢spora, una historia que vivo yo y que se vive en Brasil, y adem¨¢s es importante dar a conocer a esta artista afroandaluza con la que se pueden identificar otras mujeres¡±, asegura. ?Su premisa al generar proyectos? ¡°Mi inter¨¦s est¨¢ en las ideas del artista. No en si me entrega uno o dos cuadros, sino en la historia que cuenta en su trabajo¡±. Cree que el movimiento genera una escena, confirma que Andaluc¨ªa ¡°es un centro art¨ªstico interesante¡± del que quiere formar parte. Y ve necesarios m¨¢s espacios para difundir todo ese dinamismo: ¡°Es importante impulsar plataformas y ferias alternativas, y no concentrar todo en un ¨²nico mes, as¨ª habr¨¢ m¨¢s canales para exhibir nuestro mensaje¡±.
Marc Bibiloni?(La Bibi Gallery, Palma de Mallorca): ¡°Tenemos que anteponer el proyecto del artista al espacio¡±.
¡°Creo que es muy de mi generaci¨®n no ver el mundo como este es mi pa¨ªs o esta es mi zona, sino realmente ver el mundo de una forma global¡±, explica Marc Bibiloni (Palma de Mallorca, 31 a?os) desde Nueva York, donde ha viajado para inaugurar una exposici¨®n de su artista Marria Pratts. ¡°Viene de Hospitalet de Llobregat, su trabajo se inspira mucho en las zonas industriales, de lo que ella percibe como una decadencia bonita. Por eso realizamos esta exposici¨®n en un espacio de Brooklyn llamado The Boiler, una nave industrial en una zona que est¨¢ sufriendo gentrificaci¨®n, que es algo de lo que habla su obra. Todo empieza con una fantas¨ªa, con un brainstorming que hacemos con el artista antes de acotar d¨®nde vamos a exponer¡±, argumenta. Esa es una de las bases de La Bibi: ¡°Tenemos que anteponer el proyecto del artista al espacio¡±. Aunque su galer¨ªa tiene sede en Palma de Mallorca, comenz¨® su andadura con una exposici¨®n en Madrid, a finales de 2021: ¡°La idea es desarrollar dos proyectos expositivos, el que ocurre en Mallorca y lo que llamamos ephemeral exhibitions¡±.
Para Bibiloni, que comenz¨® estudiando moda, se form¨® en comunicaci¨®n y marketing y descubri¨® c¨®mo funcionaba el arte trabajando en la galer¨ªa londinense del dise?ador Paul Smith y despu¨¦s en la del alem¨¢n Gerhardt Braun en Palma, era necesario repensar ¡°la forma de operar en general de las galer¨ªas¡±, dice que ¡°necesitaba que la producci¨®n de una exposici¨®n o el contacto con el artista fueran algo m¨¢s que una transacci¨®n de t¨² me das obra y yo la expongo en mi lugar y la vendo, conceb¨ªa el mundo del arte como que necesitaba una evoluci¨®n pensando en los coleccionistas j¨®venes que no estaban queriendo participar en ese sistema¡±. La Bibi se hizo realidad en un escenario pospand¨¦mico. ¡°Conseguir a los artistas con los que trabajamos hoy fue una locura, yo viajaba a Ghana para conocer a Serge Attukwei Clottey o a Alemania para ver a Aljoscha¡¡±, recuerda. Lo virtual fue uno de los puntos fuertes de su apuesta ¡ª¡°Nunca te imaginar¨ªas la de ventas que hemos llegado a cerrar a trav¨¦s de Instagram. Es un medio muy cercano, se convierte en una conversaci¨®n¡±¡ª, pero Bibiloni subraya que ¡°aunque el online es crucial ten¨ªa claro que quer¨ªa que fuera una experiencia f¨ªsica¡±.
La que ofrece en Mallorca es bidireccional. Para quienes visitan su sede, en la periferia de Palma, en medio del campo, est¨¢ la sorpresa de un espacio que fue ¡°una antigua f¨¢brica textil de lenguas mallorquinas, con vigas de madera en la que de repente entras y est¨¢s en otro universo, podr¨ªa ser cualquier otro sitio¡±. Y para sus artistas supone la oportunidad?de?crear a otro ritmo, durante las residencias creativas que les ofrecen en otra nave industrial reconvertida, que antes fue una f¨¢brica de zapatos. ¡°Al australiano Michael Staniak le encant¨® la experiencia¡±, asegura, y ahora la coreana Miju Lee pasar¨¢ unos meses all¨ª, creando obra y preparando el proyecto que presentar¨¢ con la mallorquina Ela Fidalgo en Urvanity. ¡°Las ferias son un acelerador, para un galerista que empieza son el mejor escaparate. El impacto que puedes generar es algo que no conseguir¨ªas si no asumes ese riesgo¡±, defiende? Bibiloni, que el a?o pasado estuvo en London Art Fair.
Asistente de fotograf¨ªa: Gerardo Romera
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