Ocho escapadas infalibles para vivir el verano mediterr¨¢neo m¨¢s fresco de cala en cala
Del Cap de Creus a Tarifa, de Menorca a Ibiza, la costa mediterr¨¢nea espa?ola conserva a¨²n algunos escondites menos masificados. Con un buen Vi?a Esmeralda, un vino fresco, ecol¨®gico y vegano, en la neverita o en un restaurante a pie de mar, estos destinos pueden convertirse en tu mayor ¨¦xito veraniego
El sabor afrutado y fresco de Vi?a Esmeralda, un vino blanco ecol¨®gico y con certificaci¨®n vegana, marida muy bien con el olor a salitre, la caricia del sol, la vista de aguas turquesas y arena dorada, el sonido de las olas batiendo la orilla. Una experiencia que se disfruta con los cinco sentidos y que proponemos vivir en calas y playas maravillosas que jalonan el Mediterr¨¢neo espa?ol, desde el Cap de Creu, en el norte peninsular, hasta la frontera que es Tarifa, donde el Mare Nostrum se asoma a las puertas del Atl¨¢ntico. Muchas forman parte de espacios naturales protegidos, est¨¢n restringidas al tr¨¢fico y exigen a los visitantes el esfuerzo de caminar para llegar a ellas. Frente a otros destinos m¨¢s atestados de turistas en julio y agosto, a¨²n existen alternativas donde escapar y encontrar un espacio propio donde descorchar una buena botella de Vi?a Esmeralda, reconocido con la medalla de oro como mejor vino blanco en el certamen Tastavins Pened¨¨s, y seguir so?ando frente al mar. Aqu¨ª algunas ideas infalibles.
¨CCap de Creus (Girona): la fantas¨ªa de Dal¨ª hecha realidad
En un pa?uelo de 11 kil¨®metros se concentran algunas de las playas m¨¢s bonitas de Espa?a. Cala Culip, Cala Prona, Cala Jugadora, Cala Culler¨®¡ Un espect¨¢culo de mar y geolog¨ªa al norte de la Costa Brava, en el Cap de Creus, prolongaci¨®n de los Pirineos hasta el Mediterr¨¢neo, con estatus de parque natural (y acceso restringido al tr¨¢fico hasta el 1 de octubre). La nevera con la botella de Vi?a Esmeralda puede ir acomodada en la mochila, para conocer estos paisajes maravillosos desde tierra o en la cubierta de alguno de los barcos que se alquilan, para disfrutarlos desde el mar. Tambi¨¦n se puede?maridar Vi?a Esmeralda con un buen pescado fresco de la lonja en el restaurante Monterrey (Port de la Selva) o comer en el Es Baluard, en la antigua muralla de Cadaqu¨¦s y con vistas a su bah¨ªa. Dentro de su t¨¦rmino municipal se encuentra Portlligat, donde se alza la casa en la que vivi¨® Dal¨ª, hoy convertida en museo.
¨CSitges: playas y buen rollo
El Parque del Garraf (Barcelona), espacio natural protegido, se asoma al mar a trav¨¦s de la playa hom¨®nima, de inconfundible silueta gracias a las monta?as que la escoltan y a sus 33 casitas de pescadores, pintadas de blanco y verde. El viajero puede sacar la botella de Vi?a Esmeralda aqu¨ª (advertencia: est¨¢ s¨ª est¨¢ bastante concurrida durante el verano) o en otros arenales del municipio de Sitges: Sant Sebasti¨¤, donde acuden los locales, muy cerca del centro, y con unas bonitas vistas al casco hist¨®rico, o La Fragata, justo debajo de la iglesia de Santa Tecla y San Bartomeu, junto al club n¨¢utico, la favorita para practicar actividades deportivas. Sitges sigue conservado su carisma de pueblo moderno a media hora en coche de Barcelona. Nadie como ella para mezclar, con muy buen rollo, turismo familiar con ambiente LGTBI internacional; gastronom¨ªa ¨CLe patio, Costa Dorada, el Komokieras¨C con fiesta.
¨CIbiza: Cala Saladeta, un para¨ªso a 7 minutos de la fiesta
A Cala Saladeta, fondo arenoso poco profundo, aguas turquesas, se accede a trav¨¦s de un sendero entre las rocas desde Cala Salada, su m¨¢s ajetreada hermana mayor, a la que se llega en autob¨²s (los coches se dejan en un parking m¨¢s alejado). Su paisaje es una invitaci¨®n a pasar el d¨ªa bien pertrechados de v¨ªveres (sin olvidar una botella de Vi?a Esmeralda bien fresquita), especialmente en junio y septiembre, cuando el calor aprieta pero los veraneantes a¨²n no han llegado en masa (o ya se han marchado). En la base del acantilado rocoso que separa ambas calas se construyeron casetas de pescadores (o varadero). En siete minutos en taxi, en unos 25 en ferry o en unos 50 andando, el viajero se planta desde Cala Salada a Sant Antoni de Portmany, con su Sunset Strip (paseo mar¨ªtimo con vistas al atardecer), donde se disfruta, dicen, de las mejores puestas del sol de la isla; con s¨ªmbolos como el Caf¨¦ del Mar (con su beach club Caf¨¦ del Mar); y con mucha, mucha fiesta en el West End.
¨CMenorca: el Cam¨ª de Cavalls con atardecer en la Cova d¡¯en Xoroi
Los menorquines se sienten orgullosos de haber recuperado y abierto al p¨²blico su hist¨®rico Cam¨ª de Cavalls (el Camino de los Caballos): un recorrido de 185 kil¨®metros, divididos en 20 tramos para hacer a pie o en bicicleta, que circunvala Menorca entera y permite conocer su costa palmo a palmo. Descubriendo maravillas por las que merece la pena brindar con un Vi?a Esmeralda, como las calas Turqueta, Macarella y Macarelleta, Pregonda, Mitjana o Galdana. O arribando a la popular playa de cala en Porter (buena opci¨®n cuando se viaja con ni?os), cercana a una de las urbanizaciones m¨¢s grandes de la costa sur de la isla balear, punto de inicio de una ruta en kayak para explorar las cavidades que el mar ha horadado en las rocas calc¨¢reas. Aqu¨ª se alza la cueva natural de Xoroi, cincelada en el acantilado a golpe de olas y mareas. Habilitada como bar de copas diurno y discoteca nocturna, se accede por unas vertiginosas escaleras y es recomendable para tomar algo en la hora m¨¢gica del ocaso.?
¨CAlicante: Isla de Tabarca, un respiro frente al bullicio
Tabarca, la ¨²nica isla habitada de la Comunitat Valenciana, ofrece un pintoresco puerto marinero, unas murallas declaradas Conjunto Hist¨®rico Art¨ªstico y Bien de Inter¨¦s Cultural, un n¨²cleo urbano agradable para pasear, un museo, un hotel boutique, y calas y playas de aguas transparentes en las que disfrutar de un tentempi¨¦ regado con un Vi?a Esmeralda blanco bien fresco. Tambi¨¦n se puede comer en restaurantes como Tere o Casa Gl¨°ria, entre otros, y degustar su tradicional caldero tabarquino. La isla, situada a 11 millas n¨¢uticas frente a la ciudad de Alicante, a unos 8 kil¨®metros del cabo de Santa Pola, permite contemplar, tomando distancia, uno de los trozos m¨¢s urbanizados de la costa mediterr¨¢nea. Se trata en realidad de un diminuto archipi¨¦lago formado, adem¨¢s de por Tabarca, por los islotes de La Cantera, La Galera y la Nao. Hay una l¨ªnea regular de ferris que lo conecta desde el puerto de Santa Pola; tambi¨¦n salen barcos desde Alicante, Benidorm o Torrevieja.
¨CMurcia: el litoral virgen del Parque Regional Calnegre y Cabo Cope
El Parque Regional Calnegre y Cabo Cope, a orillas del Mediterr¨¢neo, entre Lorca y ?guilas, atesora las ¨²ltimas playas v¨ªrgenes de la Regi¨®n de Murcia. Entre Puntas de Calnegre, perteneciente al t¨¦rmino municipal de Lorca, y Cabo Cope, en ?guilas, calas no demasiado conocidas, vestigios de c¨®mo fue esta costa antes de la llegada del ladrillo, se suceden las playas del Ba?o de las Mujeres, del Siscal, de La Galera, del Sombrerico. Cualquiera de ellas invita a un almuerzo con botella de Vi?a Esmeralda incluida, aunque en el poblado de Puntas de Calnegre hay peque?os restaurantes pr¨¢cticamente en la arena, y en verano abre en la cala de Calnegre el chiringuito El L¨ªos, en el que se reserva por WhatsApp. Ya en ?guilas, con parada a comer en El Faro, Bartolo o La Veleta, aparecen las llamadas Cuatro Calas, paisaje protegido, Lugar de Inter¨¦s Comunitario y parte de la red Natura 2000: Calarreona, la Higuerica, La Carolina y los Cocedores (entre ?guilas, en Murcia, y Pulp¨ª, en Almer¨ªa).
¨CAlmer¨ªa: un collar de perlas entre Genoveses y la Cala del Carb¨®n
Entre la playa de Genoveses y la Cala Carb¨®n, en el Parque Natural de Cabo de Gata-N¨ªjar, se despliega un collar de calas maravillosas ¨Cde los Amarillos, Pr¨ªncipe, Chica del Barronal¨C, m¨¢s la paradis¨ªaca playa de M¨®nsul. Est¨¢n separadas unas de otras por acantilados de roca volc¨¢nica, con unas vistas espectaculares. Salvarlos es lo m¨¢s complicado de una ruta circular que las recorre, y en la que es recomendable emplear todo el d¨ªa, para disfrutar relajadamente; la jornada transcurrir¨¢, as¨ª, entre caminatas, ba?os y alg¨²n que otro picoteo, con una copa de Vi?a Esmeralda, a pie de mar. O ya despu¨¦s, m¨¢s c¨®modamente, en los restaurantes Mediterr¨¢neo (Cabo de Gata), La Palma (Las Negras) o la Arrocer¨ªa Sotavento (Las Negras). Recomendable tambi¨¦n una parada en San Jos¨¦, muy ambientada en verano, y con una enorme oferta gastron¨®mica entre la que elegir, donde destaca el restaurante Tentenpi¨¦. A unos 14 kil¨®metros se encuentra el bohemio y moderno Rodalquilar, con su impresionante Playazo. Ambas localidades pertenecen al t¨¦rmino municipal de N¨ªjar.
¨CTarifa (C¨¢diz): Punta Paloma, un refugio frente al Levante
Cuando se levanta el viento de Levante en Tarifa, no cabe duda: el mejor refugio es Punta Paloma, donde se accede por una carretera serpenteante entre una duna y un pinar. A su agua transparente y la arena fina a?ade el atractivo de una relativa tranquilidad, al menos para los est¨¢ndares del verano gaditano. Antes o despu¨¦s, el viajero puede saltar la imponente duna que marca la frontera con la colindante Valdevaqueros, arenal emblem¨¢tico para la pr¨¢ctica del kitesurf donde, entre chiringuitos surferos, se alza el Hotel Hurricane, una instituci¨®n con un jard¨ªn con palmeras como del Hollywood de la ¨¦poca dorada donde degustar un buffet de ensaladas acompa?ado de un Vi?a Esmeralda bien fr¨ªo. O guardar una botella de Vi?a Esmeralda en la neverita de picnic y emprender, hacia el otro lado, una agradable ruta de unos 9 kil¨®metros, entre pinares y sabinares, que conduce, cala a cala, a una joya costera: Bolonia. Presidida por otra imponente duna de arena blanca, en el extremo que toca con Punta Paloma oculta unas piscinas naturales donde dar un ba?o a la piel tambi¨¦n con barros depurativos. Para comer en Bolonia, dos cl¨¢sicos: Las Rejas -con sus tortitas de camarones, croquetas de choco y el at¨²n encebollado- y el restaurante Otero fundado hace casi 65 a?os y que mantiene su apuesta por el producto local. El atardecer, siempre con Vi?a Esmeralda, desde las laderas junto a la playa de los chiringuitos Serenade o Sunset.
S¨ªguenos en Instagram: @vinaesmeralda
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.