Probamos la c¨¢mara de fotos que te maquilla

Cuando en alguna revista de moda se detecta un Photoshop disaster todo el mundo se echa las manos a la cabeza. Pero no s¨®lo las celebrities pueden presumir, o sufrir, los efectos de un lifting digital. Panasonic ha puesto a la venta la c¨¢mara Lumix DMC-FX80, capaz de maquillar los p¨ªxeles de un retrato y quitar algunos a?os de encima.

Hemos estado probando un par de semanas esta m¨¢quina y, al margen de cualquier otra cosa que pueda decirse de ella, la verdad es que nos hemos divertido bastante. Lo primero que llama la atenci¨®n al cogerla en las manos es su peque?o tama?o y su ligereza -pesa s¨®lo 114 gramos con la bater¨ªa incorporada-. Dos elementos que la hacen perfecta para llevarla en un bolsillo o en cualquier bolso, por diminuto que este sea.

Para activar su caracter¨ªstica estrella lo primero que debemos hacer es un retrato usando un plano medio, o uno a¨²n m¨¢s cercano, para que la c¨¢mara pueda detectar el rostro que deseamos retocar. Entonces accedemos al programa interno de manipulaci¨®n, que es bastante completo. Sus efectos de maquillaje se inspiran en la gama de cosm¨¦ticos Kanebo Coffret D'or, muy popular en Jap¨®n.

En el apartado de retoque permite aclarar el cutis, atenuar brillos, blanquear la piel, estirar el rostro y enfatizar los ojos. A la hora de maquillar nos permite usar bases con cinco colores y elegir entre tonos naturales, fr¨ªos, ¡®glamourosos¡¯ y ¡®animados¡¯. Tambi¨¦n podemos usar un pintalabios con tres tonos, dar color en las mejillas, aplicar cinco posibles sombras de ojos y acentuar la sonrisa.

Si aplicamos con mesura todos los ajustes el resultado no est¨¢ mal, pues logra dar el pego. Sobre todo si ense?amos las fotos en la propia la c¨¢mara o conect¨¢ndola a un televisor (tiene conexi¨®n HDMI). Nadie pensar¨¢ que semejante trasto es capaz de hacer algo tan diab¨®lico como rejuvenecer a qui¨¦n se cruce delante de su objetivo.

Otro de sus usos consiste en reirse caricaturizando al personal, pues es posible lograr retratos con un aspecto bastante alien¨ªgena acentuando el nivel al que aplicamos todas las funciones. A prop¨®sito, tambi¨¦n funciona con rostros masculinos. Aunque si no queremos que al retratado parezca que va disfrazado es mejor utilizar ¨²nicamente las funciones de retoque y dejar de lado las de maquillaje.

Este es el antes y el despu¨¦s de nuestra prueba.

Ram¨®n Peco

Filtros a lo Instagram
La m¨¢quina pretende ser tambi¨¦n un Instagram killer, pues cuenta con diez filtros que podemos seleccionar antes de hacer la foto y otros seis que podemos aplicar despu¨¦s de dispararla. Tambi¨¦n permite crear im¨¢genes panor¨¢micas. Por supuesto no cuenta con conexi¨®n a internet, y esa es su principal desventaja frente a la c¨¢mara de un tel¨¦fono. Pues est¨¢ claro que la mayor¨ªa de las fotos que se hagan con ella terminaran en alguna red social.

Para acceder a la mayor¨ªa de sus funciones debemos usar su pantalla t¨¢ctil de tres pulgadas, que responde razonablemente bien a los dedos. Aunque cuenta con botones para controlar el zum ¨®ptico -una de sus grandes ventajas frente a la c¨¢mara de un tel¨¦fono-, activar directamente la grabaci¨®n de v¨ªdeo -en alta definici¨®n Full HD- y revisar las fotos que hagamos.

Su sensor de 12 megap¨ªxeles y su objetivo, firmado por Leica, no proporcionan una calidad de imagen como para dejarnos boquiabiertos, pero si superior a lo que ofrecen las c¨¢maras de la inmensa mayor¨ªa de los tel¨¦fonos (aunque s¨®lo gana por los pelos a la del iPhone 4S y a las de algunos tel¨¦fonos de Nokia).

En cualquier caso es lo suficientemente buena para hacer fotos con luz del d¨ªa o con flash y obtener copias en papel a un tama?o m¨¢s o menos generoso. Por otra parte, no es que sea tremendamente r¨¢pida, pero si lo suficientemente para que no se nos escapen muchas fotos. Algo que suele ser el tal¨®n de Aquiles de las c¨¢maras que incorporan muchos m¨®viles.

Sus principales puntos flacos son su precio, 249 euros, lo que la convierte en un capricho algo caro, y su bater¨ªa. Pues si usamos el flash la c¨¢mara no tarda en quedarse sin energ¨ªa. En cualquier caso los fans de los retratos tramposos a los que se les quede corta la c¨¢mara del tel¨¦fono les merecer¨¢ la pena llevarla siempre encima. Eso s¨ª, no vale salir con una piel de reci¨¦n nacido en las fotos y dejar a los dem¨¢s con ojeras.