La Pablo Motos de EE UU que viraliza sus meteduras de pata
Megyn Kelly, la periodista que dijo que no a 10 millones de d¨®lares por seguir en la Fox, dirige el nuevo matinal de la NBC. En pocos d¨ªas, ha logrado multiplicar la indignaci¨®n de invitados como Jane Fonda o Debra Messing.
Megyn Kelly no lleva ni un mes al frente de uno de los tramos clave de las ma?anas de la NBC, pero los cortes de su programa son ya los m¨¢s compartidos en las redes sociales. La cadena en abierto m¨¢s importante de Estados Unidos, propiedad de uno de los gigantes de la comunicaci¨®n norteamericana a la que Trump le ha declarado la guerra en numerosas ocasiones, entre otras cosas, por ser el canal en el que se emite Saturday Night Live¨C?ha fichado a Kelly, mujer blanca, rubia, de 46 a?os, divorciada y casada de nuevo, con tres hijos, exabogada y anteriormente conductora estrella en la divisi¨®n de noticias de la conservadora Fox. All¨ª estaba al frente del espacio nocturno de actualidad pol¨ªtica m¨¢s visto del pa¨ªs en la televisi¨®n por cable, pero ahora lleva d¨ªas siendo objeto de fuertes cr¨ªticas y algunas de sus desafortunadas intervenciones en el show matinal que presenta desde el 25 de septiembre. Intervenciones se han hecho virales en todo el mundo. Entre ellas, su descarado comentario a un fan de Will & Grace o la impertinente pregunta a Jane Fonda que ha convertido la brillante reacci¨®n de la actriz en uno de los memes del momento.
A cuadros se quedaron Debra Messing y sus compa?eros de reparto en la ic¨®nica comedia pionera en autoparodiar los topicazos gays y que regresa a la tele once a?os despu¨¦s de su ¨²ltima emisi¨®n, cuando Kelly le pregunt¨® a un fan presente en ese momento en el plat¨® si se hab¨ªa hecho abogado y homosexual gracias al personaje interpretado por Eric McCormack en la serie. A las pocas horas, Messing lamentaba en un su Instagram su paso por el magac¨ªn.
Algo parecido le pasaba a Jane Fonda al tiempo de promocionar Nosotros en la noche, la pel¨ªcula de Netflix que la ha vuelto a juntar con Robert Redford. ¡°Parece ser que no est¨¢s orgullosa de haber reconocido p¨²blicamente que te has hecho varios retoques est¨¦ticos, ?c¨®mo es eso?¡±, le pregunta Kelly a Fonda en un momento de su entrevista, dej¨¢ndola completamente descolocada. ¡°?De verdad tenemos que hablar de esto ahora?¡±, responde ojipl¨¢tica Jane.
Y estos no han sido sus ¨²nicos traspi¨¦s. Todos y cada uno de ellos quedan diariamente recogidos en una de las columnas m¨¢s hilarantes del portal Jezebel. L¨¢stima que todav¨ªa estuviera en la Fox cuando puso en evidencia a una conocida columnista afroamericana que escribi¨® un art¨ªculo en tono sarc¨¢stico defendiendo que Santa Claus deber¨ªa ser un hombre negro y a Kelly le dio por reivindicar, en directo y en mitad de las noticias, su origen cauc¨¢sico. Si no lo han hecho ya, y los n¨²meros no la respaldan, sus fuertes convicciones y su torpeza dial¨¦ctica chocan con el p¨²blico ¡°blanco¡± que consume televisi¨®n de 7 a 10 de la ma?ana, por muy tradicionalista que sea su perfil.
El de Kelly ha sido el fichaje m¨¢s caro del a?o en los medios estadounidenses: 15 millones de d¨®lares (casi 13 millones de euros) por temporada, frente a los 25 (21 millones de euros) que le ofrec¨ªan en la Fox por quedarse. Y todo para intentar levantar una de las franjas horarias de contenido m¨¢s amable pero comercialmente m¨¢s agresivo de la parrilla televisiva. Este no es, sin embargo, el primer formato que presenta Megyn en su nueva cadena. Este verano hac¨ªa aguas su primer proyecto, Megyn Kelly Tonight, tras solo ocho entregas. Ocho episodios en los que, al menos, se gan¨® la complicidad de Vladimir Putin ¨Cmuy comentado fue el vestido de terciopelo firmado por el dise?ador Yigal Azrou?l que eligi¨® para encontrarse con ¨¦l en San Petersburgo¨C en una entrevista al estilo provocador, si bien no siempre resoluto que la caracteriza.
Ese mismo genio y figura? la llev¨® a enfrentarse sistem¨¢ticamente a Donald Trump durante su carrera hacia la Casa Blanca, llegando a recibir continuos insultos y amenazas por parte del actual presidente y sus seguidores, tal y como relata en sus memorias. Las mismas, todo un superventas en la famosa lista del New York Times desde que salieran a la venta hace un a?o, en las que asegura que quisieron envenenarla justo antes de ejercer como moderadora en uno de los debates presidenciales. Ahora entendemos quiz¨¢ mejor el gui?o tras la camisa rosa con lazo de Gucci que luci¨® el d¨ªa en que se estrenaba Megyn Kelly Today. Pr¨¢cticamente el mismo modelo que se puso Melania Trump en uno de los ¨²ltimos actos de campa?a de su marido y con el que casi creemos que intentaba colarnos un mensaje feminista.
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