Un preservativo de colocaci¨®n ultrar¨¢pida
Comienza a comercializarse en Sur¨¢frica un modelo de cond¨®n que puede ponerse en s¨®lo un segundo
Usar un preservativo, un producto que evita embarazos no deseados y salva millones de vidas, puede ser un engorro. No siempre es f¨¢cil abrir el envase y hacerlo con las u?as o los dientes puede romper su contenido. Luego hay que extraerlo de la funda y decidir en qu¨¦ sentido debe desenrrollarse alrededor del pene. El proceso en total puede durar varios segundos, lo que en ocasiones disuade a sus potenciales usuarios y genera grav¨ªsimos riesgos.
Ver demostraci¨®n del uso de Pronto |
Para evitar este problema y facilitar su uso, una empresa africana lanzar¨¢ esta semana un innovador modelo de preservativo de colocaci¨®n ultrr¨¢pida. Los condones Pronto, que seg¨²n cuentan sus impulsores en su p¨¢gina web (www.prontocondoms.co.za) pueden ponerse en menos de un segundo, estar¨¢n disponible desde esta semana s¨®lo en Sur¨¢frica, uno de los pa¨ªses donde el sida ha hecho mayores estragos.
La empresa responsable de los profil¨¢cticos asegura que simplemente hay que romper el paquete por la mitad y desenrollar el preservativo directamente sobre el pene, sin siquiera tocarlo con las manos (ver demostraci¨®n a la derecha). Como si de una tirita se tratase. Un posible pega a este innovador dise?o es que requiere del uso de ambas manos, algo que no es imprescindible en los modelos tradicionales.
La idea de este producto fue concebida en 2001 por el inventor surafricano Willem van Rensburg, molesto por el fastidioso ritual que ten¨ªa que llevar a cabo cada vez que se pon¨ªa un cond¨®n. "Debe haber una manera mejor", pens¨®. Y de esa reflexi¨®n ha surgido, cinco a?os despu¨¦s, el preservativo ultrar¨¢pido.
En la web de Pronto tambi¨¦n se ironiza sobre dos pol¨ªticos surafricanos -el ex vicepresidente Jacob Zuma y la ministra de Sanidad, Manto Tshabalala-Msimang, muy criticados por sus irresponsables comentarios sobre la prevenci¨®n del sida. Zuma asegur¨® que se dio una ducha para no contraer la enfermedad tras mantener relaciones no protegidas con una portadora del virus. Tshabalala ha llegado a asegurar que el consumo de ajo, remolacha o espinacas retrasan el desarrollo del sida.
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